Cientos de presos kurdos mantienen una huelga de hambre en Turqu¨ªa

Entre 600 y hasta 1.000 presos turcos mantienen una huelga de hambre que, desde el 15 de octubre, es "indefinida e irreversible", seg¨²n la defini¨® el Partido para la Paz y la Democracia (BDP, en turco), el principal partido pol¨ªtico pro kurdo.

Fueron nueve mujeres presas en Diyarbakir, la principal ciudad kurda en Turqu¨ªa, en el sudeste del pa¨ªs, quienes iniciaron la huelga de hambre el 12 de septiembre. Ped¨ªan el derecho a usar el idioma kurdo en la esfera p¨²blica, en particular en los tribunales, y la eliminaci¨®n de los obst¨¢culos que impiden al l¨ªder kurdo Abdullah Ocalan negociar la paz con el Estado turco.

Ocalan es uno de los fundadores del Partido de los Trabajadores del Kurdist¨¢n (PKK, en kurdo), enfrentado al Gobierno turco desde 1984 en un conflicto armado que ha costado la vida a unas 40.000 personas. Actualmente, el PKK est¨¢ considerado una organizaci¨®n terrorista no s¨®lo por Turqu¨ªa sino tambi¨¦n por la Uni¨®n Europea y Estados Unidos.

Aunque al principio el PKK exig¨ªa la independencia para los kurdos, hace ya a?os que rebajaron sus demandas a una mayor autonom¨ªa. Ocalan fue arrestado en 1999 y condenado a muerte, castigo que se cambi¨® a cadena perpetua tras la abolici¨®n de la pena capital en Turqu¨ªa en 2004. El l¨ªder ha pasado gran parte de su condena en r¨¦gimen de aislamiento en la c¨¢rcel especial de la isla de Imrali, en el mar de M¨¢rmara, donde se ha convertido en un s¨ªmbolo para el pueblo kurdo.

Poco despu¨¦s del anuncio de las nueve presas, se unieron a la huelga otros kurdos encarcelados en diferentes partes del pa¨ªs, su n¨²mero empez¨® a crecer r¨¢pidamente y el 18 de octubre ya eran "m¨¢s de 600", seg¨²n el BDP. Por su parte, la Asamblea para la Paz en Turqu¨ªa, una iniciativa pro kurda de intelectuales y acad¨¦micos, cifr¨® el d¨ªa siguiente en "aproximadamente 1.000" los presos en huelga del hambre.

La cifra exacta de activistas es imposible de verificar debido al silencio de las autoridades turcas al respecto. Adem¨¢s, la prensa local apenas ha informado de este tema porque el Gobierno puede usar la ley antiterrorista para denunciar a cualquier medio que hable de la cuesti¨®n kurda. Aun as¨ª, la gravedad del asunto ha obligado a las autoridades a reaccionar y el ministro de Justicia, Sadullah Ergin, anunci¨® hoy que se va a reunir con algunos de estos presos.

"Tenemos informaci¨®n de que los participantes en la huelga de hambre no est¨¢n tomando suplementos de vitaminas para prevenir secuelas neurol¨®gicas irreparables. Han llegado a un punto en el que est¨¢n en riesgo sus vidas y que puede conducir a da?os permanentes", dijo el 18 de octubre en un comunicado Bayazit Ilhan, secretario general de la Asociaci¨®n M¨¦dica Turca.

El conflicto kurdo

Activistas pro kurdos denuncian tambi¨¦n una persecuci¨®n pol¨ªtica por parte de las autoridades. Se desconocen las cifras exactas pero, desde 2009, las autoridades turcas han usado la ley antiterrorista para arrestar a m¨¢s de 7.000 pol¨ªticos, abogados, periodistas, acad¨¦micos y activistas en favor de los derechos de los kurdos. M¨¢s de 2.100 de ¨¦stos est¨¢n ligadas al BDP, incluyendo al menos 274 cargos electos, seg¨²n cifras recopiladas por el International Crisis Group (ICG). Miles de ellos pasan meses o incluso a?os en prisi¨®n preventiva antes de ser llevados a juicio.

Los ¨²ltimos meses tambi¨¦n han visto el resurgir de la violencia del conflicto entre el PKK y el Gobierno turco. Desde junio del a?o pasado, al menos 708 personas han muerto en numerosos enfrentamientos, la cifra m¨¢s alta desde 1999. De estas v¨ªctimas, 405 son milicianos del PKK, 209 son soldados y polic¨ªas y 84 son civiles, seg¨²n el ICG.

Actualmente, las demandas de los insurgentes se resumen en una mayor autonom¨ªa y representaci¨®n pol¨ªtica dentro de Turqu¨ªa, que las leyes y la Constituci¨®n no discriminen a la minor¨ªa kurda, derecho a usar el idioma kurdo en la esfera p¨²blica y seguridad para la poblaci¨®n civil.

La guerra en Siria ha dado una nuevo giro a la situaci¨®n. Tras el inicio de la revuelta en marzo del a?o pasado, las tropas de El Asad se retiraron de las zonas kurdas sirias, cercanas a la frontera con Turqu¨ªa, que est¨¢n ahora bajo control del Partido de la Uni¨®n Democr¨¢tica (PYD). Este partido es una organizaci¨®n hermana del PKK turco, al que El Asad ahora permite operar en territorio sirio como represalia por el apoyo de Ankara a los rebeldes del Ej¨¦rcito Libre de Siria. Por su parte, Ir¨¢n, aliada de Damasco, tambi¨¦n ces¨® sus hostilidades contra la franquicia iran¨ª del PKK en respuesta al apoyo turco a los rebeldes sirios. Mientras tanto, en Irak los kurdos han conseguido su propia regi¨®n aut¨®noma con un Gobierno regional.

Esto apunta a uno de los peores temores del Gobierno turco, un Kurdist¨¢n independiente y separado de Ankara, un objetivo que p¨²blicamente niegan tanto el PKK como el PYD sirio.

Ceylanpinar es un pueblo kurdo en el sureste de Turqu¨ªa, justo en la frontera con Siria, a apenas 400 metros de Ras Al Ain, otro pueblo kurdo al otro lado de la frontera, en una situaci¨®n que se repite en todo el Kurdist¨¢n. En ambas poblaciones se habla kurdo, hay matrimonios mixtos y grupos de amigos procedentes de los dos pa¨ªses. Entre 30 y 38 millones de personas forman el pueblo kurdo, repartidas entre Siria, Ir¨¢n, Irak y Turqu¨ªa. Alrededor de la mitad est¨¢n en este pa¨ªs, donde representan entre el 15 y el 20 por cien de la poblaci¨®n.

"Son nuestros hermanos", dice Ramazan, un profesor de Ceylanpinar que no quiere dar su apellido, se?alando al otro lado. "No puedo contestar a esa pregunta", dice sobre una posible autonom¨ªa o independencia kurdas, "s¨®lo queremos vivir unidos, en paz y que cada uno viva su vida".