Tu coche viene de una cadena de montaje polaca

?Tienes un Audi, un Mercedes o un Fiat Panda? Es probable que hayan sido montados en una cadena dise?ada por la empresa polaca Transsystem. Sus cadenas de montaje est¨¢n dise?adas para que el coche ¡°incorpore¡± la mejor calidad. Encontrar el pueblo de Wola Dalsza, de la regi¨®n de la regi¨®n cercana a los montes C¨¢rpatos, solo es posible en mapas muy exactos.Tiene 1-700 habitantes, y est¨¢ a 50 kil¨®metros de la frontera con Ucrania. El l¨ªmite m¨¢s oriental de la Uni¨®n Europea.

En las proximidades se encuentra ?a¨½cut, localidad conocida por un hermoso castillo construido en la Edad Media por colonos tra¨ªdos desde Landshut (Baviera) hasta all¨ª por soberanos polacos.

A finales del siglo XIX, los terrenos al este de ?a¨½cut constitu¨ªan la tercera regi¨®n petrolera del mundo (despu¨¦s de Bak¨² en el mar Caspio y de Texas en Estados Unidos). En este lugar naci¨® Jan Zeh, que junto con Jan ?ukasiewicz fue el primero en el mundo en construir una refiner¨ªa de petr¨®leo. De ella extra¨ªa el producto de destilaci¨®n para las l¨¢mparas de petr¨®leo. Posteriormente, a partir del petr¨®leo empezaron a producir gasolina, la aut¨¦ntica sangre de la motorizaci¨®n contempor¨¢nea.

En la industria automovil¨ªstica lo que cuenta es la calidad y el cumplimientos de los plazos de entrega de los encargos

En Wola Dalsza se encuentra la sede de la empresa Transsystem. Fue Stanis?aw Sroka, un ingeniero el¨¦ctrico que hab¨ªa estudiado en la Universidad Polit¨¦cnica de Gliwice, quien fund¨® Transsystem junto con un hermano suyo y dos amigos.

Era el a?o 1991. En Polonia gobernaba la antigua oposici¨®n, que hab¨ªa surgido del movimiento Solidaridad. Se produjo la ca¨ªda del Muro de Berl¨ªn. La econom¨ªa socialista planificada hab¨ªa pasado a la historia y empezaba la ¨¦poca de la iniciativa empresarial privada.

¡°Desaparecieron muchas f¨¢bricas. Mi hermano y un amigo se encontraron sin trabajo, y yo contaba con 1.000 zlotys para fundar la compa?¨ªa .Los hab¨ªa ganado trabajando en la Rep¨²blica Checa, Alemania y Espa?a¡±, recuerda Stanis?aw Sroka, que adem¨¢s de esa ¡°fortuna¡± trajo consigo contactos con empresarios extranjeros e ideas sobre qu¨¦ vale la pena vender en Europa Occidental.

Empezaron por la producci¨®n de envoltorios para maquinaria industrial. Les llegaban encargos a mansalva. Y justo en ese momento, en Wola Dalsza las autoridades locales hab¨ªan puesto a la venta el Centro Estatal de Maquinaria, que debido a las deudas se hab¨ªa ido a pique (durante el periodo de socialismo real este tipo de empresas estatales se encargaban de dar servicio ala maquinaria agr¨ªcola de las cooperativas agrarias). Compraron el centro y pudieron producir a mayor escala tanto envoltorios como otros elementos necesarios para las cadenas de producci¨®n.

"En la industria automovil¨ªstica lo que cuenta es la calidad y el cumplimientos de los plazos de entrega de los encargos. Nosotros cumpl¨ªamos religiosamente con todo¡±, afirma Sroka. Seguro que tambi¨¦n ayudaron los bajos costes del trabajo de la parte polaca.

Dise?ador y fabricante

En el a?o 1994, los socios polacos vendieron una parte de las participaciones de Transsystem a la empresa alemana Fredenhagen, un antiguo cliente suyo. Gracias a esta transacci¨®n, Transsystem fue dotada con maquinaria y dinero y pudo dar un nuevo salto en su desarrollo empresarial. ¡°Al principio ¨¦ramos subcontratistas. M¨¢s tarde decidimos convertirnos en proveedores de sistemas de transporte autom¨¢tico en las cadenas de producci¨®n¡±, explica Sroka.

El cambio decisivo en la industria automovil¨ªstica se produjo cuando se invent¨®, hace 100 a?os, la cadena de montaje

Transsystem ya no solo instalaba maquinaria de ese tipo,sino que tambi¨¦n empez¨® a dise?arla y a producirla. En la actualidad, de sus cadenas de montaje en las poblaciones alemanas de Neckarsulm, Volkswagen en Emden, Wolfsburg,en Eslovaquia y en China, salen los coches de la marca Audi, los de Fiat,Mercedes, Opel y los autom¨®viles del consorcio Peugeot-Citroen.

El cambio decisivo en la industria automovil¨ªstica se produjo cuando se invent¨®, hace 100 a?os, la cadena de montaje. En una de las f¨¢bricas de Henry Ford comenzaron a montarse las piezas de la carrocer¨ªa de un coche que ya ten¨ªa las ruedas atornilladas y que era desplazado por medio de cuerdas a lo largo de la f¨¢brica. En la actualidad, el proveedor de las instalaciones de todas las f¨¢bricas del mundo de General Motors es la empresa polaca Transsystem.

Las cadenas de montaje de hoy constituyen casi una obra maestra de las artes aplicadas. Est¨¢n dise?adas para que cumplan los requisitos medioambientales,pero sobre todo para que se garantice la m¨¢xima calidad de los autom¨®viles. ¡°El empleado se mueve por la cadena de montaje sin tener que andar mirando hacia abajo, por si se choca con ning¨²n obst¨¢culo. Gracias a ello no se despista y no comete errores¡±, asegura Sroka.

El productor principal

Transsystem dio el siguiente salto en su desarrollo empresarial en el a?o 2007, al recuperar la parte de la empresa que hab¨ªa comprado su socio alem¨¢n, la empresa Fredenhagen. ¡°En la llegada de la crisis vimos una buena oportunidad. Ahora somos nosotros los que tenemos en Alemania nuestra propia empresa y contratamos a trabajadores alemanes que nos consiguen encargos. Hemos llegado a convertirnos en el productor principal de sistemas de transporte. Solo hay dos empresas similares en toda Europa, pero en Europa Central somos los m¨¢s importantes¡±, afirma Stanis?aw Sroka.

Hace 20 a?os su empresa ten¨ªa 14 trabajadores y 300.000 zlotys anuales de ingresos. Hoy ha alcanzado las 1.100 personas y gana entre 200 y 300 millones de zlotys. La empresa anda a la busca de nuevos clientes en os sectores energ¨¦tico y tur¨ªstico. Se encarga de suministrar estaciones de esqu¨ª a los complejos hoteleros de Suiza y Espa?a.

El jefe de Transsystem no tiene ninguna duda de que la entrada de Polonia en la UE facilit¨® el acelerado desarrollo de su empresa. ¡°Hasta entonces exist¨ªan limitaciones para la entrada en los mercados de los pa¨ªses de la Uni¨®n. Ahora somos tratados como iguales por las empresas de otros pa¨ªses¡±, remacha Sroka. Y no puede ni imaginarse que todo pueda acabar con la desintegraci¨®n de la Uni¨®n Europea.

Dentro de poco los conductores europeos podr¨¢n ponerse al volante del peque?o Volkswagen Up! o del nuevo Mercedes clase A, tambi¨¦n de peque?as dimensiones. Que por supuesto habr¨¢n salido de las cadenas de montaje de Wola Dalsza, en el l¨ªmite oriental de la Uni¨®n Europea.