"Nunca habl¨¦ de becarias con Clinton"

Pregunta. Como asesor de Obama, ?qu¨¦ consejo estelar va a darle para intentar la reelecci¨®n?

Respuesta. La verdad es que es tan dif¨ªcil darle consejos que no sean tradicionales... Porque es un t¨ªo muy inteligente. Lo que intentamos quienes trabajamos con ¨¦l es analizar la informaci¨®n que recopilamos, por ejemplo en las relaciones con Europa.

P. Pues a veces parece que a ¨¦l Europa le importa lo justito, que le gusta m¨¢s China. No s¨¦ si hace usted bien los deberes.

R. Se tiene una imagen err¨®nea del presidente. En los ¨²ltimos tres a?os ha habido m¨¢s interacci¨®n entre Estados Unidos y la Uni¨®n Europea que en los anteriores ocho. Y dicen que cuando dos buenos amigos se quieren, no tienen que verse todos los d¨ªas para profesarse amor.

P. Est¨¢ seguro de la nueva victoria dem¨®crata. ?Qu¨¦ as en la manga guarda, por si acaso?

R. Estoy seguro de que va a ganar Obama, pero no va a ser nada f¨¢cil. ?As en la manga? S¨ª. Lo que estamos diciendo todos es que tenemos que recuperar a ese Barack Obama lleno de entusiasmo, de energ¨ªa, de ilusi¨®n.

P. ?Porque se les ha venido un poquito abajo, como el sufl¨¦?

R. No. Lo que pasa es que cuando se gobierna no siempre se hace lo que uno quiere, sino lo que te deja hacer la oposi¨®n.

P. Es especialista en captar el voto hispano. ?Qu¨¦ hace, les canta algo de Los Sabande?os?

R. Podr¨ªa cantarles una canci¨®n que se llama Sue?o. Canarias, al igual que la comunidad hispana, es un sitio muy diverso. Los canarios tienen mucha gente en todas las partes del mundo.

P. ?Qu¨¦ frase rotunda va a ense?ar a Obama en espa?ol para que atraiga a los latinos?

R. ¡°S¨ª se puede, pero hacen falta cuatro a?os m¨¢s¡±. Los latinos deben ver lo que ha hecho el presidente por esa comunidad.

P. ?Conoce m¨¢s el Ala Oeste o el resto de la Casa Blanca?

R. Pues mire, el Ala Oeste es peque?ita, tiene muy poca gente y s¨®lo tres oficinas. La inmensa mayor¨ªa trabajamos en el Ala Este.

P. ?Obama ha probado el pl¨¢tano de Canarias?

R. Sabe del pl¨¢tano canario, aunque creo que no lo ha probado nunca.

P. ?Y a qu¨¦ espera usted?

R. Espero poder llevarlo a Canarias alg¨²n d¨ªa. Una vez me sorprendi¨® diciendo: ¡°S¨¦ que Canarias recibe su nombre por un animal, y no es el p¨¢jaro¡±. Y es as¨ª. Canarias recibe el nombre por los perros, canino, cane, arias, la tierra de los perros.

P. Antes trabaj¨® con Bill Clinton. ?Le recomend¨® que hiciera de plantilla a las becarias?

R. Qu¨¦ va, qu¨¦ va, qu¨¦ va... Nunca hablamos de becarias. Las dos o tres veces en que las conversaciones fueron m¨¢s informales hablamos de todo menos de eso.

P. Usted, con Gore, mucho ocuparse del cambio clim¨¢tico. Pero Washington parece que pasa bastante. No ha firmado Kyoto.

R. Estados Unidos ha hecho m¨¢s para fomentar el desarrollo de las renovables y las energ¨ªas limpias en estos tres a?os que en los ¨²ltimos treinta. Pero, como he dicho, cuando se gobierna no se hace lo que se quiere, sino lo que se puede.

P. Rajoy tiene un primo que no cree en el cambio clim¨¢tico.

R. Yo no s¨¦ lo que puede opinar su primo, pero el presidente Rajoy me parece una persona muy cabal, muy inteligente, y estoy seguro de que entiende la gravedad de este problema, que no tiene color pol¨ªtico.

P. Tanto rondar por la Casa Blanca, no ser¨ªa usted quien aconsej¨® a Bush invadier Irak.

R. ?C¨®mo? Creo que pasar¨¢ a la historia como uno de los grandes errores del siglo. Su administraci¨®n se caracteriz¨® por actuar siempre de forma dictatorial.

P. Se ha establecido en Orense por amor. ?No echa de menos el Ala Oeste o el Ala Este?

R. Ni siquiera vivo en Orense, sino en una peque?a aldea a diez kil¨®metros, Santa Marta. He cambiado Washington por la aldea, y me llena de orgullo.

P. Bueno, pero para cualquier necesidad le mandar¨¢n el Air Force One.

R. No, no me lo mandan [r¨ªe]. Pero viajo much¨ªsimo.

P. ?Para cu¨¢ndo vestir a Barack, a Michelle, a Hillary, a Bill y a todos de su suegro, Adolfo Dom¨ªnguez?

R. Pues mire, Adolfo Dom¨ªnguez sorprendentemente ya ha vestido a much¨ªsima gente en la Casa Blanca. A Sotomayor, la hispana de la Corte Suprema, la he visto en la tienda en Washington. Y la primera vez que present¨¦ a mi mujer a la pareja presidencial comentaron sobre el vestido que llevaba.

P. ?Sus tripas son de barras y estrellas?

R. Sin lugar a dudas. Yo me fui de Espa?a con quince a?os, y he desarrollado la mayor parte de mi carrera profesional y mi preparaci¨®n acad¨¦mica en ese pa¨ªs. Y me considero americano y espa?ol, un h¨ªbrido. Pienso como un americano y siento como un espa?ol.

P. Barras y estrellas con peineta y faralaes.

R. Mire qu¨¦ bonito. Yo creo que si, ?eh? Totalmente.