Una semana de protestas pone al primer ministro palestino contra las cuerdas
El enfado de los ciudadanos de Cisjordania se dirige hacia el jefe de Gobierno, Salam Fayad El apoyo del presidente palestino a las protestas es reflejo de las luchas intestinas de poder
Miles de palestinos se han manifestado en Cisjordania en los ¨²ltimos tres d¨ªas para protestar por la subida de los precios de los alimentos y la gasolina. El enfado se dirige sobre todo contra el primer ministro palestino y arquitecto de la pol¨ªtica econ¨®mica, Salam Fayad, al que culpan del deterioro financiero que atraviesan los territorios ocupados. Fayad lleg¨® a decir el jueves a la prensa que est¨¢ dispuesto a dimitir si eso contribuye a mejorar la situaci¨®n.
El presidente palestino, Mahmud Abbas se ha apresurado a bautizar las protestas como ¡°la primavera ¨¢rabe palestina¡±, seg¨²n anunci¨® esta semana en El Cairo, durante una reuni¨®n de la Liga ?rabe. ¡°Las demandas son adecuadas y justas¡±, a?adi¨®. Si termina por prender la ira en los territorios palestinos, se convertir¨ªa en la primera primavera ¨¢rabe presuntamente instigada y bendecida por sus gobernantes.
El apoyo de Abbas a las protestas de la poblaci¨®n contra Fayad es para numerosos observadores en parte un reflejo de las luchas intestinas de poder que consumen a la Autoridad Palestina. Fayad es un antiguo gestor del Fondo Monetario Internacional, que cuenta con el apoyo de las potencias occidentales y no forma parte del n¨²cleo duro del partido gubernamental Al Fatah.
"Vendr¨¦ aqu¨ª cada d¨ªa a protestar hasta que dimita Fayad"
Nabil Saath, peso pesado en Al Fatah se desmarca sin embargo del cerco a Fayad y aunque dice comprender el enfado de los manifestantes ¡°por que no hay esperanza de un proceso de paz¡±, cree que ¡°se equivocan de enemigo¡±. ¡°Somos pobres porque estamos bajo ocupaci¨®n israel¨ª. Por que confiscan nuestras tierras y consumen el 85% de nuestra agua. Por que no podemos comprar combustible a nuestros pa¨ªses vecinos y tenemos que pagar precios desorbitados¡±, explica a este diario.
Al margen del r¨¦dito pol¨ªtico que obtengan unos u otros, lo cierto es que el ambiente est¨¢ muy caldeado. El descontento y la frustraci¨®n cunde entre la poblaci¨®n palestina, que bien podr¨ªa aprovechar el benepl¨¢cito presidencial para canalizar su enfado. Al contrario que en protestas dirigidas contra el Gobierno en el pasado, ahora la polic¨ªa palestina deja hacer y deshacer a los manifestantes. El jueves por la noche por ejemplo, las calles de Bel¨¦n ard¨ªan, sembradas de neum¨¢ticos incendiados sin que a la polic¨ªa pareciese importarle.
En Ramala, un grupo de j¨®venes gritaba consignas en contra de Fayad ayer jueves en la c¨¦ntrica plaza de Al Manara. ¡°Fayad vete, vete¡±. Y modificaban el ya tradicional eslogan de las primaveras ¨¢rabes ¡°el pueblo quiere derribar al r¨¦gimen¡± por ¡°el pueblo quiere derribar a Fayad¡±. Lith Kanan, uno de los manifestantes que vocifera, de 19 a?os, explica que est¨¢ en el paro y que su padre, obrero de la construcci¨®n no puede permitirse pagarle estudios universitarios. ¡°Quiero trabajo, quiero estudiar. Vendr¨¦ aqu¨ª cada d¨ªa a protestar hasta que consiga que dimita Fayad¡±, informa.
Decenas de metros m¨¢s all¨¢, en la estaci¨®n de taxis central, un cartel anunciaba que el pr¨®ximo lunes habr¨¢ huelga de taxistas en todos los territorios palestinos. La subida de la gasolina es precisamente uno de los detonantes de las protestas. ¡°La gasolina ha vuelto a subir en s¨®lo una semana¡±, se queja Ahmed Said, un taxista de 65 a?os que el jueves secund¨® un paro de hora y media y que dice que piensa participar en el del lunes.
Las protestas, a pesar de no ser demasiado multitudinarias, s¨ª se han propagado por todos los territorios palestinos. Yen¨ªn, Hebr¨®n, Ramala, Bel¨¦n o Nabl¨²s son algunas de las ciudades palestinas en las que ha habido protestas.
La crisis financiera mundial ha provocado un importante descenso de las contribuciones de los pa¨ªses occidentales y tambi¨¦n de los ¨¢rabes al Gobierno de al Autoridad Palestina, cuya econom¨ªa sobrevive tradicionalmente gracias a la asistencia internacional. Organismos internacionales como el Fondo Monetario o el Banco Mundial destacan adem¨¢s reiteradamente en sus informes que la ocupaci¨®n israel¨ª y la restricci¨®n de movimientos que impone el Ej¨¦rcito a personas y mercanc¨ªas es uno de los principales obst¨¢culos con los que se topa la econom¨ªa palestina.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.