Colombia se pone en guardia ante la nueva ofensiva de las FARC
La guerrilla retoma las armas tras dos meses de alto el fuego unilateral, que concluye a medianoche El di¨¢logo de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC contin¨²a en La Habana
Si todo ocurre como lo anunciaron las Fuerzas Amadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la tregua de dos meses que orden¨® la guerrilla a todas sus unidades el mismo d¨ªa que arranc¨® el di¨¢logo de paz con el Gobierno de Juan Manuel Santos en La Habana, terminar¨¢ justo a medianoche de este domingo.
¡°No habr¨¢ extensi¨®n del cese unilateral del fuego. Hasta ahora no hemos contemplado esa posibilidad. Solamente estar¨ªa dentro de las posibilidades la firma de un cese del fuego pero bilateral, si el Gobierno estima que es procedente esta medida¡±, anunci¨® Iv¨¢n M¨¢rquez, jefe negociador de las FARC, al reanudarse las conversaciones de paz tras un descanso por las fiestas de fin de a?o.
Y es claro, hasta ahora, que el presidente Santos, como lo ha sostenido desde que se conoci¨® que su Gobierno intentar¨ªa ponerle fin a un conflicto de casi medio siglo, no ceder¨¢ en este punto y que las operaciones militares continuar¨¢n hasta que se llegue a un acuerdo de paz con los insurgentes, con o sin tregua de las FARC. Esto a pesar de que la guerrilla, ante la negativa de Santos de pactar una tregua bilateral, tambi¨¦n ha propuesto un tratado de regularizaci¨®n de la guerra. ¡°Podemos acordar normas entre los contendientes para resolver prontamente situaciones de ca¨ªdos en combate, heridos y prisioneros, entre otros temas¡±, explic¨® Iv¨¢n M¨¢rquez en una entrevista publicada en un blog que la guerrilla ha creado a instancias del proceso de paz.
Santos se mantiene firme, entre otras cosas, porque estas treguas son vistas en Colombia como una artima?a de la guerrilla para rearmarse. Por eso, a pocas horas de que termine el alto al fuego, el Ej¨¦rcito y la Polic¨ªa colombiana est¨¢n alerta ante posibles acciones ofensivas de la guerrilla.
En diciembre, el comandante del Ej¨¦rcito, general Sergio Mantilla, incr¨¦dulo sobre el cumplimiento de la tregua, se?al¨® que las FARC estar¨ªan aprovechando el cese de hostilidades para planear nuevos ataques. Se refer¨ªa a que en Cauca (sur del pa¨ªs) las autoridades encontraron coches-bomba y morteros artesanales. ¡°Se les ve [a las FARC] una actitud como para comenzar a atacar en enero de manera indiscriminada¡±, dijo Mantilla.
Y han surgido evidencias en este sentido. Al inicio de la semana, el general de brigada ecuatoriano Fernando Proa?o, que comanda a los militares de su pa¨ªs desplegados en la frontera con Colombia, denunci¨® que las FARC habr¨ªan aumentado la compra de armas desde que se iniciaron las conversaciones de paz. ¡°Hemos capturado una gran cantidad de munici¨®n, armamento, y entonces como que podemos determinar que ellos aprovecharon esta situaci¨®n para fortalecer su situaci¨®n en prevenci¨®n de lo que pueda suceder a futuro¡±, dijo el oficial a Efe. En La Habana las FARC negaron que se est¨¦n rearmando desde Ecuador argumentando que la paz ¡°tiene enemigos abiertos y agazapados¡±.
Aun as¨ª, este viernes, el director de la polic¨ªa, general Jos¨¦ Roberto Le¨®n Ria?o, confirm¨® que se hab¨ªa descubierto un plan de las FARC para atacar tres unidades militares y de polic¨ªa en Bogot¨¢, una vez termine la tregua. Seg¨²n Le¨®n Ria?o, a tres horas de la capital colombiana se decomisaron explosivos y planos de los posibles ataques.
Tambi¨¦n se han hecho p¨²blicas las cifras de las acciones de las FARC durante la tregua. Por un lado, organizaciones como la Corporaci¨®n Nuevo Arco Iris y el Centro de Recursos para el An¨¢lisis de Conflictos (Cerac) registraron entre 9 y 14 acciones ofensivas de las FARC, pero por otro lado, las fuerzas militares reportan 52 violaciones a la tregua y la Defensor¨ªa del Pueblo, 57. Los reportes oficiales incluyen ataques contra patrullas, hostigamientos, atentados con explosivos, retenes ilegales y torres de energ¨ªa derribadas.
Pero si en algo coinciden las cifras es en que las operaciones ofensivas de la guerrilla disminuyeron considerablemente, comparadas con las registradas en el mismo periodo de 2011. La Corporaci¨®n Nuevo Arco Iris habla de una disminuci¨®n del 87% y las fuerzas militares de m¨¢s del 60%, lo que para algunos ya es un gran logro del proceso de paz. El mismo Santos lo reconoci¨® en una extensa entrevista a Caracol Radio. ¡°Tengo que reconocer que en su oferta de tregua unilateral [las FARC] han cumplido en buena medida, ha habido algunas violaciones, pero en t¨¦rminos generales sus cifras coinciden con las nuestras¡±, dijo el mandatario.
Diferentes jefes guerrilleros han explicado que las violaciones a las que se refiere Santos tienen que ver con errores de comunicaci¨®n justo al inicio de la tregua y que otros son su respuesta a operativos de la fuerza p¨²blica. El sexto frente de las FARC se?al¨® en un comunicado que sus hombres respetaban la tregua pero que ¡°se defender¨¢n si es necesario¡±. Algo que Iv¨¢n M¨¢rquez ha respaldado: ¡°Nos reservamos el derecho a defendernos¡±, ha dicho.
Aun as¨ª, para Mar¨ªa Victoria Llorente, directora de la Fundaci¨®n Ideas para la Paz, ¡°los resultados de la tregua demuestran que las ¨®rdenes del Secretariado las cumplen gran parte de las estructuras de la guerrilla¡±. Esto evidenciar¨ªa que las FARC a¨²n tienen unidad de mando, a pesar de que algunos sectores han dicho que existen fracturas internas y que no todos los bloques respaldan este intento por alcanzar la paz.
La gran pregunta que se hacen los colombianos es qu¨¦ pasar¨¢ despu¨¦s de la tregua y si se volver¨¢ a intensificar el conflicto. ¡°Es posible que las FARC est¨¦n programando acciones que sean representativas, pero otra cosa es que las puedan hacer. Si bien hubo un aumento de acciones antes de la tregua, estas no se comparan con el nivel militar que alcanzaron a tener las FARC en los a?os noventa, lo que demuestra su debilidad militar. Adem¨¢s, es claro que Colombia hoy cuenta con unas fuerzas militares y de polic¨ªa con mayor capacidad ofensiva¡±, dice Llorente.
Por ahora, los colombianos conf¨ªan en que se imponga en la mesa de negociaciones la posici¨®n del Gobierno de que el fin del conflicto no es una regularizaci¨®n de la guerra sino el fin de la misma.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.