La abrumadora superioridad de un presidente ind¨ªgena
El poder ha cambiado de cara en Bolivia en un proceso irreversible en los ¨²ltimos a?os. Sin embargo, cunde la percepci¨®n de que el presidente Evo Morales no cumple sus promesas
¡°Evo ha levantado la cabeza a una generaci¨®n perdida. Yo trabajaba en una ONG en San Ignacio de Moxos tratando de despertar conciencias. Durante d¨¦cadas, los partidos tradicionales se repartieron el poder, y solo gobernaban las familias de la ¨¦lite. Ahora, la mayor¨ªa de ministros y viceministros procede de organizaciones sociales¡±. Germ¨¢n Huanca es un economista boliviano formado en Estados Unidos, con amplia experiencia en el mundo rural, en la Administraci¨®n y la docencia. Conoce desde dentro el Gobierno de Evo Morales, para el que ha trabajado en diferentes departamentos. Seis a?os despu¨¦s de la llegada al poder del primer presidente ind¨ªgena (aymara) en la historia de Bolivia, Germ¨¢n Huanca reconoce que varias de las expectativas de aquel acontecimiento hist¨®rico se han desvanecido. Pero, al mismo tiempo, opina que el camino recorrido en estos seis a?os es irreversible.
¡°Las organizaciones no gubernamentales (ONG) concentraron su trabajo en el movimiento ind¨ªgena y campesino. Los cocaleros ten¨ªan la estructura organizativa m¨¢s poderosa y a la cabeza hab¨ªa estado Evo Morales¡±. El apoyo popular al l¨ªder emergente que hablaba en nombre de los marginados durante siglos dio el primer revolc¨®n en las urnas en 2005, con el triunfo del candidato Evo con el 53,7% de los votos. La victoria se amplific¨® al 64,22% en los comicios de 2009. El Movimiento al Socialismo (MAS), el partido del presidente, tiene el control absoluto del Parlamento y de la inmensa mayor¨ªa de los gobiernos departamentales.
Esta superioridad abrumadora ha permitido a Evo Morales poner en marcha un proceso de transformaci¨®n in¨¦dito, que arranc¨® con una Asamblea Constituyente, en la que participaron m¨¢s de un millar de representantes de todos los sectores pol¨ªticos y sociales, y de la que surgi¨® la nueva Constituci¨®n. El poder ha cambiado de cara. En todas las instituciones p¨²blicas ha aumentado la presencia de aymaras, quechuas y bolivianos de otras comunidades ind¨ªgenas. La diversidad del pa¨ªs andino est¨¢ ahora certificada en la Carta Magna, que declara el Estado plurinacional de Bolivia.
La nacionalizaci¨®n de los hidrocarburos, la decisi¨®n de mayor trascendencia, ha permitido sanear las arcas del Estado, que tiene recursos para programas sociales de erradicaci¨®n de la extrema pobreza y, al mismo tiempo, ha aumentado las reservas internacionales.
Entonces, ?por qu¨¦ hay desencanto? ¡°Surge a partir de la percepci¨®n de que el Gobierno no cumple lo que promete¡±, dice Germ¨¢n Huanca. ¡°Ocurre con la nueva Constituci¨®n, est¨¢ muy bien pero no se aplica. Y as¨ª tenemos el deterioro del medio ambiente por el impacto de la miner¨ªa descontrolada, el aumento de la inseguridad ciudadana en Santa Cruz¡¡±
La nueva Constituci¨®n establece que ¡°los ind¨ªgenas tienen derecho a ser consultados mediante procedimientos apropiados, y en particular a trav¨¦s de sus instituciones, cada vez que se prevean medidas legislativas o administrativas susceptibles de afectarles¡±. El Gobierno no pregunt¨® a los afectados sobre el proyecto de una carretera de 306 kil¨®metros en la Amazon¨ªa boliviana, que atravesar¨ªa el llamado Territorio Ind¨ªgena y Parque Nacional Isiboro S¨¦cure (TIPNIS). Una reserva protegida de 1,2 millones de hect¨¢reas, en la que viven numerosas comunidades ind¨ªgenas. La reacci¨®n de las autoridades de convocar una consulta lleg¨® tarde, cuando estaba en marcha un movimiento de protesta contra el Gobierno, con la novena marcha ind¨ªgena, que encabezan destacados dirigentes sociales y antiguos colaboradores de Evo Morales.
Las voces cr¨ªticas acusan al Ejecutivo y al propio presidente de autoritarismo y arrogancia, al tiempo que los conflictos y protestas en diversos sectores ¨Ctrabajadores, m¨¦dicos, estudiantes, polic¨ªas-, han aumentado de manera alarmante. La mayor movilizaci¨®n contra Evo fue la octava marcha del TIPNIS, el a?o pasado, que lleg¨® hasta La Paz y fue recibida con aut¨¦ntico calor popular.
La ministra de Comunicaciones, Amanda D¨¢vila, reconoce que en el ¨²ltimo cambio de Gabinete de enero pasado se acab¨® la paridad de g¨¦nero, y en el actual solo hay siete mujeres de un total de 20 ministros. A cambio, el presidente opt¨® por un perfil m¨¢s t¨¦cnico, en detrimento de los pol¨ªticos del MAS, ¡°porque hab¨ªa muchas cosas que no funcionaron¡±. La ministra menciona ¡°el olvido de los pueblos ind¨ªgenas de los llanos, sin agua potable ni luz en muchas comunidades amaz¨®nicas¡±. En el nuevo Ejecutivo solo hay cuatro ministros ind¨ªgenas, pero las comunidades originarias han aumento su presencia en los ¨®rganos del poder judicial, en Viceministerios y direcciones generales.
Evo Morales conserva el apoyo de una parte significativa de las organizaciones sociales, a pesar de la divisi¨®n en algunas de ellas. Las pugnas internas impiden o retrasan los nombramientos de nuevos cargos. ¡°Cuesta mucho cambiar un ministro, porque significa enfrentarse a los movimientos sociales¡±, se?ala la titular de Comunicaciones.
Lo que m¨¢s le duele a Evo es ¡°la traici¨®n de dirigentes que se han vendido, como Adolfo Ch¨¢vez (presidente de la Confederaci¨®n de Pueblos Ind¨ªgenas de Bolivia- CIDOB), que ha firmado un pacto con Rub¨¦n Costas, gobernador de Santa Cruz, quien llam¨® a Evo Morales 'excelent¨ªsimo asesino¡±. Le preocupa menos, seg¨²n la ministra, la deserci¨®n de estrechos colaboradores del presidente como Alex Contreras (ex portavoz del presidente), Ra¨²l Prada (ex viceministro de Planificaci¨®n) o Alejandro Almaraz (exviceministro de Tierras). ¡°La clase media, ya se sabe¡±, dice Amanda D¨¢vila. ¡°Le doler¨ªa de verdad si le traicionara su gente, los cocaleros¡±.
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