?Se detendr¨¢ la inercia ganadora del PRI?

El pr¨®ximo 30 de marzo dar¨¢n inicio las campa?as para elegir presidente de la Rep¨²blica, senadores y diputados federales. M¨¢s adelante, tambi¨¦n arrancar¨¢n las de siete gubernaturas, y en ocho Estados m¨¢s, habr¨¢ comicios para alcaldes y congresos locales.

Con la selecci¨®n de los candidatos a la presidencia de la Rep¨²blica de los tres principales contendientes (falta por definir con qui¨¦n jugar¨¢ el partido Nueva Alianza tras romperse su pacto con el PRI), comienza la publicaci¨®n de encuestas que hasta ahora han coincidido en darle una clara ventaja a la alianza PRI-PVEM con Enrique Pe?a Nieto como candidato a la presidencia, ventaja que var¨ªa entre 12 y 20 puntos porcentuales.

El listado nominal, es decir, el n¨²mero de personas habilitadas para votar el pr¨®ximo 1 de julio seg¨²n el corte del Registro Federal de Electores al 3 de febrero, es de casi 78 millones de electores repartidos en m¨¢s de 2.400 ayuntamientos.

En 94 de esas alcald¨ªas (considerando como municipios a cada una de las 16 delegaciones pol¨ªticas del Distrito Federal) vive el 50% de los electores, mientras que otros 23,4 millones (30% de la lista nominal) est¨¢n dispersos en m¨¢s de 2.100 ayuntamientos (88% del total de municipios), es decir, que la mitad de la elecci¨®n se va a definir en el 3,8% de los ayuntamientos.

Independientemente de la preferencias electorales que se van marcando en la coyuntura, es interesante revisar los n¨²meros desde los que parte la competencia de este 2012 considerando los resultados de las elecciones locales que se han llevado a cabo entre 2009 y 2011 en todas y cada una de las entidades federativas, en unos casos para gobernador, en otros para presidentes municipales.

Si sumamos los votos que han obtenido los partidos en el ¨²ltimo trienio tenemos que la alianza PRI-PVEM arranca con 16,8 millones de votos emitidos, Acci¨®n Nacional con 11 millones y la alianza PRD-PT-PC con 8 millones (en varias elecciones locales el PAN y el PRD compitieron en alianza, por lo que se separaron los votos obtenidos de acuerdo a la proporci¨®n que obtuvo cada partido en la federal de 2009). Nueva Alianza obtuvo 1,2 millones de votos en las elecciones locales.

Si calculamos la votaci¨®n efectiva con estos n¨²meros podemos decir que en el escenario inicial rumbo a la elecci¨®n del 1 de julio, PRI-PVEM tiene el 45% de los votos emitidos en las elecciones locales, el PAN el 30%, la alianza PRD-PT-PC, el 22% y el PANAL, el 3% restante, con una participaci¨®n promedio del 47% de los electores. Como pueden observar, los resultados de las elecciones locales del trienio 2009-2011 en votaci¨®n efectiva presentaron resultados muy similares a los que hoy est¨¢n dando las encuestas sobre preferencias electorales para presidente de la Rep¨²blica, es decir que Pe?a Nieto est¨¢ manteniendo la inercia que ya llevaba el PRI en las elecciones locales, lo que no es poca cosa si se piensa que hace seis a?os el candidato Roberto Madrazo no solo detuvo la inercia ganadora del PRI, sino que su candidatura la revirti¨®.

Ahora bien, un 47% de participaci¨®n se antoja poco para una elecci¨®n de presidente de la Rep¨²bica. Como muy poco, podemos esperar que se movilice a votar el 55% de los electores, es decir, que habr¨¢ en juego por lo menos seis millones y medio de votos m¨¢s que los que se tuvieron en las elecciones locales.

Lo l¨®gico es pensar que dado el nivel de conocimiento que tiene Pe?a Nieto y el tiempo que lleva fungiendo como el elegido para ser el candidato pri¨ªsta, la mayor¨ªa de esos votos adicionales no sean para ¨¦l (adem¨¢s hay que considerar que cuando el PRI obtuvo esos votos gobernaba los Estados de Oaxaca, Puebla y Sinaloa en los que se concentran 10 millones de electores que ahora son gobernados por otros partidos).

Si los votos adicionales se reparten entre la candidata del PAN, Josefina V¨¢zquez Mota y el candidato de PRD-PT-PC, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, el PRI se mantendr¨ªa como el partido ganador con una ventaja menor pero ventaja al fin; pero si esos votos adicionales se inclinan mayoritariamente por una de las dos opciones entonces Pe?a Nieto puede verse en una situaci¨®n de muy alta competencia, la cual puede mover los votos anti-PRI (que todav¨ªa suman millones) hacia la opci¨®n que est¨¦ d¨¢ndole la mayor competencia y con ello se podr¨ªa revertir la inercia ganadora que el PRI ha mantenido hasta ahora. Como siempre, en esto de las elecciones, nada est¨¢ escrito.