Primeras evidencias de ejecuciones en el Mal¨ª controlado por el Ej¨¦rcito
Amnist¨ªa denuncia desapariciones y asesinatos de sospechosos de ser yihadistas
En Sevar¨¦, en el centro de Mal¨ª, hay una zona a la que llaman Million-Kin (Barrio de los Millonarios, en bambara, la lengua local). All¨ª, en un descampado no muy lejos de la pista de tierra, hay un cad¨¢ver semienterrado con descuido. Est¨¢ tumbado boca abajo, desnudo, y solo asoman sus nalgas y su brazo izquierdo. Parece que ha sido quemado y que no lleva all¨ª m¨¢s de 48 horas. Numerosos residentes en Mopti y Sevar¨¦ hablan, cada vez con m¨¢s insistencia, de que se est¨¢n llevando a cabo ejecuciones extrajudiciales por el mero hecho de ser extranjero y no tener papeles, ser de piel clara o por proceder del norte del pa¨ªs. Amnist¨ªa Internacional y la Federaci¨®n Internacional de Derechos Humanos (FIDH) aseguran tener pruebas que implican al Ej¨¦rcito de Mal¨ª.
Est¨¢ lejos de ser un secreto, pero todos hablan en voz baja. ¡°Hay que estar muy atentos. Estos d¨ªas est¨¢n pasando cosas en Sevar¨¦ y hay gente que est¨¢ desapareciendo¡±, asegura un residente. Algunos van m¨¢s all¨¢ y relatan incluso haber participado, en los ¨²ltimos d¨ªas, en la quema de una veintena de cad¨¢veres que luego han sido arrojados a pozos o enterrados en las afueras. Los pozos han sido rellenados con arena y grava. Imposible verificar a simple vista o saber si se trata de combatientes yihadistas que murieron en la batalla de Konna, a 70 kil¨®metros de aqu¨ª, como dicen unos, o de personas sospechosas de haber colaborado con los radicales y ejecutados de forma sumaria, como aseguran otros. Pero la presencia de un cad¨¢ver en Million-Kin es una evidencia imposible de negar.
El alcalde de Mopti, Oumar Bathily, asegura: ¡°hemos dado instrucciones a todo el mundo sobre los sospechosos. Si hay gente rara o desconocidos en el pueblo, hay que denunciarlos y que las autoridades se encarguen de hacer la investigaci¨®n. Sabemos que hay infiltraci¨®n de yihadistas y no lo vamos a permitir. Mopti siempre ha sido un lugar de acogida, abierto a todo el mundo, pero nos hemos dado cuenta de los peligros que esto entra?a¡±. Sin embargo, al ser preguntado por posibles hechos violentos en la ciudad, asegura no tener constancia. En la misma l¨ªnea, el coronel Didier Dacko, hasta hace solo unos d¨ªas responsable del Ej¨¦rcito maliense en Sevar¨¦, dice ¡°no haber escuchado nada¡±.
Amnist¨ªa Internacional piensa de otra manera. Un observador de esta organizaci¨®n ha recogido testimonios de arrestos, interrogatorios y torturas a personas sospechosas de haber colaborado con los yihadistas. En concreto, cita el caso de una mujer de etnia fulani. ¡°Un d¨ªa, mi hijo desapareci¨®. Le buscamos durante dos o tres d¨ªas pero no pudimos encontrarlo. Entonces, algunas personas nos contaron que el d¨ªa que desapareci¨®, el Ej¨¦rcito hab¨ªa disparado a dos personas y los hab¨ªa arrojado a un hoyo dentro de la base militar¡±, asegur¨® esta mujer a Amnist¨ªa Internacional. Por su parte, la FIDH habla de al menos diez ejecuciones sumarias en Sevar¨¦, mientras que Human Rights Watch dice haber recibido ¡°informaciones cre¨ªbles¡± respecto a graves abusos cometidos por las fuerzas de seguridad en Niono contra poblaciones ¨¢rabes y tuaregs.
En Wailhird¨¦ (Sevar¨¦) hay un pozo cercano a una base militar que muchos se?alan como uno de los lugares donde se est¨¢n arrojando los cad¨¢veres. En el brocal hay restos de sangre. Y otros testimonios apuntan a la existencia de agujeros y fosas donde est¨¢n siendo enterrados los cuerpos despu¨¦s de haber recibido un disparo en la cabeza. ¡°Los matan en una zona llamada Chechenie, donde se llevan a cabo las pr¨¢cticas militares de tiro¡±, asegura otro vecino. Hace unos d¨ªas desaparecieron el padre y el hermano de un gendarme, originarios del norte. Estas desapariciones se han intensificado en los ¨²ltimos d¨ªas, tras la llegada de los salafistas a la ciudad de Konna, pero no son algo nuevo.
Mohamed era un tuareg de unos cincuenta a?os procedente del norte muy conocido en Sevar¨¦. Ten¨ªa una peque?a tienda en la que vend¨ªa todo tipo de productos. En abril, tras la toma de Gao por los yihadistas, desapareci¨®. ¡°Todo el mundo sabe que est¨¢ muerto¡±, asegura un joven residente. El car¨¢cter ¨¦tnico de estas desapariciones es lo que m¨¢s preocupa a Amnist¨ªa. ¡°Vestir ropas tradicionales ¨¢rabes o tuaregs y no ser de Sevar¨¦ es suficiente para que te pare la polic¨ªa¡±, relata otro testimonio. En los ¨²ltimos d¨ªas hay gente que incluso se ha afeitado la barba para evitar ser confundidos con yihadistas.
En este sentido, Boucacar Traor¨¦, coordinador del campo de desplazados de Sevar¨¦ donde residen 587 ciudadanos que han huido de sus hogares en el norte, ha recomendado a las personas all¨ª acogidas no salir mucho estos d¨ªas a la calle ¡°hasta que la situaci¨®n sea estable¡±. En todo Mopti se ha declarado un toque de queda a partir de las nueve de la noche y muchos permanecen en sus casas por temor.
El ministro de Justicia de Mal¨ª, Malick Coulibaly, dio una respuesta inquietante a Amnist¨ªa Internacional cuando fue contactado por tel¨¦fono: ¡°Ning¨²n Ej¨¦rcito es perfecto. El estadounidense es uno de las m¨¢s profesionales del mundo y se ha descubierto que han cometido actos de tortura y asesinatos ilegales. Eso existe en todos los ej¨¦rcitos¡±.
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