Guatemala saca el Ej¨¦rcito a la calle para reducir las cifras de criminalidad

El Gobierno de Guatemala anunci¨® este lunes un plan para devolver la seguridad a la ciudadan¨ªa, en uno de los pa¨ªses m¨¢s violentos de Am¨¦rica Latina. Seg¨²n inform¨® el presidente, Otto P¨¦rez Molina, la meta es recuperar el Estado de derecho, y prevenir y sancionar el delito. A?adi¨® que el llamado Pacto por la paz, la seguridad y la justicia comprende la acci¨®n coordinada de los tres poderes del Estado.

En la tarea, el Ejecutivo garantizar¨¢ el orden en las calles a trav¨¦s de patrullas de fuerzas combinadas del Ej¨¦rcito y la polic¨ªa; el Legislativo ha anunciado reformas al c¨®digo Procesal Penal, a poner en marcha una reforma judicial integral y a la creaci¨®n de una polic¨ªa t¨¦cnica en la investigaci¨®n criminal. La presidenta del Organismo Judicial, Telma Aldana, anunci¨® reformas para fortalecer la Fiscal¨ªa.

Como primera medida, el Gobierno apuesta por reducir las graves desigualdades que sirven al crimen como caldo de cultivo. En una primera etapa, el plan comprende acciones como solventar las necesidades b¨¢sicas de una poblaci¨®n mayoritariamente privada de servicios b¨¢sicos como agua potable, alimentos y electricidad, y a hacerlo escalonadamente: de la familia al barrio, de ¨¦ste al municipio y a la provincia, hasta tener un pa¨ªs seguro.

Quedan en el tintero acciones consideradas ¡°vitales¡± por analistas como H¨¦ctor Rosada, quien se?ala la necesidad de refundar la Polic¨ªa Nacional Civil, crear un instituto para la atenci¨®n y protecci¨®n de v¨ªctimas de la violencia, establecer un sistema penitenciario eficiente (en la actualidad, las c¨¢rceles son aut¨¦nticas universidades del crimen), garantizar un control efectivo de las amas (se estima que hay en manos de particulares unas 300.000 armas sin ning¨²n control) y ejercer una supervisi¨®n minuciosa de las polic¨ªas privadas de seguridad, un negocio que mueve alrededor de dos mil millones de euros al a?o.

Devolver la tranquilidad a los guatemaltecos es la promesa en torno a la cual gir¨® la campa?a electoral del actual mandatario, quien ofreci¨® combatir al crimen con ¡°mano dura¡±, mensaje que convenci¨® a una poblaci¨®n que en las ¨²ltimas cinco d¨¦cadas no ha conocido ni siquiera la paz necesaria para desplazarse a su trabajo.

La angustia de salir de casa con un alto riesgo de sufrir un atentado en la calle, no es una percepci¨®n gratuita. El secretario General de la ONU, Ban Ki Moon, se?alaba el 16 de mayo ante la Asamblea General del Organismo mundial que ¡°en Guatemala se registran diariamente alrededor de 20 homicidios, lo que da un promedio de 39 asesinados por cada 100 habitantes¡±. Esto convierte al pa¨ªs en el tercero con m¨¢s muertes violentas del hemisferio, solo por detr¨¢s de El Salvador, con 72, y de Honduras, con 86.

¡°Es una crisis que conlleva temor e inestabilidad¡±, se?al¨® Ban Ki Moon, antes de lanzar un pron¨®stico aterrador: ¡°Uno de cada 50 centroamericanos menores de 20 a?os morir¨¢ antes de cumplir 32 debido a la violencia generada por el crimen organizado, especialmente por el narcotr¨¢fico¡±.

Las ra¨ªces del problema, identificadas por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) desnudan la debilidad extrema del Estado: la exclusi¨®n social y la falta de aplicaci¨®n de la ley.

En este pa¨ªs de renta media (2.200 euros per capita, seg¨²n cifras del banco central), el crecimiento econ¨®mico no es distribuido equitativamente. Guatemala es la naci¨®n m¨¢s desigual de Latinoam¨¦rica. El 51% de la poblaci¨®n vive en la pobreza y un 15.2% en extrema pobreza, circunstancia que genera graves tensiones sociales. A esto se suma una de las tasas de crecimiento de la poblaci¨®n m¨¢s altas del mundo, que incide en que el mercado laboral no est¨¦ en capacidad de absorber a los j¨®venes que anualmente se incorporan a la Poblaci¨®n Econ¨®micamente Activa. Tarea casi imposible cuando los niveles educativos est¨¢n bajo m¨ªnimos, lo que les cierra las puertas a trabajos dignos y bien remunerados y los obliga a sobrevivir en la econom¨ªa sumergida.

La justicia no anda mejor. En Guatemala, entre el 95% y el 98% de los cr¨ªmenes quedan en la impunidad y aunque se registran algunos avances, son claramente insuficientes. Uno de los grandes progresos, promovidos desde la Comisi¨®n Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG, entonces bajo el mando del magistrado espa?ol Carlos Castresana) fue la implementaci¨®n de las pruebas cient¨ªficas, en sustituci¨®n de la testimonial, f¨¢cilmente manipulable mediante amenazas, sobornos o la eliminaci¨®n f¨ªsica de los testigos.