"Nos cansamos de gritar; nadie nos abri¨®"
Las autoridades ya contabilizan m¨¢s de 377 fallecidos en el penal de Comayagua, a 75 kil¨®metros de la capital, Tegucigalpa Los testigos relatan escenas dram¨¢ticas de los reos saltando al vac¨ªo. "Saltamos al patio desde lo alto del muro. El resto, muri¨® abrasado", cuenta un superviviente
Honduras vivi¨® este mi¨¦rcoles la mayor tragedia de su sistema penitenciario. Seg¨²n las autoridades, al menos 377 personas murieron en una c¨¢rcel de Comayagua, en el centro de Honduras, a 75 kil¨®metros de la capital, Tegucigalpa, a causa de un inmenso incendio ocurrido en la madrugada. En la prisi¨®n, que estaba construida para 250 personas, se encontraban hacinados unos 850 presos, seg¨²n datos publicados por la prensa local.
Para muchos de los reos sus paredes se convirtieron en una jaula de fuego sin v¨ªa de escape. ¡°Me despertaron los gritos de mis compa?eros, que intentaban romper el techo de madera y zinc [de la celda]", dijo en declaraciones a la televisi¨®n hondure?a V¨ªctor Sevilla, de 23 a?os y condenado a 12 a?os por homicidio. "Por ah¨ª pudimos salir al exterior. Saltamos al patio desde lo alto del muro. Pero el resto muri¨® abrasado por las llamas".
Al fuego, seg¨²n un testimonio recogido por la agencia EFE, se uni¨® la falta de ayuda urgente. "Nadie abri¨® los portones, nos cansamos de gritar; tuvimos que saltar nosotros".
Otro interno relat¨® a la agencia Reuters c¨®mo se o¨ªa padecer a quienes quedaron dentro. ¡°Escuch¨¢bamos los gritos de los prisioneros agarrados por el fuego¡±, explic¨® el superviviente, mostrando los dedos de las manos que se fractur¨® en el intento de huir de las llamas.
Los cad¨¢veres est¨¢n siendo llevados a un campo de f¨²tbol ¡°porque son tantos¡± que se requiere de un espacio grande
Los familiares de los reclusos llegaron desesperados hasta las zonas cercanas del presidio, en busca de informaciones que tardaban en llegar y acusando a las autoridades de negligencia. Un portavoz del Ministerio de Seguridad hondure?o ley¨®, en medio de los gritos de los allegados, la lista de los supervivientes, 475.
Al atardecer, la Polic¨ªa hondure?a ofreci¨® sus primeras conclusiones sobre la probable causa de lo sucedido. De momento, seg¨²n declaraciones de un portavoz de la Secretar¨ªa de Seguridad, H¨¦ctor Iv¨¢n Mej¨ªa, se investiga a un recluso que pudo haber provocado el incendio prendiendo un colch¨®n, aunque no se han dado m¨¢s detalles. En principio se apuntaron otras dos razones: un mot¨ªn o un cortocircuito.
La versi¨®n de Mej¨ªa casa con la que ofreci¨® antes que ¨¦l el director nacional de Servicios Especials Preventivos, Danilo Orellana, funcionario que ha sido suspendido en su cargo de inmediato por el presidente hondure?o, Porfirio Lobo. Tambi¨¦n ha ca¨ªdo en seguida el director del penal.
Una bola de fuego que dur¨® horas
?Seg¨²n informa Associated Press, las llamas se propagaron sin control durante horas. La agencia asegura que el n¨²mero de v¨ªctimas es tan alto porque muchos de los presos no pudieron salir de sus propias celdas, ya que nadie consegu¨ªa encontrar al guarda que ten¨ªa las llaves adecuadas. Las celdas no se pod¨ªan abrie y los presos se quemaban dentro mientras el incendio se extend¨ªa sin freno.
¡°Los bomberos tardaron media hora en recorrer 400 metros¡±, describe Carlos Alfredo Garc¨ªa Zepeda, de 21 a?os y vecino del penal. ¡°Estamos muy indignados¡±, asegura v¨ªa telef¨®nica. Garc¨ªa describe que el incendio inici¨® ¡°cuando ya estaba acostado¡± y al salir lo que estaba pasando, comenz¨® a grabar con su tel¨¦fono m¨®vil, informa Ver¨®nica Calder¨®n. La grabaci¨®n es estremecedora. El joven se lamenta una y otra vez de la tardanza de los bomberos y repite: ¡°C¨®mo gritan¡±.
El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, ha anunciado que habr¨¢ una investigaci¨®n con ¡°total transparencia¡±, y la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA) ha avanzado que enviar¨¢ una delegaci¨®n para investigar la tragedia.
La preocupaci¨®n de los familiares se transform¨® en rabia con el paso de las horas: por decenas se agolparon frente al presidio, lanzaron piedras contra los agentes de polic¨ªas e intentaron forzar la entrada para entrar en el edificio. Las fuerzas de seguridad respondieron con disparos al aire y dispersaron la multitud con ca?ones de agua.
Muchas de las v¨ªctimas quedaron atrapadas por las llamas en sus camarotes. ¡°Una escena terrible¡ cuando entramos en las celdas los cuerpos estaban calcinados, y la mayor¨ªa son irreconocibles¡±, relat¨® Ferrera. El director de los Centros Penales en Honduras, Danilo Orellana, dijo que los cad¨¢veres eran tantos que tuvieron que pedir refrigeradores a Tegucigalpa y que los cuerpos estaban siendo ubicados en un campo de f¨²tbol. ¡°Hay muchos cuerpos apilados en el interior de los m¨®dulos. Seguramente intentaban pero no pudieron escapar del fuego, son cosas que se pueden apreciar¡±, agreg¨® un portavoz de los Bomberos.
Las im¨¢genes de los cuerpos calcinados recordaron las de otras tragedias. El 17 de mayo de 2004, unos 107 reclusos murieron? en un incendio en el presidio de San Pedro Sula, la segunda ciudad del pa¨ªs. El suceso fue atribuido a fallos estructurales de la prisi¨®n. Fallos que afectan a todo el sistema penitenciario del pa¨ªs: sus c¨¢rceles hospedan unos 12.500 presos, m¨¢s del doble de su capacidad.
En abril de 2003, unos 66 reclusos y tres mujeres, entre ellas una menor de edad, que visitaban familiares en la Granja Penal de El Porvenir, fallecieron en una reyerta que se produjo entre reos miembros de las pandillas y otros presos comunes.
Ning¨²n ciudadano espa?ol result¨® afectado por el incidente, seg¨²n confirm¨® a este diario el embajador espa?ol en Honduras, Luis Belzuz. Hay solo dos espa?oles presos en el pa¨ªs centroamericano y ambos est¨¢n en San Pedro Sula. Sobre el incendio en la prisi¨®n de Comayagua asegur¨® que la c¨¢rcel ¡°no era de las peores¡± de Honduras. ¡°Era tipo granja, con programas de reinserci¨®n. El problema ha sido el hacinamiento¡±, a?adi¨®.
Motines e incendios en las c¨¢rceles de Am¨¦rica Latina
Octubre de 1992. Un mot¨ªn en la Casa de Detenci¨®n de S?o Paulo, en Brasil, causa 11 muertos y 110 heridos.
Noviembre de 1992. Durante el frustrado golpe de Estado contra el presidente de Venezuela Carlos Andr¨¦s P¨¦rez, 60 presos mueren en un mot¨ªn en una c¨¢rcel de Caracas.
Enero de 1994. Un total de 108 reclusos fallecen en un mot¨ªn en una c¨¢rcel de la ciudad venezolana de Maracaibo.
Mayo de 2001. Cuarenta presos mueren en un incendio en el Internado Judicial de Carabobo en Venezuela.
Abril de 2003. Tras el enfrentamiento entre bandas rivales en la granja penal de El Porvenir(Honduras), se desata un incendio en la que mueren 69 personas.
Mayo de 2004. En una c¨¢rcel de San Pedro Sula, la segunda mayor ciudad de Honduras, murieron 107 reos.
Diciembre de 2010. 81 presos mueren en un incendio causado por una ri?a entre los internos de una c¨¢rcel de Santiago.
Marzo de 2005. Un incendio registrado durante un mot¨ªn de presos en el centro penitenciario de Hig¨¹ey, en Santo Domingo, causa 135 muertos.
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