Una herencia envenenada
El PRI recibe un pa¨ªs atenazado por la violencia, pero tambi¨¦n en pleno despegue econ¨®mico Seguridad, paro y el fin de los monopolios son los retos inmediatos
Este es el M¨¦xico que Felipe Calder¨®n Hinojosa, presidente hasta este s¨¢bado, imagin¨® que entregar¨ªa a su sucesor: ¡°Imaginemos ahora el 2012 (¡) Cuando asum¨ª la Presidencia de la Rep¨²blica hab¨ªa 50 millones de pobres y 22 millones en pobreza extrema. Hoy hay 35 millones de pobres y 10 millones en pobreza extrema. (¡) Hemos bajado los ¨ªndices de delincuencia considerablemente (¡) El flujo de inversi¨®n ha permitido que los ¨²ltimos tres a?os hayan sido los de mayor crecimiento econ¨®mico en la historia contempor¨¢nea del pa¨ªs. Por ello se ha cumplido la meta de crear un mill¨®n anual de empleos; somos el sexto pa¨ªs m¨¢s visitado del mundo (¡) Logramos finalmente un acuerdo migratorio que ayud¨® a cambiar la polarizaci¨®n en la relaci¨®n M¨¦xico-Estados Unidos (¡) La cobertura m¨¦dica ha alcanzado a todos los municipios del pa¨ªs y no existe entre los ni?os menores de diez a?os uno solo que no cuente con m¨¦dico, medicinas y atenci¨®n hospitalaria¡±. Eso escribi¨® Calder¨®n cuando era candidato a la presidencia, en la primavera de 2006 (El Hijo Desobediente, Aguilar).
Pero este es el M¨¦xico que Felipe Calder¨®n entreg¨® este s¨¢bado a Enrique Pe?a Nieto: la cifra de pobres aument¨® a 57,5 millones seg¨²n unos indicadores, tan solo entre 2008 y 2010 aument¨® en 3,2 millones la poblaci¨®n que vive en la pobreza; el crecimiento promedio anual del sexenio no ha sido el mayor de la historia, de hecho su promedio anual de 1,9% es menor al 2,2% del gobierno de Vicente Fox (2000-2006) y al 3,5% de Ernesto Zedillo (1994-2000). En vez de un mill¨®n de empleos anuales, que es el m¨ªnimo que requiere este pa¨ªs para ocupar a la poblaci¨®n que se agrega cada a?o al mercado, se crearon en promedio solo 417.000; M¨¦xico es el d¨¦cimo pa¨ªs m¨¢s visitado por turistas, lejos del quinto lugar deseado por Calder¨®n; no hubo negociaciones ni mucho menos acuerdo migratorio con Estados Unidos y en cambio s¨ª hubo 110.000 homicidios dolosos en el sexenio, 50.000 m¨¢s que durante el Gobierno de Fox. En lo que Calder¨®n s¨ª acert¨® al escribir en 2006 su pron¨®stico fue en la cobertura m¨¦dica global, aunque las quejas por la baja calidad de los servicios y la falta de f¨¢rmacos fueron una constante.
Si bien los indicadores no retratan puntualmente la complejidad del sexenio que concluy¨® el 30 de noviembre, fecha en que tambi¨¦n se cierra el ciclo de dos Gobiernos consecutivos del partido Acci¨®n Nacional (PAN, derecha), s¨ª evidencian que las a?ejas aspiraciones de convertir a M¨¦xico en un pa¨ªs m¨¢s igualitario, potente econ¨®micamente y justo siguen en el mismo lugar que cuando el Partido Revolucionario Institucional fue desalojado del poder en el a?o 2000.
Pe?a Nieto recibi¨® este s¨¢bado la banda presidencial y con ello la herencia de un pa¨ªs en crispaci¨®n en el que amplios sectores claman porque se encuentre una soluci¨®n a la violencia del crimen organizado, que ha dejado alrededor de 60.000 homicidios en los ¨²ltimos seis a?os, asesinatos relacionados con los c¨¢rteles criminales que ya no se dedican solo al narcotr¨¢fico, ni ¡°se matan solo entre ellos¡±, sino que extorsionan, roban y secuestran en regiones enteras.
La sociedad adem¨¢s ha dado muestras de hartazgo frente a la desigualdad, que tiene a la mitad de los mexicanos en la pobreza y al 65% de la poblaci¨®n econ¨®micamente activa en trabajos informales o formales pero de precaria calidad. Entre aquellos sin oportunidades preocupan particularmente los llamados ninis, m¨¢s de 7 millones de j¨®venes de 15 a 29 a?os que ni estudian ni trabajan.
Apenas llegar a Los Pinos, Pe?a Nieto tendr¨¢ que echar a andar medidas que correspondan al supuesto que lo llev¨® al poder: debe hacer realidad la noci¨®n de que el PRI sab¨ªa gobernar y de que sab¨ªa, sobre todo, mantener a raya a los criminales. En este tema el equipo del nuevo presidente ha puesto una ambiciosa cifra en la mesa: reducir en 50% los homicidios en el primer a?o.
El Gobierno del pri¨ªsta nacido en el Estado de M¨¦xico en 1966 no tiene margen para el fracaso ni en seguridad ni en la generaci¨®n de empleos. Al mismo tiempo, su administraci¨®n deber¨¢ dejar claro desde sus primeras actuaciones que no es el ¡°viejo PRI¡±, por lo que deber¨¢ contribuir desde el poder a acrecentar el r¨¦gimen de libertades y de rendici¨®n de cuentas que trabajosamente los mexicanos han venido consolidando desde mediados de los a?os noventa.
Sin embargo, el nuevo Gobierno ha comenzado con el pie izquierdo. Su idea de modificar el aparato gubernamental para reincorporar a la Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n las labores policiales est¨¢ atascada en el Senado, y una iniciativa para regular la compra de publicidad en los medios, que prometi¨® ante la protesta estudiantil que sacudi¨® su campa?a, ni siquiera ha llegado al Congreso.
Cuestionado por buena parte de la opini¨®n p¨²blica como un pol¨ªtico que construy¨® una candidatura gracias a millonarios contratos con Televisa en sus tiempos de gobernador del Estado de M¨¦xico, Pe?a Nieto ser¨¢ juzgado con particular ¨¦nfasis por las medidas que tome para generar mejores condiciones de competencia real en las telecomunicaciones, sector en donde los intereses monop¨®licos, tanto en la televisi¨®n como en la telefon¨ªa, han ganado la batalla al Gobierno federal durante 12 a?os. La competitividad en general es tan renqueante que M¨¦xico ocupa el lugar 53 de las 144 naciones del ?ndice del Foro Econ¨®mico Mundial.
En seguridad, Pe?a Nieto ha prometido crear una gendarmer¨ªa nacional de unos 40.000 efectivos que se sumar¨ªan a los 36.000 polic¨ªas federales existentes hoy en M¨¦xico (Calder¨®n presume como uno de sus logros el haber reformado y acrecentado la Polic¨ªa Federal, que cuando ¨¦l inici¨® su gesti¨®n estaba compuesta de solo 6.000 elementos). Este nuevo cuerpo deber¨¢ ser la parte m¨¢s visible de un cambio de estrategia que a¨²n no se ha definido claramente. Como tampoco est¨¢ claro qu¨¦ har¨¢ el nuevo Gobierno para consolidar el modelo de justicia, que deja en la impunidad 99 de cada cien cr¨ªmenes que se cometen, seg¨²n la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos.
A pesar de la crisis de la inseguridad, que azota con m¨¢s sa?a a Estados como Coahuila, Veracruz, Guerrero, Michoac¨¢n, Sinaloa y Tamaulipas, M¨¦xico est¨¢ en su mejor momento para replantearse la a?orada meta de crecer al 7% anual, cifra prometida en su momento sin ¨¦xito por los Gobiernos panistas. Este a?o, el Producto Interno Bruto crecer¨¢ 4%, el doble que Brasil. El encarecimiento de la mano de obra en China, la estabilidad macroecon¨®mica de la econom¨ªa mexicana, la mejora de infraestructura viaria y la cercan¨ªa con Estados Unidos trazan un panorama favorable que, si las reformas fiscal y energ¨¦tica se concretan, permitir¨ªa explotar con ayuda de inversi¨®n privada todo el potencial de Petr¨®leos Mexicano (PEMEX) y el futuro podr¨ªa ser distinto al presente.
¡°Nunca han estado m¨¢s cerca los prop¨®sitos estrat¨¦gicos de cambio y las pol¨ªticas p¨²blicas propuestas por el PRI y por el PAN, al tiempo que en la izquierda empieza a verse el atisbo de una corriente dispuesta no s¨®lo a bloquear, sino tambi¨¦n a pactar y a influir en los cambios¡±, escribieron en la revista Nexos los escritores Jorge G. Casta?eda y H¨¦ctor Aguilar Cam¨ªn.
El diario Reforma public¨® una encuesta este s¨¢bado que revela que 48% de los mexicanos se siente optimista con el regreso del PRI a la Presidencia, mientras que 36% se dijo pesimista, carecen de opini¨®n 16%. Con esos n¨²meros y ese M¨¦xico que en los n¨²meros se parece mucho al de 2000, pero con una sociedad que usa con m¨¢s frecuencia las redes sociales para protestar de lo que no le parece, y con grupos que le cuestionan su legitimidad, comienza la presidencia de Pe?a Nieto.
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