China y Rusia cierran filas y blindan a Siria contra una intervenci¨®n extranjera
El presidente ruso visita tres d¨ªas el pa¨ªs asi¨¢tico, donde tiene previsto firmar 17 acuerdos y entrevistarse con Ahmadineyad
China y Rusia han cerrado filas y han dejado hoy bien claro de nuevo que se oponen a una intervenci¨®n militar extranjera o a un cambio de r¨¦gimen por la fuerza en Siria. En su lugar, insisten en que la resoluci¨®n de la crisis pasa por el plan de paz del mediador Kofi Annan, ex secretario general del la ONU, y han pedido a la comunidad internacional que lo apoye, a pesar de la creciente presi¨®n de pa¨ªses ¨¢rabes y occidentales para dar una respuesta m¨¢s firme al r¨¦gimen de Bachar el Asad.
As¨ª lo han asegurado el presidente chino, Hu Jintao, y su hom¨®logo ruso, Vlad¨ªmir Putin, que se encuentra de visita en Pek¨ªn. ¡°En la cuesti¨®n siria, los dos jefes de Estado dijeron que la comunidad internacional debe continuar apoyando los esfuerzos de mediaci¨®n conjuntos de la Liga ?rabe y el enviado especial de la ONU Annan, as¨ª como la misi¨®n de monitorizaci¨®n de la ONU para impulsar una soluci¨®n pol¨ªtica al problema en Siria¡±, ha se?alado este martes la televisi¨®n estatal china tras la reuni¨®n de los dos mandatarios.
Pek¨ªn, opuesto siempre a la injerencia extranjera, rechaza sentar precedentes que podr¨ªan volverse en su contra en T¨ªbet o Xinjiang
Horas antes, Liu Weimin, portavoz de Exteriores chino, ha insistido en que ambos Gobiernos consideran que la crisis debe ser resuelta por medio de la negociaci¨®n entre las diferentes partes sirias implicadas. ¡°Este es el inter¨¦s fundamental del pueblo sirio¡±, ha se?alado.
China y Rusia -ambos, miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, y, por tanto, con derecho a veto- han bloqueado los esfuerzos de las potencias occidentales para condenar o pedir la salida del presidente sirio, Bachar el Asad, cuyas fuerzas han matado a m¨¢s de 10.000 personas desde marzo del a?o pasado, seg¨²n la ONU.
Pek¨ªn y Mosc¨² vetaron dos resoluciones del Consejo de Seguridad que planteaban reforzar las sanciones contra Siria y han descartado tajantemente una intervenci¨®n militar extranjera, similar a la que se produjo en Libia, para proteger a los civiles. Los dos pa¨ªses vecinos tambi¨¦n votaron el viernes pasado contra una resoluci¨®n que condenaba la matanza el mes pasado de m¨¢s de 100 civiles, muchos de ellos ni?os y mujeres, en Hula, al norte de Homs.
La visita de Putin, de tres d¨ªas de duraci¨®n, se produce en el marco de la cumbre anual de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n de Shangh¨¢i (SCO, en sus siglas en ingl¨¦s), que se celebra el mi¨¦rcoles y el jueves. El organismo, que centra su actividad principalmente en temas de seguridad, est¨¢ integrado por Rusia, Kazajist¨¢n, Kirguizist¨¢n, Tayikist¨¢n, Uzbekist¨¢n y China.
Las relaciones entre los antiguos rivales durante la guerra fr¨ªa han mejorado continuamente durante el mandato de Putin aunque la desconfianza persiste
Pero el n¨²cleo del viaje del jefe de Estado ruso y su equipo son sus discusiones con los l¨ªderes chinos sobre la situaci¨®n en Siria e Ir¨¢n, y las negociaciones bilaterales en materia econ¨®mica y energ¨¦tica. Tras su encuentro con Hu Jintao, Putin ha asegurado que han intercambiado puntos de vista sobre Oriente Medio, Ir¨¢n y la pen¨ªnsula coreana, en referencia a Corea del Norte. ¡°Nuestros enfoques no solo son cercanos y armoniosos, lo m¨¢s importante es que hemos alcanzado un nivel de coordinaci¨®n destinado a resolver las crisis internacionales de la forma m¨¢s efectiva¡±, ha dicho en un comunicado, informa Reuters. Durante su estancia en Pek¨ªn, Putin tendr¨¢ la oportunidad de entrevistarse con el presidente iran¨ª, Mahmud Ahmadineyad, que esta semana estar¨¢ tambi¨¦n en China.
El viaje de Putin ¨Cel primero que efect¨²a a Asia desde que asumi¨® por tercera vez la jefatura del Estado a principios de mayo- se produce tras los intentos fallidos de la Uni¨®n Europea de convencer a Rusia de que presione m¨¢s a El Asad.
Pek¨ªn y Mosc¨² no solo han rechazado los llamamientos de la comunidad internacional para presionar al r¨¦gimen sirio por la espiral de violencia, sino que descartan tambi¨¦n la imposici¨®n de sanciones adicionales a Ir¨¢n por su supuesto programa de armas nucleares. Rusia es aliado desde los tiempos de la Uni¨®n Sovi¨¦tica del r¨¦gimen sirio, a quien vende armas, mientras que China se opone tradicionalmente a la injerencia extranjera y no quiere sentar precedentes que un d¨ªa puedan volverse en su contra, por ejemplo en T¨ªbet o Xinjiang, regiones en las que tiene graves conflictos ¨¦tnicos.
La presidencia de Putin entre 2000 y 2008 estuvo marcada por repetidas confrontaciones con Occidente. En la cumbre con la Uni¨®n Europea celebrada este lunes en San Petersburgo, dio un capotazo a los l¨ªderes europeos sobre la crisis siria y se limit¨® a se?alar: ¡°Nuestra posici¨®n no coincide en todos y cada uno de los temas¡±.
Rusia y China se han fijado como objetivo alcanzar unos intercambios comerciales de 100.000 millones de d¨®lares (80.340 millones de euros) para 2015, frente a 83.500 millones de d¨®lares (67.100 millones de euros) el a?o pasado. Los dos pa¨ªses prev¨¦n firmar 17 acuerdos diplom¨¢ticos y econ¨®micos estos d¨ªas. De ellos, no formar¨¢ parte un contrato gas¨ªstico en negociaci¨®n desde hace tiempo, por el cual Rusia suministrar¨ªa 70.000 millones de metros c¨²bicos de combustible al a?o a su vecino, seg¨²n ha informado la compa?¨ªa Gazprom. ?Raz¨®n? Disputas en el precio.
Las relaciones entre los antiguos rivales durante la guerra fr¨ªa han mejorado continuamente durante el mandato de Putin. A pesar de ello, los desacuerdos y la desconfianza permanecen. Mosc¨² est¨¢ claramente enojado por que China haya copiado sus aviones de combate y otros equipos militares, y las diferencias sobre el precio de los suministros de gas ruso a China duran desde hace a?os. Mosc¨² prefiere que las tarifas del gas est¨¦n ligadas a las del petr¨®leo, como hace en Europa, mientras que Pek¨ªn quiere que sean inferiores.
Putin ha utilizado sus buenas relaciones con China como contrapeso al dominio global de Estados Unidos, y ambos pa¨ªses han encontrado una causa com¨²n en el rechazo a los llamamientos occidentales de m¨¢s apertura pol¨ªtica y respeto a las libertades civiles en sus respectivos pa¨ªses.
?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Reuniones pol¨ªticas
- Hu Jintao
- Vlad¨ªmir Putin
- Siria
- Guerra Siria
- Liga ¨¢rabe
- Primavera ¨¢rabe
- Protestas sociales
- Actos pol¨ªticos
- China
- Cumbres internacionales
- Revoluciones
- Comercio internacional
- Malestar social
- Relaciones internacionales
- ONU
- Asia oriental
- Rusia
- Europa este
- Asia
- Combustibles
- Conflictos pol¨ªticos
- Comercio
- Oriente pr¨®ximo