El terrorismo islamista se ceba con los cristianos en Nigeria
Los ataques atribuidos a la secta Boko Hakam han dejado cerca de 500 v¨ªctimas mortales en 2011 Fuentes del grupo reivindican la cadena de atentados, en venganza por la muerte de musulmanes
Nigeria intenta reponerse de los atentados del d¨ªa de Navidad, que elevan a cerca de 500 el n¨²mero de personas muertas este a?o en el pa¨ªs por actos terroristas atribuidos a la secta islamista Boko Haram. Los ataques contra varias iglesias cristianas durante la celebraci¨®n navide?a han generado una condena generalizada por parte de la comunidad internacional y del Gobierno de Nigeria. El m¨¢s grave cost¨® la vida a 35 personas en Madalla, cerca de Abuja, la capital, aunque hubo otros en Jos (centro del pa¨ªs) y Gadaka (noreste).
¡°Quiero asegurar a todos los nigerianos que el Gobierno no va a ceder en su determinaci¨®n para llevar a la justicia a los autores de estos actos de violencia y de los anteriores¡±, dijo el domingo Goodluck Jonathan, presidente de Nigeria. Estados Unidos y la ONU han condenado los ataques.
Un supuesto portavoz de Boko Haram, que se identific¨® con el nombre de? Abul Qaqa, asumi¨® la responsabilidad de los atentados en una entrevista concedida al peri¨®dico The Daily Trust y dijo que eran una venganza por las muertes de musulmanes en Jos durante las pasadas celebraciones de la festividad musulmana de Aid el Fitr.
Sin embargo, un portavoz policial ha se?alado este lunes que a¨²n no se ha determinado la autor¨ªa de los ataques: ¡°No estamos considerando solo a Boko Haram, porque otra gente que pretende desestabilizar el Gobierno podr¨ªa estar haciendo estas cosas en nombre de Boko Haram¡±, ha dicho Richard Ouguche, de la Polic¨ªa del Estado de N¨ªger, al que pertenece Madalla.
La secta pretende establecer un Estado isl¨¢mico en el pa¨ªs basado en la 'shar¨ªa'
Esta secta naci¨® en 2002 en Maiduguri, en el noreste de Nigeria, una zona tradicionalmente olvidada por el Gobierno federal del pa¨ªs, considerado corrupto y dedicado sobre todo a la administraci¨®n de los enormes recursos petrol¨ªferos del delta del N¨ªger en el sur.
El l¨ªder y fundador de Boko Haram, el cl¨¦rigo Mohammed Yusuf, estableci¨® una escuela y una mezquita desde las que condenaba cualquier actividad considerada occidental y defend¨ªa la creaci¨®n en el norte de Nigeria de un Estado isl¨¢mico basado en la shar¨ªa.
En 2004, el grupo cre¨® un campo de entrenamiento llamado Afganist¨¢n en el poblado de Kanamma, en el norte del pa¨ªs, desde donde comenz¨® a atacar a polic¨ªas y oficiales del Gobierno que no se adher¨ªan a su estricta interpretaci¨®n del islam.
Boko Haram, que significa "la educaci¨®n occidental es sacr¨ªlega" es en realidad un apodo que dieron a esta secta los habitantes de Maiduguri. El nombre completo del grupo es Jama'atu Ahlis Sunna Lidda'awati wal-Jihad, que quiere decir "personas comprometidas con la difusi¨®n de las ense?anzas del profeta y la guerra santa". A sus miembros se les conoce tambi¨¦n como "los talibanes nigerianos"
¡°Boko Haram responde esencialmente a la frustraci¨®n ante la corrupci¨®n y a las consecuencias de? males sociales como la pobreza y el desempleo¡±, dec¨ªa hace unos meses Abdulkarim Mohammed, un estudioso de este grupo, a IRIN, la agencia de noticias humanitarias de Naciones Unidas.
Los expertos creen que Boko Haram tiene v¨ªnculos con Al Qaeda en el Magreb y la milicia somal¨ª Al Shabab
Nigeria, con una extensi¨®n algo menor que el doble de Espa?a, es el pa¨ªs m¨¢s poblado de ?frica, con 160 millones de habitantes, y uno de los m¨¢s ricos en recursos naturales, gracias al petr¨®leo del delta del N¨ªger. Con una producci¨®n de unos 2,5 millones de barriles diarios, Nigeria es el mayor productor de crudo de ?frica y el d¨¦cimo del mundo, por delante de pa¨ªses como Irak, Kuwait o Venezuela.
Pero esta riqueza natural no se ha traducido en el desarrollo econ¨®mico y social del pa¨ªs. Alrededor del 70% de la poblaci¨®n sigue viviendo bajo el umbral de la pobreza, sobre todo en el norte del pa¨ªs, de mayor¨ªa musulmana.
¡°Los j¨®venes ven c¨®mo [los recursos de la naci¨®n] son malgastados por una reducida ¨¦lite ¨²nicamente preocupada por s¨ª misma, lo que crea rencor y frustraci¨®n. Ese enfado acaba finalmente traduci¨¦ndose en brotes de violencia¡±, se?alaba Abdulkarim Mohammed.
La secta pas¨® a ser conocida internacionalmente en 2009, cuando sus miembros protestaron y quemaron estaciones de polic¨ªa en la regi¨®n de Maiduguri. La polic¨ªa detuvo entonces a muchos de sus militantes, incluido su l¨ªder, que fue ejecutado en una comisar¨ªa. Los enfrentamientos entre las autoridades y seguidores de la secta causaron unos 700 muertos.
En septiembre de 2010, miembros de Boko Haram asaltaron la prisi¨®n federal de Bauchi y liberaron a unos 700 presos, muchos de ellos correligionarios.
Aunque en un principio limit¨® sus reivindicaciones al empobrecido norte del pa¨ªs, Boko Haram ha ido recurriendo a estrategias cada vez m¨¢s sofisticadas y ampliando sus objetivos. En la actualidad, hay expertos que la consideran conectada a la rama de Al Qaeda en el Magreb e incluso a la milicia islamista somal¨ª Al Shabab, tambi¨¦n en la ¨®rbita de Al Qaeda.
En agosto de este a?o, Boko Haram llev¨® a cabo el que se considera fue su primer ataque suicida. Fue contra un edificio de la ONU en Abuja, y en la explosi¨®n murieron 23 personas y 76 resultaron heridas. Tras ese atentado, el grupo difundi¨® un v¨ªdeo en el que el supuesto terrorista suicida alababa al l¨ªder de Al Qaeda, Osama bin Laden.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.