El exilio venezolano protesta por el cierre del consulado en Miami

?En uno de los pasajes m¨¢s vehementes de su alocuci¨®n ante el Parlamento, el viernes pasado, Hugo Ch¨¢vez decidi¨® que cerrar¨ªa, hasta nuevo aviso, el Consulado de Venezuela en la ciudad de Miami. "Vamos a hacer el cierre administrativo [de la sede diplom¨¢tica] mientas estudiamos la situaci¨®n", dijo el presidente-comandante, como reacci¨®n a la expulsi¨®n, una semana antes, de la c¨®nsul venezolana en esa ciudad, Livia Acosta, acusada de participar en un supuesto plan, tramado por Ir¨¢n, para ejecutar un ataque cibern¨¦tico contra las plantas nucleares de Estados Unidos. Al Departamento de Estado le ha tenido sin cuidado la medida, que en cambio ha sido criticada por la comunidad venezolana en la Florida, identificada mayoritariamente con la oposici¨®n y que ahora corre el riesgo de no poder votar contra Ch¨¢vez en las elecciones presidenciales del 7 de octubre pr¨®ximo.

"Aqu¨ª hay 20 mil votantes y el 95% de ellos est¨¢ a favor de la oposici¨®n. Por eso el inter¨¦s del Gobierno de cercenar el derecho al voto de nosotros", ha dicho a EL PA?S, en conversaci¨®n telef¨®nica, Pedro Mena: coordinador de la Mesa de Unidad Democr¨¢tica en Miami, la alianza opositora que re¨²ne a m¨¢s de 20 partidos y que elegir¨¢ el 12 de febrero a un candidato ¨²nico que se enfrente a Ch¨¢vez. "El Gobierno sabe que, tal y como est¨¢ creciendo la oposici¨®n, puede haber un resultado cerrado y los votos del exterior pueden decidir la elecci¨®n presidencial", asegura Mena.

El argumento de la Canciller¨ªa venezolana para cerrar las puertas de la misi¨®n ha sido otro. Ch¨¢vez mencion¨® durante su mensaje anual al Poder Legislativo, que llevaba alg¨²n tiempo considerando esa decisi¨®n que anunci¨® en un segundo. Y el ministerio de Exteriores venezolano dijo el lunes, a trav¨¦s de un comunicado, que ordenaba la inmediata repatriaci¨®n de todos sus funcionarios despu¨¦s de haber "constatado con extrema preocupaci¨®n el incremento de las amenazas que pesan sobre el personal consular venezolano".

Esos ataques, esas intimidaciones, habr¨ªan comenzado despu¨¦s del 8 de diciembre de 2011: cuando la cadena hispano-estadounidense Univisi¨®n transmiti¨® en horario estelar el documental titulado: "La amenaza iran¨ª". El documental producido por Univisi¨®n gira en torno a la tesis de que Ir¨¢n, Venezuela y Cuba tramaban un compl¨® para desarrollar un ataque cibern¨¦tico contra la Casa Blanca, algunos organismos de inteligencia de Estados Unidos y otras tantas plantas nucleares. De acuerdo a esta versi¨®n, la c¨®nsul venezolana en Miami, Livia Acosta, habr¨ªa sido un contacto clave de esta supuesta operaci¨®n.

Este martes, el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Mark Toner, admiti¨® que por esos d¨ªas de diciembre las autoridades locales visitaron el consulado venezolano en Miami "con algunas preocupaciones menores sobre su seguridad, pero desde entonces no hemos recibido nuevas peticiones de ayuda". Durante la conferencia diaria que suele ofrecer, Toner dijo que tales problemas "no eran significativos" y que eran "preocupaciones por su seguridad, no amenazas".

El sur de la Florida es el ¨¢rea de los Estados Unidos donde se concentra la mayor colonia venezolana. Solo en el suburbio del Doral, que forma parte del condado de Miami-Dade, constituyen una mayor¨ªa del 20% y cuentan con un concejal y con un candidato a alcalde. M¨¢s all¨¢ de las especulaciones, lo concreto para ellos es que este martes el Consulado de Venezuela en Miami no abri¨® sus puertas y hasta nuevo aviso, no ofrecer¨¢ sus servicios a la comunidad de 200 mil connacionales que viven en los Estados de Florida, Georgia y Carolina del Norte y del Sur. Los pensionistas no podr¨¢n cobrar sus pensiones. Los importadores no podr¨¢n solicitar certificados de origen. Y para efectuar cualquier tr¨¢mite, mayor o menor, la comunidad venezolana de la zona deber¨¢ viajar hasta 18 horas en coche para llegar al consulado m¨¢s cercano, en New Orleans.