La ONU alienta la mediaci¨®n en Siria
El Consejo de Seguridad respalda la misi¨®n de paz emprendida por Kofi Annan Rusia apoya el texto de la declaraci¨®n, que ha sido aligerado y no es vinculante
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha aprobado, con el voto favorable de Rusia, una declaraci¨®n que respalda la misi¨®n de paz de Kofi Annan en Siria y muestra una ins¨®lita imagen de unidad de la comunidad internacional frente a la represi¨®n ejercida por el Gobierno de ese pa¨ªs. Aunque el texto aprobado no tiene el valor de obligado cumplimiento que corresponde a una resoluci¨®n, los pa¨ªses occidentales lo consideran un avance con respecto a otras iniciativas que hab¨ªan sido bloqueadas antes por Rusia y China.
La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, ha recibido la declaraci¨®n como ¡°un paso positivo¡± que sirve para advertir al r¨¦gimen de Bachar el Asad de que se enfrenta al aislamiento si persiste en su conducta represiva. Pese a que el texto no es vinculante y tiene un car¨¢cter esencialmente simb¨®lico por tratarse de una ¡°declaraci¨®n del presidente¡±, puede servir para robustecer la labor de Annan, que se ha estrellado hasta ahora con la intransigencia de Damasco.
La declaraci¨®n, que ha tenido que ser varias veces aligerada para conseguir el apoyo de Mosc¨², no incluye ninguna amenaza espec¨ªfica a El Asad en el caso de que se niegue de nuevo a atender las peticiones del enviado de la ONU. Incluso una referencia a que este documento podr¨ªa ser seguido de ¡°acciones posteriores¡±, fue sustituida por una alusi¨®n m¨¢s vaga a ¡°pasos posteriores¡±, ante las protestas de Rusia de que la palabra acciones pudiera interpretarse como sanciones o cualquier otra represalia contra Siria.
A¨²n as¨ª, la aprobaci¨®n de este texto, con todas sus limitaciones, representa un ligero cambio de la posici¨®n de Rusia, cuyo Gobierno parece hoy m¨¢s sensible a la conmoci¨®n de la comunidad internacional por unos acontecimientos en los que han muerto ya, seg¨²n c¨¢lculos de la ONU, m¨¢s de 8.000 personas. El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergu¨¦i Lavrov, reconoci¨® el martes que las autoridades sirias hab¨ªan cometido ¡°muchos errores¡± desde el comienzo de esta crisis, hace ya m¨¢s de un a?o. Diplom¨¢ticos occidentales advierten, no obstante, que a¨²n estamos lejos de que el Gobierno ruso, con fuertes intereses econ¨®micos y estrat¨¦gicos en Siria, permita una reacci¨®n m¨¢s contundente del Consejo de Seguridad.
Ese organismo evita, sin embargo, la lastimosa sensaci¨®n de impotencia que hab¨ªa ofrecido hasta ahora con esta declaraci¨®n en la que, al menos, se env¨ªa al r¨¦gimen sirio el mensaje de que el mundo no est¨¢ indiferente ante los sucesos dram¨¢ticos que se desarrollan a diario, y que el tiempo puede correr en su contra. Las im¨¢genes de tanques y artiller¨ªa disparando contra la poblaci¨®n civil en las ciudades sirias han causado horror generalizado desde hace varios meses.
A la angustia por la situaci¨®n humanitaria, se ha sumado en las ¨²ltimas semanas la presi¨®n por el desenlace pol¨ªtico que pueda tomar una crisis de enorme repercusi¨®n regional. Los recientes atentados terroristas en Damasco y la creciente presencia de elementos armados entre los rebeldes han agudizado el temor de que la situaci¨®n degenere hacia una guerra civil de incalculables consecuencias.
La revuelta en Siria, pa¨ªs que tiene fronteras con otros tan vulnerables como Irak, Israel y L¨ªbano, est¨¢ cruzada por tensiones ¨¦tnicas y religiosas que podr¨ªan acabar prendiendo la mecha de un conflicto de mayor magnitud. La desesperaci¨®n del r¨¦gimen de Asad, acelerado por el riesgo creciente de acabar ante un tribunal internacional, puede ayudar, adem¨¢s, a precipitar los acontecimientos.
La misi¨®n de Annan es un modest¨ªsimo esfuerzo de la comunidad internacional por anticiparse a esos peligros. El ¨²ltimo viaje del exsecretario general de la ONU a Damasco no obtuvo resultado alguno. El r¨¦gimen no encuentra gran motivaci¨®n para aceptar conversaciones de paz, y los rebeldes tienen buenos motivos para sospechar de un Gobierno que los persigue cruelmente. Hay que esperar para comprobar si, respaldado por la declaraci¨®n firmada ayer, Annan tiene esta vez algo mejor que ofrecer a los dos bandos. Pero no parece probable que, mientras Rusia mantenga su apoyo al r¨¦gimen, Asad entienda verdaderamente que ha llegado su final.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.