La madre de todas las batallas

"Alepo es la madre de todas las batallas". El titular de portada del diario gubernamental sirio Al Watan revelaba ayer la importancia que el r¨¦gimen del presidente Bachar el Asad atribuye a la ofensiva en ciernes del Ej¨¦rcito regular para acabar de expulsar de la capital econ¨®mica a los rebeldes armados.

Apoderarse de Alepo forma parte ¡°del proyecto [turco] de establecer una zona segura dentro de Siria¡± para ¡°los terroristas armados por Turqu¨ªa y Europa¡±, sosten¨ªa el rotativo.

Los rebeldes armados no son terroristas, pero por lo dem¨¢s la explicaci¨®n del peri¨®dico es acertada. Alepo es para la rebeli¨®n siria lo que fue Bengasi para la rebeli¨®n libia: la posibilidad de instaurar una zona homog¨¦nea liberada y fronteriza con un pa¨ªs amigo donde entrenar a sus fuerzas, acoger a los desertores, atender a sus heridos y recibir ayuda internacional.

El Ej¨¦rcito Sirio Libre (ESL), compuesto sobre todo por desertores, asegura controlar hoy en d¨ªa el 40% del territorio sirio, pero reconoce que se trata principalmente de zonas rurales y que no hay una continuidad geogr¨¢fica entre las ¨¢reas en su poder.

De ah¨ª la importancia para el ESL de arrebatar Alepo, con sus 2,9 millones de habitantes, al r¨¦gimen y, de paso, la cercana Idlib, cuya provincia est¨¢ ya, en buena medida, en manos rebeldes.

Idlib est¨¢ a un tiro de piedra (90 kil¨®metros) de Latakia, la gran ciudad costera donde se sospecha que el clan de El Asad podr¨ªa intentar atrincherarse si perdiese Damasco. No en balde es en esa regi¨®n donde los alau¨ªes, la comunidad confesional a la que pertenecen los El Asad, son los m¨¢s numerosos.

Si la oposici¨®n siria consigue adue?arse de Alepo su siguiente objetivo ser¨¢ lograr que se instaure de facto una zona de exclusi¨®n a¨¦rea sobre la capital econ¨®mica siria y sus alrededores, como la impuesta por el Consejo de Seguridad de la ONU en Libia en marzo de 2011. No parece que Rusia y China vayan, sin embargo, por ahora a dar su luz verde a tal propuesta.

Si Alepo cae ¡°el r¨¦gimen est¨¢ acabado y ambos adversarios lo saben¡±, ha repetido en los ¨²ltimos d¨ªas Rami Abdel Rahman, que desde Londres dirige el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Ante la desproporci¨®n de las fuerzas en presencia ¡ªla ¨¦lite del Ej¨¦rcito sirio frente a unos milicianos mal armados¡ª es, sin embargo, poco probable que Alepo caiga por ahora.

Tras ocho d¨ªas de combates (del domingo 15 al lunes 23 de julio) las fuerzas leales al r¨¦gimen recuperaron casi totalmente Damasco, aunque en sus suburbios persisten focos de resistencia. Probablemente suceder¨¢ otro tanto en Alepo.

Pero al cabo de unas semanas o de unos meses los rebeldes volver¨¢n a infiltrarse en esas grandes ciudades. Son m¨¢s numerosos que sus enemigos y tienen la moral m¨¢s alta. Cada vez que la IV Divisi¨®n o la Guardia Republicana, las unidades mejor equipadas y m¨¢s fieles, aplastan una sublevaci¨®n armada en alg¨²n lugar de Siria se reactiva otro foco de resistencia. Desde hace un a?o no dan abasto en machacar enemigos. Alg¨²n d¨ªa se agotar¨¢n.