Europa observa con preocupaci¨®n la deriva pol¨ªtica en Roma
La debilidad italiana dificulta la creaci¨®n de un contrapeso del sur a Berl¨ªn
![Luis Doncel](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F64158797-297c-4250-bcf6-df63acefa8c3.jpg?auth=41f0c1c9035a93d745b533997997bf4407c24bdbe30e6578c03fefbc9dadb01f&width=100&height=100&smart=true)
![Seguidores de Grillo protestan contra Napolitano: “El desastre está servido”, dicen los carteles.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/BTUMSYGIZSRK2VNUFZX7FBPPFU.jpg?auth=7301782b3b3987bfad188a73c2113af5874d9fe8b5649ab9aa605b0f3698f816&width=414)
El vencedor de unas elecciones, incapaz de imponer dos veces seguidas a su candidato a jefe de Estado. El presidente de una Rep¨²blica, obligado a repetir, a los 87 a?os, un mandato que concluir¨¢ en 2020. O el l¨ªder de la tercera fuerza m¨¢s votada que marcha sobre la capital clamando contra un supuesto golpe de Estado. Estas son algunas de las im¨¢genes que ning¨²n l¨ªder europeo querr¨ªa presenciar y que acaban de ocurrir en la tercera potencia de la Eurozona. Bruselas ¡ªy los mercados¡ª respiraron ayer aliviados porque Italia por fin ha logrado nombrar un presidente, Giorgio Napolitano. Pero observa con creciente preocupaci¨®n un sistema pol¨ªtico que parece haberse averiado definitivamente.
Los vaivenes pol¨ªticos ya no influyen en los mercados de deuda como al principio de la crisis. Han pasado los d¨ªas en los que un concepto tan t¨¦cnico como la prima de riesgo ten¨ªa a todo un pa¨ªs en vilo. De hecho, la Bolsa de Mil¨¢n y la deuda italiana recibieron ayer con alegr¨ªa el nombramiento de Napolitano. Pero muchos dudan de que las buenas noticias hayan llegado para quedarse. ¡°La gran debilidad de Italia viene por el flanco pol¨ªtico, por su incapacidad para poner en marcha reformas. Y si estos problemas no se solucionan, terminar¨¢n por repercutir en los mercados¡±, sostiene un funcionario de la Comisi¨®n Europea.
Bruselas, Berl¨ªn y el resto de capitales esperan que el anciano presidente sea capaz de impulsar algo que hasta ahora ¡ªcasi dos meses despu¨¦s de las elecciones¡ª se ha revelado imposible: elegir un primer ministro que ponga en marcha las reformas que necesita Italia. La m¨¢s urgente es un cambio en la ley electoral, pero hay muchas otras. ¡°El Gobierno anterior ya hizo mucho, quiz¨¢s demasiado, para ajustar las cuentas. Pero hace falta mejorar la competitividad en distintos sectores, la educaci¨®n, sobre todo en el sur del pa¨ªs...¡±, sostiene Guntram Wolff, del think-tank belga Bruegel. Un ejemplo de hasta qu¨¦ punto es necesario un Gobierno para sanear la econom¨ªa es el plan de rescate dise?ado por el Banco Central Europeo para los pa¨ªses con problemas en su prima de riesgo. Activar el programa requiere la solicitud expresa del pa¨ªs; por lo que una Italia sin primer ministro no podr¨ªa beneficiarse de esta ayuda.
Los datos hechos p¨²blicos ayer por Eurostat no ayudan a la tranquilidad. Pese a que el d¨¦ficit p¨²blico parece m¨¢s o menos controlado ¡ªel a?o pasado se qued¨® en el 3% del PIB, un nivel bajo en comparaci¨®n con otros socios del euro¡ª, la deuda p¨²blica se dispar¨® al 127%. ¡°Italia lleva ya mucho tiempo en un lento pero continuado proceso de deterioro. Si hace 10 o 15 a?os la calidad de sus instituciones y su grado de corrupci¨®n estaban en niveles aceptables, ahora ha ca¨ªdo hasta estar codo a codo con Grecia¡±, sostiene Daniel Gros, director del Centro de Estudio de Pol¨ªticas Europeas.
Pero la par¨¢lisis que corroe las estructuras de poder romanas no da?a solo a Italia. En un momento en el que las tesis proausteridad amadrinadas por la canciller alemana, Angela Merkel, pierden fuerza, los pa¨ªses del sur podr¨ªan hacer frente com¨²n para apoyar una pol¨ªtica decidida de apoyo al crecimiento y al empleo. Pero los dos pa¨ªses que m¨¢s podr¨ªan tirar de este carro se han quedado sin fuerzas. Italia carece de Gobierno y el presidente franc¨¦s, Fran?ois Hollande, ya tiene bastantes problemas con esc¨¢ndalos como el de las cuentas millonarias en Suiza de su exministro de Hacienda, J¨¦r?me Cahuzac, y su acelerada p¨¦rdida de popularidad.
El nombramiento de Napolitano abre las puertas a un pacto izquierda-derecha para elegir un Gobierno de coalici¨®n que nadie sabe cu¨¢nto puede durar. La paradoja de este enredo es que emerge de nuevo con influencia el hombre al que tantas veces se ha dado por muerto, el ex primer ministro Silvio Berlusconi. Una situaci¨®n que contribuye a erizar los vellos en Bruselas. ¡°Al final parece que es el ¨²nico que sale ganando de todo esto. No es un gran consuelo¡±, dicen fuentes europeas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
![Luis Doncel](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F64158797-297c-4250-bcf6-df63acefa8c3.jpg?auth=41f0c1c9035a93d745b533997997bf4407c24bdbe30e6578c03fefbc9dadb01f&width=100&height=100&smart=true)