Catar entrega la embajada siria en Doha a la oposici¨®n

Catar, uno de los pa¨ªses m¨¢s activos en el apoyo a la oposici¨®n al r¨¦gimen de Bachar el Asad, ha entregado hoy el edificio de la Embajada siria en Doha a la Coalici¨®n Nacional Siria (CNS), seg¨²n ha informado la cadena de televisi¨®n catar¨ª Al Yazira. La decisi¨®n equivale a reconocer a la CNS como un Gobierno en el exilio. Es el primero en dar ese paso, aunque Occidente, la mayor¨ªa de los pa¨ªses ¨¢rabes y numerosos organismos internacionales reconocen a ese frente opositor formado el pasado noviembre como ¡°leg¨ªtimo representante¡± del pueblo sirio.

¡°A partir de ahora, la bandera de la revoluci¨®n ondear¨¢ sobre la Embajada¡±, ha confirmado un comunicado de la CNS del que se hace eco France Presse. El texto, que califica el paso de ¡°extremadamente importante¡±, tambi¨¦n identifica al nuevo embajador como Nizar al Haraki, un ingeniero el¨¦ctrico de 51 a?os originario de la provincia de Deraa.

La Coalici¨®n nombr¨® el pasado noviembre embajadores ante los Gobiernos del Reino Unido y Francia, pero ni Londres ni Par¨ªs han procedido a¨²n a entregar las respectivas embajadas a la oposici¨®n. El gesto catar¨ª equivale a reconocer a esta como un Gobierno en el exilio.

Precisamente, la CNS se form¨® en la capital catar¨ª con el objetivo de unificar la lucha contra el r¨¦gimen de Damasco de la fragmentaria oposici¨®n siria. A diferencia de las otras monarqu¨ªas de la pen¨ªnsula Ar¨¢biga, Catar ha respaldado las revueltas populares desde el inicio de la primavera ¨¢rabe y no ha ocultado su deseo de formar para Siria una coalici¨®n internacional al estilo de la que contribuy¨® al ¨¦xito de la revuelta libia.

Sin embargo, todos los esfuerzos del emir catar¨ª, el jeque Hamad, no han logrado disipar los recelos occidentales, e incluso de sus vecinos ¨¢rabes, sobre los extremistas isl¨¢micos que parecen llevar la voz cantante en el levantamiento sirio. Su triunfo, temen, puede desatar cambios de poder imprevisibles en la regi¨®n y contagiar la inestabilidad a Irak, L¨ªbano e Israel. De momento, la violencia ha causado al menos 70.000 muertos, seg¨²n la ONU.