Las FARC nombran a Timochenko como sucesor de Alfonso Cano
Analistas del conflicto armado colombiano apuntan a que el nuevo jefe de esta guerrilla se refugia en Venezuela
Su nombre de bautizo es Rodrigo Londo?o Echeverri y el elegido por ¨¦l cuando entr¨® a las FARC es el de Timochenko. Desde ayer es el n¨²mero uno de las FARC, en reemplazo del abatido Alfonso Cano.
¡°Queremos informarles que el camarada Timole¨®n Jim¨¦nez (Timochenko), con el voto un¨¢nime de sus compa?eros del Secretariado, fue designado el 5 de noviembre, nuevo comandante de las FARC-EP¡±, dice un comunicado del grupo rebelde conocido en la tarde de este martes en Colombia.
Su elecci¨®n resume la paradoja en que se encuentra las FARC: es una vieja guerrilla comunista sin ning¨²n respaldo popular que delira con la toma del poder por la v¨ªa armada.
Fue en la URSS donde este hombre realiz¨® sus estudios de medicina con especialidad en cardiolog¨ªa. Sin embargo, no son sus dotes cient¨ªficas lo que lo han llevado a esta posici¨®n sino una habilidad innata para el manejo de las finanzas. A trav¨¦s del secuestro, el boleteo y la extorsi¨®n han logrado fortalecer las unidades militares que le han encomendado.
Su nombramiento toca tambi¨¦n el sensible tema de las relaciones entre Colombia y Venezuela, pues los organismos de inteligencia en Bogot¨¢ afirman en voz baja que Timochenko se refugia al otro lado de la frontera. Sin embargo, nadie se atreve a decirlo en p¨²blico por orden expresa del presidente Juan Manuel Santos quien maneja con guantes de seda a Hugo Ch¨¢vez.
En el Gobierno de ?lvaro Uribe, desde el mismo expresidente hacia abajo, se afirmaba con contundencia que Ch¨¢vez daba refugio a varios comandantes de las FARC. La reacci¨®n de ¨¦ste fue tan acalorada que incluso los dos pa¨ªses estuvieron a punto de llegar a un conflicto b¨¦lico.
Cuando Santos asumi¨® la presidencia (el 7 de agosto de 2010), cambi¨® de t¨¢ctica y llam¨® a Ch¨¢vez como su ¡°nuevo mejor amigo¡±. El comercio bilateral se recuper¨®, los empresarios volvieron a hacer sus negocios y, sobre todo, la poblaci¨®n de uno y otro pa¨ªs que vive a lo largo de la frontera (2.219 kil¨®metros, la mayor¨ªa selv¨¢ticos) volvi¨® a movilizarse sin problemas.
A pesar de los buenos vientos que soplan en las relaciones, a pocos le quedaban dudas que Timochenko e Iv¨¢n M¨¢rquez, ahora el n¨²mero 2 de las FARC, estaban en Venezuela. Sin embargo, este martes cuando las FARC comunicaron quien era el elegido, ninguna fuente del Gobierno se atrevi¨® a decir cu¨¢l era su paradero.
Las FARC, catalogadas como una organizaci¨®n terrorista por Estados Unidos y la Uni¨®n Europea, insisten en que la toma del poder est¨¢ cerca pese a que las Fuerzas Armadas en un par de a?os les han dado severos golpes: la operaci¨®n Jaque que permiti¨® la liberaci¨®n de Ingrid Betancourt; la muerte de Ra¨²l Reyes, en un campamento en Ecuador; del Mono Jojoy, y la de Alfonso Cano. ¡°Se garantiza as¨ª la continuidad del Plan Estrat¨¦gico hacia la toma del poder para el pueblo. La cohesi¨®n de sus mandos y combatientes, como dec¨ªa Manuel Marulanda V¨¦lez, sigue siendo uno de los m¨¢s importantes logros de las FARC¡±
Para las FARC, los an¨¢lisis por la baja de Alfonso Cano, que auguraban el debilitamiento y pr¨®ximo fin de la guerrilla, est¨¢n fuera de discusi¨®n. ¡°Esos pobres analistas y pol¨ªticos mediocres, aduladores del poder, que hoy hablan del derrumbe de las FARC ante la muerte del comandante, son tan ignorantes que ni siquiera merecen el gesto de nuestro desprecio¡±
Al contrario, en la informaci¨®n le env¨ªa un mensaje al exl¨ªder m¨¢ximo: ¡°Comandante Alfonso Cano: sus lineamientos en el campo militar y pol¨ªtico ser¨¢n cumplidos al pie de la letra¡±.
Ese es el objetivo, seg¨²n las DARC, que ahora deber¨¢ guiar Timochenko, un hombre que se acerca a los 60 a?os, preparado acad¨¦micamente, y que dejo la ciencia para abrazar la causa comunista.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.