La ONU fracasa en su intento de lograr un tratado sobre el comercio de armas
Ir¨¢n, Corea del Norte y Siria bloquean la adopci¨®n del acuerdo que hubiera regulado por primera vez un mercado que mueve m¨¢s de 70.000 millones de d¨®lares
Ir¨¢n, Corea del Norte y Siria bloquearon ayer la adopci¨®n del Tratado sobre el Comercio de Armas de Naciones Unidas que hubiera regulado por primera vez en la historia un mercado internacional que mueve cada a?o m¨¢s de 70.000 millones de d¨®lares. Tras siete a?os de arduas negociaciones y dos semanas de maratonianas sesiones en la sede de la ONU en Nueva York, tres pa¨ªses ¨Ctodos aislados por su pobre historial de respeto de los derechos humanos; Corea del Norte e Ir¨¢n con embargos de armas de la ONU; y Siria en su tercer a?o de un conflicto que ya es una guerra civil- secuestraban en el ¨²ltimo momento el largo proceso de intento de regular el comercio internacional de armas convencionales, como ya ocurri¨® en julio del a?o pasado, cuando Estados Unidos ¨Cy otras naciones- pidieron ¡°m¨¢s tiempo¡± para negociar.
La aprobaci¨®n del tratado requer¨ªa el visto bueno de los 193 pa¨ªses que integran la ONU, pero ante el veto de Siria, Ir¨¢n y COrea del Norte, un grupo de naciones ¨Crepresentado por Kenia e integrado por Reino Unido, Jap¨®n, EEUU y otros ocho pa¨ªses- declar¨® que solicitar¨ªa al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, llevar el borrador final ante la Asamblea General para su adopci¨®n lo m¨¢s pronto posible, lo que podr¨ªa ser el pr¨®ximo martes 2 de abril.
La adopci¨®n en Asamblea General ser¨ªa una victoria pero que puede presentar sorpresas. Si el tratado hubiera sido aprobado ayer, la vinculaci¨®n de los pa¨ªses hubiera sido inmediata pero presentarlo ante la Asamblea puede suponer que naciones que ten¨ªan dudas las dejan ver ahora y se abstengan o incluso voten en contra. La oportunidad perdida es hist¨®rica y el sentimiento de frustraci¨®n reinaba entre las delegaciones gubernamentales y organizaciones c¨ªvicas que llevan a?os dando esta batalla de que s¨®lo puedan comerciar con armas pa¨ªses que cumplan unos est¨¢ndares de derechos humanos.
Pero tanto el secretario general ¨C¡°tiene confianza de que el Tratado de armas se aprobar¨¢¡±, dijo su portavoz, Martin Nesirky- como los activistas que integran la Coalici¨®n para el Control de las Armas ¨Cque agrupa a unas 100 organizaciones a favor del control de armas- declararon que es ¡°una cuesti¨®n de tiempo¡± que el acuerdo sea una realidad. ¡°El mundo ha sido secuestrado por tres estados¡±, afirm¨® decepcionada Anna Mcdonald, de Oxfam Internacional. ¡°No deber¨ªa de permitirse que pa¨ªses como Ir¨¢n, Siria y Corea del Norte dicten al resto del mundo la manera en que se debe de regular la venta de armas¡±.
Tras siete a?os de ¨¢rduas negociaciones y dos semanas de maratonianas sesiones en la sede de la ONU en Nueva York, tres pa¨ªses aislados por su pobre historial de respeto de los derechos humanos secuestraron en el ¨²ltimo momento el largo proceso
Tras 30 a?os batallando por la paz, Jordi Armadans viaj¨® hasta Nueva York para asistir a las dos intensas semanas de negociaciones en la ONU. En conversaci¨®n telef¨®nica, el director de la Fundaci¨®n por la Paz aseguraba que ¡°el proceso no tiene vuelta atr¨¢s¡±. ¡°Todos estos a?os han servido para poner sobre la mesa que el comercio de armas no es inocuo, que tiene serias consecuencias¡±, explica.
Armadans se mostr¨® satisfecho de que se hubiera reducido el n¨²mero de pa¨ªses para que el tratado entre en vigor, al pasar de 65 a 50. ¡°Eso sin duda facilitar¨¢ su puesta en marcha¡±, avanz¨®. Adem¨¢s, se han relajado los requisitos para futuras enmiendas, y no se exigir¨¢ que sean ¡°por consenso¡±, sino con el respaldo de tres cuartas partes de los pa¨ªses miembros.
¡°Esta es una gran oportunidad, no se trata de una campa?a de desarme sino de control¡±, enfatiz¨®. ¡°Si promovemos la democracia, la libertad y la dignidad¡±, argument¨® Armadans poniendo como ejemplo la primavera ¨¢rabe que estall¨® en 2011, ¡°es absurdo e indecente que pa¨ªses democr¨¢ticos vendan armas a reg¨ªmenes que usan esas armas para masacrar a la poblaci¨®n que reclama esos principios¡±. ¡°Este es un tratado que puede servir para que dejen de producirse muchas de las matanzas, genocidios y cr¨ªmenes de guerra que hemos vivido hasta ahora", finaliz¨® el director de Fundaci¨®n por la Paz.
El borrador del tratado establece que el acuerdo no pretende la regulaci¨®n del uso dom¨¦stico de armas de nunguno de los pa¨ªses firmantes. El pacto requirir¨¢ a todos los pa¨ªses firmantes aplicar una determinada moral a la venta de armas convencionales, que en principio supone que cada pa¨ªs eval¨²e, antes de cada transacci¨®n, si las armas vendidas podr¨ªan llegar a ser utilizadas para esquivar un embargo internacional, cometer un genocidio u otras violaciones graves a los derechos humanos o si pueden llegar a manos de terroristas o criminales. El borrador final permite a los estados determinar si una determinada transferencia de armas podr¨ªa contribuir a la paz y la seguridad o por el contrario a socavarlas.
Todos estos a?os han servido para poner sobre la mesa que el comercio de armas no es inocuo, que tiene serias consecuencias¡±, explica Jordi Armadans, director de la Fundaci¨®n por la Paz
La provisi¨®n de derechos humanos es muy potente en el boceto, al a?adir que la exportaci¨®n de armas convencionales debe de ser prohibida si van a ser usadas en ataques contra poblaci¨®n civil o edificios que alberguen civiles, como colegios y hospitales.
El tratado abarca a tanques, veh¨ªculos blindados y aviones de combate, sistemas de artiller¨ªa de gran calibre, helic¨®pteros de ataque, barcos de guerra, misiles y lanzamisiles, as¨ª como armas ligeras.
Estados Unidos -principal proveedor de armas del mundo- afirm¨® tras la reuni¨®n que el borrador conten¨ªa ¡°los objetivos para lograr un texto fuerte, equilibrado y aplicable que permitir¨ªa aumentar las prohibiciones de est¨¢ndares comunes para regular el comercio internacional de armas convencionales", explic¨® el jefe de la delegaci¨®n, Tom Countryman. Rusia reconoci¨® que en el texto hab¨ªa "omisiones" y "dudosas" cl¨¢usulas, como por ejemplo el nulo control de transferencias de armas a grupos rebeldes.
Pese al fracaso del jueves y la oportunidad hist¨®rica perdida, la Coalici¨®n para el Control de las Armas asegur¨® que no se daba por vencida. ¡°El tratado saldr¨¢ adelante, es solo cuesti¨®n de tiempo. Tenemos un mensaje claro para los violadores de derechos humanos: vuestro tiempo se agota¡±.
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