El vicepresidente chino visita Turqu¨ªa para hablar de econom¨ªa y de Siria

El vicepresidente de China, Xi Jinping, ten¨ªa previsto llegar esta tarde a Turqu¨ªa para hablar de econom¨ªa. Los dos pa¨ªses tienen un producto interior bruto que ha registrado un vertiginoso crecimiento en los ¨²ltimos a?os, por lo que se espera que la visita estreche sus relaciones. Pero en la agenda hay otras cuestiones que atraen la atenci¨®n internacional, particularmente la postura china frente a Siria. Turqu¨ªa ha condenado desde el inicio la represi¨®n del r¨¦gimen de Bachar al Asad, mientras que China ha vetado hasta ahora la condena a Damasco propuesta por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y respaldada por Ankara.

Durante la visita de tres d¨ªas est¨¢n sobre la mesa temas econ¨®micos, como un acuerdo para la construcci¨®n de una planta nuclear, la compra de tecnolog¨ªa militar china por parte de Turqu¨ªa o el aumento del volumen de comercio bilateral que en la actualidad alcanza los 18.700 millones de d¨®lares, seg¨²n subray¨® Jinping durante una entrevista con el diario turco Sabah.

China es el socio econ¨®mico m¨¢s importante de Ankara en Asia. Y sus relaciones, tanto econ¨®micas como culturales, han aumentado desde la visita del presidente Abdullah G¨¹l al pa¨ªs en 2009, la primera de un presidente turco en 14 a?os. Este a?o Turqu¨ªa celebra el a?o Cultural Chino, con espect¨¢culos y exhibiciones dedicadas a su lejano socio. A esto, se a?ade, como indic¨® el diario Sabah, un acuerdo de cooperaci¨®n firmado hace dos a?os cuyo objetivo es alcanzar los 50.000 millones de d¨®lares en comercio bilateral en 2015.

Xi Jinping, a quienes muchos consideran como el pr¨®ximo dirigente de China, tiene previsto reunirse ma?ana con el presidente del pa¨ªs, Abdullah G¨¹l en Ankara y el mi¨¦rcoles con empresarios de ambos pa¨ªses en Estambul. Aunque el pol¨ªtico chino quiso dar en sus declaraciones previas al viaje un matiz ¨²nicamente econ¨®mico a su visita, a nadie se le escapa que existen otros temas sobre la mesa de los probablemente trataran, como la situaci¨®n en Siria.

Para muchos analistas la visita de Xi Jinping puede marcar un punto de inflexi¨®n en la cooperaci¨®n entre Ankara y Pek¨ªn. A principios de este mes, el ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, critic¨® severamente a China y a Rusia por su veto a la resoluci¨®n de la ONU que intentaba poner fin a la violencia en Siria. ¡°Rusia y China no han votado en base a la realidad existente, sino siguiendo una actitud que refleja su posici¨®n hacia Occidente¡± dijo Davutoglu durante el panel de discusi¨®n en la Conferencia de Seguridad celebrada en Munich.

En su entrevista, Xi Jinping prometi¨® que ¡°China desea reforzar la coordinaci¨®n y cooperaci¨®n con Turqu¨ªa para promover la estabilidad, el desarrollo y la paz en Oriente Medio, pero tambi¨¦n desea trabajar junto a los pa¨ªses e instituciones de la regi¨®n".

Pero Siria no es el ¨²nico punto de fricci¨®n diplom¨¢tica entre ambas naciones. La brutal represi¨®n del r¨¦gimen de Pekin en la provincia de Xinjiang representa un quebradero de cabeza para las autoridades turcas. Xinjiang, en el extremo Oeste de China, viven cerca de 20 grupos ¨¦tnicos diferentes, entre ellos los uigures, un pueblo musulm¨¢n con el que Turqu¨ªa comparte importantes lazos hist¨®ricos. En 2009 el primer Ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, compar¨® la represi¨®n de los disturbios en Xinjiang con ¡°un genocidio¡±. Sin embargo, a pesar de las tiranteces diplom¨¢ticas, los intereses econ¨®micos han prevalecido siempre sobre las reivindicaciones pol¨ªticas de los uigures. Seg¨²n el analista G?khan Bac?k, ¡°Turqu¨ªa busca crear unas zonas de libre comercio en China a trav¨¦s de provincia de Xinjiang. Por eso Ankara apuesta por una China unida y no da incentivos al separatismo de la regi¨®n¡± explic¨® Bacik al diario turco Todayszaman. Sin embargo, la prensa nacionalista turca azuza regularmente las conciencias de los turcos sobre la represi¨®n que sufren sus compatriotas de oriente.