Rusia se distancia t¨ªmidamente del r¨¦gimen de Siria

Algo se mueve en Rusia con relaci¨®n a Siria. El pa¨ªs que, junto con Ir¨¢n, ha sido el m¨¢s inquebrantable aliado del r¨¦gimen del presidente Bachar el Asad parece empezar a tomar distancias sin dejarle del todo caer.

Acaso las deserciones de militares con muchos galones y el acercamiento de los combates a Damasco inciten al presidente Vladimir Puntin a flexibilizar su postura tan cr¨ªticada por Occidente y por la oposici¨®n siria.

Dos s¨ªntomas avalan el alejamiento de Mosc¨² con Damasco. Un alto cargo ruso declar¨® en Farnboruough (Reino Unido), al margen de un feria de aviaci¨®n, que su pa¨ªs no iba a proporcionar m¨¢s armas a Siria aunque no emple¨® la palabra embargo, seg¨²n las agencias de prensa rusas Interfax y Ria Novosty.

Casi al mismo tiempo el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, recib¨ªa en Mosc¨² a una delegaci¨®n de aut¨¦nticos disidentes del r¨¦gimen de El Asad encabezada por el escritor Michel Kilo que preside el Foro Democr¨¢tico de la Oposici¨®n Siria. No ahorraron cr¨ªticas a Rusia. Lavrov recibir¨¢, el mi¨¦rcoles, a la c¨²pula del Consejo Nacional Sirio, el principal grupo de oposici¨®n en el exilio.

Vyacheslav Dzikaln, vicepresidente del Servicio Federal de Cooperaci¨®n Tecnico Militar, anunci¨® que ¡°hasta que la situaci¨®n no se estabilice [en Siria] no habr¨¢ nuevas entregas de armas¡±. Recalc¨® que por de pronto no se enviar¨¢n a Damasco los 36 aviones de entrenamiento Yak-130, pendientes de entrega, por los que Siria se comprometi¨® a pagar 550 millones de d¨®lares.

Las palabras de Dzikaln pueden marcar un cambio, pero deben ser interpretadas con cautela. Un anuncio de tal alcance deber¨ªa haber sido hecho por, como m¨ªnimo, un ministro, y no por un alto funcionario. El titularde Exteriores brit¨¢nico, Willian Hague, dedujo adem¨¢s de la declaraci¨®n de Dzikaln que solo concern¨ªa a los aviones. ¡°Me gustar¨ªa ver la suspensi¨®n de todas las entregas de armas al r¨¦gimen¡±, recalc¨®.

Tras entrevistarse con Lavrov la delegaci¨®n de opositores rusos arremeti¨® ante la prensa, en Mosc¨², contra su anfitrion, el Gobierno ruso. Michel Kilo concentr¨® sus ataques contra El Assad que solo practica ¡°el di¨¢logo de los ca?ones¡±, pero uno de sus acomapa?antes, Hazem Nahar lament¨® no haber observado apenas cambios significativos en la postura rusa.

¡°Estamos intentando responder a la pregunta de por qu¨¦ Rusia se ha alineado tanto con la posici¨®n del r¨¦gimen sirio¡±, prosigui¨® Nahar. Actuando as¨ª Mosc¨² ¡°ha ahondado la crisis¡± y ¡°ha perjudicado, desde el principio, el llegar a una soluci¨®n¡±. ¡°Desgracidamente Rusia tiene gmuy mala fama entre el pueblo sirio y no solo entre los que respaldan a la oposici¨®n¡±, concluy¨®.

Michel Kilo dej¨® caer que el general Manaf Tlass, cuya deserci¨®n se conoci¨® el jueves, pod¨ªa ser ¡°una personalidad muy aceptable¡± para dirigir en Siria un Gobierno de transici¨®n. Tlass, de 48 a?os, mandaba una unidad de la temible Guardia Republicana, protagonista de la represi¨®n, y pernetec¨ªa al c¨ªrculo ¨ªntimo de colaboradores de El Asad. El comentario de Kilo, despu¨¦s de entrevistarse con Lavrov, podr¨ªa indicar que Mosc¨² ver¨ªa con buenos ojos a Tlaas para encauzar la transici¨®n.

Su fuga del pa¨ªs a Turqu¨ªa parece haber animado a otros militares a huir. El fin de semana ha sido f¨¦rtil en deserciones entre ellas la de dos generales, Muhamad Nasser Bakar y Abdel Al Hamid Al Ashtar, la del jefe del servicio secreto en Menbej asi como de seis altos funcionarios del Ministerio del Interior y de decenas de soldados.

La guerra civil no solo se acerca a Damasco, hasta el 1 de julio se combati¨® duramente en Duma a 13 kil¨®metros de la capital, sino que hace incluso incursiones en la ciudad. El domingo por la noche hubo un enfrentamiento armado muy cerca de la plaza Al Abassin.

Es probable que Kofi Annan, el fracasado mediador de la ONU y de la Liga ?rabe en el conflicto sirio, escuchase el tiroteo desde el hotel donde se hosped¨® en Damasco tras entrevistarse con El Asad. Ambos se pusieron de acuerdo, seg¨²n Annan, en un ¡°nuevo enfoque¡± para resolver la crisis sobre el que no dio detalles y que est¨¢ abocado al fracaso si no prev¨¦ la salida del dictador. A continuaci¨®n viaj¨® a Teher¨¢n.