Cuatro sitios arqueol¨®gicos en Quintana Roo vuelven a recibir visitantes

Las ciudades mayas vuelven a cobrar vida. El Instituto Nacional de Antropolog¨ªa e Historia (INAH) anunci¨® la reapertura de Kohunlich, Dzibanch¨¦, Chacchoben y El Meco, cuatro sitios que pertenecen a la zona arqueol¨®gica de Oxtankah, en Quintana Roo. El lugar cerr¨® temporalmente tras el inicio de obras de mantenimiento por parte del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueol¨®gicas (Promeza), impulsado por el INAH, que se enfoca en el salvamento arqueol¨®gico vinculado al Tren Maya. A Oxtankah se puede acceder todos los d¨ªas de la semana de 09.00 a 15.00 horas. El costo es de 75 pesos (casi cuatro d¨®lares) y los domingos la entrada es gratuita para el p¨²blico mexicano.

El antrop¨®logo y director general del INAH, Diego Prieto Hern¨¢ndez, explic¨® que con los trabajos de Promeza, las zonas arqueol¨®gicas han transformado su imagen y funcionalidad al contar con nuevos paraderos, instalaciones modernas y cedularios actualizados. Chacchoben fue la primera zona en abrir sus puertas el 8 de diciembre; Kohunlich y Dzibanch¨¦ lo hicieron el 13; y El Meco, el 14 de diciembre.

Prieto Hern¨¢ndez destac¨® que Promeza ha permitido investigar, estudiar y mejorar el estado de conservaci¨®n de los espacios patrimoniales con el fin de ampliar el conocimiento que se tiene sobre el sitio y la cultura maya ancestral, adem¨¢s de enriquecer la experiencia del turismo nacional y extranjero.

El INAH, por su parte, resalt¨® en un comunicado que Promeza tambi¨¦n beneficia las zonas arqueol¨®gicas de Ichkabal, Xel-H¨¢, Muyil, Chakanbak¨¢n y Cob¨¢, as¨ª como en el corredor ecoarqueol¨®gico Paamul II.

Hallazgos y el Tren Maya

La planificaci¨®n del Tren Maya, la obra emblema del sexenio de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, tuvo que cambiar su curso varias veces luego que el INAH hallara ruinas arqueol¨®gicas en tramos donde se pensaba construir una estaci¨®n o cimentar las v¨ªas.

En Kohunlich, por ejemplo, fueron encontradas siete edificaciones a seis kil¨®metros del sitio arqueol¨®gico, por lo que el camino de acceso a la estaci¨®n Nicol¨¢s Bravo-Kohunlich tuvo que modificarse. El asentamiento aglomera construcciones ceremoniales y residenciales. Se cree que fueron barrios de la ¨¦lite. Adem¨¢s, el sitio presenta diversos estilos arquitect¨®nicos, algunos asociados con la regi¨®n de Pet¨¦n, al norte de Guatemala.

Otro hallazgo importante ocurri¨® en la zona arqueol¨®gica de Dzibanch¨¦. En octubre de 2023 se descubrieron tres fachadas con relieves mayas alusivos a la dinast¨ªa Kaanu¡¯l (la dinast¨ªa de la serpiente) en lo que fue un juego de pelota. Las estructuras contienen tres escenas de relieves estucados que ofrecen nuevas pistas sobre el poder¨ªo del reino Kaanu¡¯l.

Dzibanch¨¦, que significa escritura en madera, no es el nombre original del sitio. Thomas Gann, un arque¨®logo aficionado y m¨¦dico militar ingl¨¦s, lo bautiz¨® as¨ª en 1927 en referencia a los dinteles de madera tallada ubicados en los vanos del templo del edificio VI que, de acuerdo con el INAH, fueron retirados para garantizar su conservaci¨®n.

Oxtankah, hogar de un n¨¢ufrago

Oxtankah fue una de las ciudades mayas m¨¢s importantes de la pen¨ªnsula de Yucat¨¢n. Su poblaci¨®n se dedic¨® a actividades portuarias y control¨® la bah¨ªa de Chetumal. Seg¨²n la tradici¨®n oral, fue el hogar del n¨¢ufrago espa?ol Gonzalo Guerrero a inicios del siglo XVI, quien se integr¨® a las comunidades luego de ser capturado en 1511. Posteriormente, fue l¨ªder militar y defendi¨® el pueblo contra los conquistadores espa?oles.