El nuevo presidente contar¨¢ con el regalo del ingreso en Mercosur
Ch¨¢vez se encontraba desde 2006 con el bloqueo del Congreso de Paraguay
El nuevo presidente de Venezuela contar¨¢ en su legislatura con un regalo que hace solo un a?o habr¨ªa parecido impensable: su ingreso en el Mercado Com¨²n del Sur (Mercosur). La destituci¨®n del presidente paraguayo, Fernando Lugo, por el Senado de su pa¨ªs el pasado 22 de junio abri¨® una puerta comercial enorme para Venezuela, al incorporarse al selecto club fundado en 1991 por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay. Por m¨¢s que Hugo Ch¨¢vez llamaba a la puerta de Mercosur, y a pesar de que los presidentes y los Parlamentos del resto de pa¨ªses estaban dispuestos a abr¨ªrsela, Ch¨¢vez se encontraba desde 2006 con el bloqueo del Congreso de Paraguay, dominado por los partidos conservadores. Pero apenas ocho d¨ªas despu¨¦s de la destituci¨®n de Lugo, los presidentes de Uruguay, Brasil y Argentina celebraron una cumbre en Mendoza y decidieron que se suspend¨ªa a Paraguay como miembro de Mercosur hasta que no celebrase nuevas presidenciales y, aprovechando que la suspensi¨®n le imped¨ªa ejercer el voto, se aprobaba la incorporaci¨®n de Venezuela.
La Am¨¦rica que aguarda al nuevo presidente venezolano parece ya estar muy lejos de los tensos enfrentamientos que se han vivido con Venezuela durante los 14 a?os que lleva Ch¨¢vez en el poder. Muy lejos parecen haber quedado las tensiones que en su d¨ªa mantuvieron Colombia y Venezuela, tensiones que llevaron a la suspensi¨®n de sus relaciones comerciales con Venezuela entre 2009 y 2010. El presidente Juan Manuel Santos, quien cuando ejerc¨ªa como ministro de Defensa se quejaba amargamente de las relaciones entre Venezuela y las FARC, una vez alcanzada la presidencia ha logrado recomponer sus relaciones con el Gobierno del pa¨ªs vecino.
Los grandes aliados ideol¨®gicos de Ch¨¢vez como Cuba, Bolivia, Nicaragua o Ecuador, aguardan expectantes el resultado de los comicios
La influencia de Venezuela en el continente no solo se ha extendido a los grandes aliados ideol¨®gicos de Ch¨¢vez como Cuba, Bolivia, Nicaragua o Ecuador, que aguardan expectantes el resultado de los comicios. En Argentina, los partidos de la oposici¨®n y los diarios m¨¢s cr¨ªticos con el Gobierno acusan a la presidenta Cristina Fern¨¢ndez de haber mimetizado de Ch¨¢vez su estilo de confrontaci¨®n y descalificaci¨®n de los rivales pol¨ªticos, el acoso a determinados medios de comunicaci¨®n, y el abuso de los discursos presidenciales retransmitidos por cadena nacional, es decir, en todos los canales p¨²blicos y privados del pa¨ªs. Sin embargo, a pesar de que Argentina es el tercer pa¨ªs de Am¨¦rica donde m¨¢s uso se hace de la cadena nacional, los 17 discursos que ha pronunciado Fern¨¢ndez este a?o quedan muy lejos de las 75 horas empleadas por Ch¨¢vez en la cadena estatal.
En su momento, el ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Luis Almagro, ya advirti¨® que su pa¨ªs no estaba de acuerdo ¡°por motivos jur¨ªdicos, pol¨ªticos y ¨¦ticos¡± con sumar a Venezuela en Mercosur. El presidente de Uruguay, Jos¨¦ Mujica, tuvo que hacer un ejercicio de equilibrio para defender las palabras de su ministro al mismo tiempo que su decisi¨®n de votar la incorporaci¨®n de Venezuela. Mujica reconoci¨® que en aquella cumbre de Mendoza se analizaron ¡°nuevos elementos pol¨ªticos que superaban largamente lo jur¨ªdico¡±.
Finalmente, Venezuela se incorpor¨® el pasado julio a la organizaci¨®n regional y todo un potencial de mercado qued¨® abierto para Caracas. A pesar de que Mercosur est¨¢ lastrado por la pol¨ªtica proteccionista de Argentina, a pesar de que sus avances en el levantamiento de aranceles ha sido m¨¢s bien escaso, abre un amplio margen de juego para todos. ¡°Mercosur tiene defectos en pila¡±, declar¨® el presidente Mujica, ¡°pero menos mal que los tenemos, porque todo el mundo dice que hay que abrirse con el mundo, pero el mundo no se abre con nosotros. Porque el mundo es macanudo, pero macanudo para vendernos, para comprarnos no es tan macanudo. Entonces, con todos los defectos que tiene el Mercosur, menos mal que lo tenemos¡±.
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