Berl¨ªn y Par¨ªs festejan medio siglo de amistad

Separados por el Rin y por un pasado atroz en el que ambos fueron enemigos ac¨¦rrimos y tambi¨¦n socios, Alemania y Francia conmemoran el lunes y el martes en Berl¨ªn el 50? aniversario del Tratado del El¨ªseo, el pacto firmado el 22 de enero de 1963 por Konrad Adenauer y Charles de Gaulle que supuso la reconciliaci¨®n definitiva tras la Segunda Guerra Mundial y sirvi¨® de motor pol¨ªtico a la Uni¨®n Europea. Como primera estaci¨®n de las solemnidades, la canciller Angela Merkel y el presidente Fran?ois Hollande se han reunido hoy en la Canciller¨ªa berlinesa con 200 j¨®venes de ambos pa¨ªses.

Las sonrisas y los discursos no lo delataron, pero los mandatarios llegan a la cita m¨¢s alejados que nunca. La desconfianza mutua ha marcado las relaciones de los dos grandes de Europa desde que el socialista lleg¨® al poder en junio. Francia se siente maltratada y ninguneada por Alemania, que se niega a promover pol¨ªticas de crecimiento y adem¨¢s exige a Par¨ªs que haga sus deberes y reforme a toda prisa su econom¨ªa para ganar rigor y competitividad. En Berl¨ªn se considera a Hollande un aliado menos fiable que su predecesor Nicolas Sarkozy, que al final de su mandato hizo de escudero de la democristiana Merkel en las arduas negociaciones europeas que terminaron fijando el rumbo de austeridad y recortes defendido por Alemania. Berl¨ªn echa de menos un aliado firme en el El¨ªseo, junto al que disimular su propia preponderancia en el continente.

El malestar franc¨¦s ha crecido en las ¨²ltimas semanas con la urgente intervenci¨®n en Mal¨ª. Berl¨ªn se ha negado a enviar tropas y ha limitado su ayuda al env¨ªo de dos aviones de transporte militar, un mill¨®n de euros de ayuda humanitaria y la promesa de sumar instructores militares a la fuerza que organiza la UE.

Aunque ning¨²n miembro destacado del Gobierno galo osa criticar en p¨²blico esa postura, recordando que en Libia la implicaci¨®n alemana fue todav¨ªa menor, el l¨ªder de la oposici¨®n Jean-Fran?ois Cop¨¦ dijo que Alemania deber¨ªa formar parte de la coalici¨®n militar, aunque achac¨® la ausencia no a la tradicional reticencia alemana sino a la ¡°lentitud diplom¨¢tica¡± de Hollande. Merkel dijo que Berl¨ªn ¡°eval¨²a paso a paso¡± lo que se puede hacer para ayudar a Francia en el conflicto. ¡°Somos socios¡±, explic¨®, pero Alemania ¡°no tiene demasiada experiencia¡± en el continente africano. Ni parece dispuesta a adquirirla.

El verde Joshcka Fischer, exministro alem¨¢n de Exteriores, ha criticado que Merkel no se implique m¨¢s en el Sahel. ¡°No se puede decir que el terrorismo de Al Qaeda en Mal¨ª es una amenaza y dejar que otros hagan el trabajo¡±, ha declarado una entrevista conjunta con Jacques Delors en el semanario Der Spiegel. La colaboraci¨®n ¡°no tiene que pasar por el env¨ªo de tropas de combate, pero deber¨ªa ser m¨¢s importante que mandar dos aviones de transporte¡±.

Durante su reuni¨®n con los j¨®venes en Berl¨ªn, Merkel y Hollande no han eludido la autocr¨ªtica, pero s¨ª contestar a una pregunta sobre el salto federal de Europa. Hollande afirm¨® que Francia debe ser "complementaria y m¨¢s competitiva" y admiti¨® que "perdi¨® tiempo que debe recuperar para alcanzar a Alemania". Merkel, crecida en la Alemania oriental, destac¨® que "sin la amistad con Francia habr¨ªa sido imposible la unificaci¨®n alemana" de 1990.