Pacto en el Senado de EE UU para abrir la legalizaci¨®n de indocumentados
El presidente Barack Obama, que expondr¨¢ este martes extensamente su posici¨®n al respecto, respalda este acuerdo
Senadores dem¨®cratas y republicanos anunciaron este lunes un pacto sobre una reforma legislativa que incluya una v¨ªa, aunque larga y costosa, para la legalizaci¨®n de m¨¢s de once millones de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos, una verdadera revoluci¨®n del sistema migratorio con importantes consecuencias demogr¨¢ficas, econ¨®micas y pol¨ªticas. El presidente Barack Obama, que hoy martes expondr¨¢ extensamente su posici¨®n al respecto, respalda este acuerdo.
La iniciativa ha surgido de un grupo de ocho senadores ¡ªcuatro dem¨®cratas y cuatro republicanos¡ª con gran peso e influencia entre sus respectivos grupos, lo que hace pensar que, despu¨¦s de muchos y fracasados intentos durante varios a?os, esta vez se trata de una propuesta con considerables posibilidades de ¨¦xito, sobre todo en el Senado. Cosa diferente es en la C¨¢mara de Representantes, donde tiene mayor presencia el sector radical del Partido Republicano.
La iniciativa ha surgido de un grupo de ocho senadores ¨Ccuatro dem¨®cratas y cuatro republicanos- con gran peso e influencia entre sus respectivos grupos
Si este pacto prospera, estaremos ante la m¨¢s ambiciosa remodelaci¨®n del modelo migratorio norteamericano en varias d¨¦cadas, un paso que permitir¨¢ surgir de las sombras a millones de familias que viven en la semiclandestinidad y crear un nuevo mecanismo de control fronterizo y de visados para evitar otra acumulaci¨®n masiva de indocumentados en pocos a?os m¨¢s. Pero es un pacto que, para salir adelante, requiere de una serie de dif¨ªciles tr¨¢mites parlamentarios y, sobre todo, de una serie de arriesgadas decisiones pol¨ªticas que pueden llevar todav¨ªa varios meses. El optimismo actual se fundamenta en que, como dijo, Chuck Schumer, uno de los autores de la propuesta, ¡°por primera vez, hay m¨¢s riesgos pol¨ªticos en oponerse a la reforma migratoria que en apoyarla¡±. Schumer pronostic¨® que podr¨ªa votarse una ley en la primavera o verano pr¨®ximos.
El acuerdo fue anunciado por los n¨²meros dos y tres del Partido Dem¨®crata en el Senado, Dick Durbin y el propio Schumer, as¨ª como por el presidente del comit¨¦ de Relaciones Exteriores, el cubano-americano Bob Men¨¦ndez, y Michael Bennet, presidente del Comit¨¦ de Campa?a Senatorial Dem¨®crata, el ¨®rgano que dirige las campa?as electorales de los dem¨®cratas en esa c¨¢mara.
Por el lado republicano, firmaron los senadores John McCain y Lindsey Graham, dos veteranos que participan ahora en el esfuerzo de la facci¨®n moderada de su partido por separarse del Tea Party, y por los senadores Jeff Flake, un novato que intenta sumar al sector m¨¢s joven, y Marco Rubio. La presencia de este ¨²ltimo es la m¨¢s significativa. Rubio, tambi¨¦n de origen cubano, capitanea actualmente la ofensiva republicana para recapturar el voto latino, que ha abandonado dr¨¢sticamente a los conservadores en las dos ¨²ltimas elecciones presidenciales. Pero Rubio no es un enemigo del Tea Party ni un s¨ªmbolo del pasado, categor¨ªas ambas en las que milita McCain. Su presencia, por tanto, en ese octeto, es una de las razones por las que se puede ser optimista sobre la suerte de esta propuesta.
Aquellos que residan ilegalmente en EE UU y quieran recibir papeles tendr¨¢n que registrarse, demostrar su plazo de estancia, pagar un multa, ponerse al d¨ªa de los impuestos impagados desde que viven aqu¨ª, someterse a varias entrevistas, aprender ingl¨¦s y estudiar lo esencial de la historia y el sistema pol¨ªtico de este pa¨ªs
El acuerdo alcanzado no anuncia un camino de rosas para los indocumentados. No va a ser tan sencillo como presentarse en la oficina de inmigraci¨®n de la esquina con un recibo de la luz. Aquellos que residan ilegalmente en EE UU y quieran recibir papeles tendr¨¢n que registrarse, demostrar su plazo de estancia, pagar una multa, ponerse al d¨ªa de los impuestos impagados desde que viven aqu¨ª, someterse a varias entrevistas, aprender ingl¨¦s y estudiar lo esencial de la historia y el sistema pol¨ªtico de este pa¨ªs. Cumplidos esos tr¨¢mites, ser¨¢n puestos en la cola de las solicitudes legales de visado, con el objeto de no dar ventaja a los ilegales sobre aquellos que siguen el camino marcado de la ley. Durante el tiempo que dure esa tramitaci¨®n, podr¨¢n permanecer en el pa¨ªs, pero no tendr¨¢n acceso a¨²n al paro, la seguridad social y los dem¨¢s beneficios sociales que existen para los norteamericanos. En ¨²ltima instancia, millones de personas levantar¨¢n un d¨ªa su brazo derecho y jurar¨¢n fidelidad a la bandera y la Constituci¨®n de Estados Unidos.
Se aplicar¨¢n tres velocidades distintas en este proceso: una m¨¢s r¨¢pida para los j¨®venes que fueron tra¨ªdos sin papeles por sus padres y que han crecido y estudiado aqu¨ª, una intermedia para los trabajadores del campo, esencialmente en la producci¨®n de alimentos, y una tercera m¨¢s lenta para el resto de los inmigrantes.
La legalizaci¨®n est¨¢ sometida, adem¨¢s, a otras condiciones generales del sistema migratorio. Se reforzar¨¢ la polic¨ªa de las fronteras, se les facilitar¨¢ nuevo equipo y tecnolog¨ªa para cumplir m¨¢s eficazmente con su funci¨®n. En la medida en que se vaya certificando que esas medidas de seguridad avanzan, se ir¨¢n firmando los permisos de residencia a los indocumentados.
Se aplicar¨¢n tres velocidades distintas en este proceso: una m¨¢s r¨¢pida para los j¨®venes que que han crecido y estudiado aqu¨ª, una intermedia para los trabajadores del campo y una tercera m¨¢s lenta para el resto de los inmigrantes
Al mismo tiempo, se pondr¨¢ en marcha un nuevo m¨¦todo de seguimiento de los visados temporales para que las autoridades puedan asegurarse que nadie se queda posteriormente en el pa¨ªs de forma ilegal. Asimismo, se acelerar¨¢ la deportaci¨®n de aquellos a quienes, en el proceso de verificaci¨®n, se les encuentren antecedentes de delitos graves de car¨¢cter criminal.
En general, lo que se pretende es una completa modernizaci¨®n del sistema y una especie de borr¨®n y cuenta nueva que clarifique la situaci¨®n real y env¨ªe, de alguna forma, un mensaje a los futuros inmigrantes de que no se admitir¨¢ m¨¢s ilegalidad. En 2011, sin contar con los que consiguieron su objetivo, la polic¨ªa detuvo a 327.000 personas tratando de entrar al pa¨ªs ilegalmente. ¡°El actual statu quo es insostenible¡±, dijo McCain.
El magnetismo que EE UU tiene para los inmigrantes, pese a haber descendido en los ¨²ltimos a?os de crisis econ¨®mica aqu¨ª y de crecimiento en Am¨¦rica Latina, es todav¨ªa enorme. Esta es una naci¨®n de inmigrantes y no pretende dejar de serlo. Pero se quiere ordenar un poco ese tr¨¢fico y tambi¨¦n hacerlo m¨¢s selectivo. Parte de esta reforma tiene por objeto ampliar el n¨²mero de visados que se otorgan a investigadores, cient¨ªficos, promotores e innovadores en general ¡ªlos empresarios se quejan de una carencia de ese tipo de personal¡ª, mientras se reduce el n¨²mero de trabajadores manuales, excepto en el campo.
Ratificando la importancia de este paso para la comunidad hispana, el senador Men¨¦ndez ha utilizado el idioma espa?ol para asegurar que esta es una oportunidad como no ha habido otro para aprobar esta reforma.
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