Una mujer asume en Costa Rica el tim¨®n de un Poder Judicial agitado

Las autoridades de Costa Rica suelen jactarse de sus posiciones vanguardistas en el acceso de la mujer en la pol¨ªtica y de la fortaleza de su sistema judicial. Ambas ¨¢reas se han juntado ahora en este pa¨ªs centroamericano al elegir a una magistrada como presidenta de la Corte Suprema de Justicia para liderar a este poder en los momentos de agitaci¨®n e incertidumbre.

Zarela Villanueva Monge, una jurista conservadora de apellido de casta pol¨ªtica, acab¨® ungida como cabeza del Poder Judicial y protagonista de otro de los hitos que muestran el ascenso femenino a los puestos de mando en un sistema pol¨ªtico que permite el voto femenino desde 1950 y que en el 2014 tendr¨¢ un m¨ªnimo de 45% de esca?os en manos de ellas. Villanueva se suma a mujeres que ya han presidido la Asamblea Legislativa en dos ocasiones (1986 y 2000) y a la actual gobernante Laura Chinchilla, quien gan¨® en el 2010 una campa?a electoral basada en buena parte en su condici¨®n femenina.

Villanueva, sin embargo, valora de manera especial su nombramiento en la silla m¨¢s visible de un poder ¡°tan conservador¡±, como dijo a EL PA?S este jueves. ¡°Los primeros cambios de una sociedad no se dan en su sistema judicial; quienes aplican el derecho son m¨¢s lentos en los avances sociales¡±, ha dicho la magistrada. Ella sustituye a Luis Paulino Mora, quien muri¨® en febrero pasado tras 14 a?os manejando los equilibrios entre la justicia y la pol¨ªtica.

La elecci¨®n tampoco fue f¨¢cil. Villanueva, hija de un expresidentes legislativo y de un diputado actual de bandera oficialista, logr¨® la mayor¨ªa de los votos secretos de los 22 magistrados tras varios d¨ªas de incertidumbre, con bloques enfrentados que refuerzan la imagen de una instituci¨®n colmada de tensiones y de retos para mantener su independencia o su apariencia de esta.

A esto quiz¨¢ se refiere Villanueva cuando habl¨® de ¡°afinar la institucionalidad¡± como una de sus prioridades de gesti¨®n. A esto suma hacer que la frase ¡°justicia pronta y cumplida¡± deje de ser solo un lema y se materialice en un pa¨ªs donde cada vez es mayor el reclamo popular contra la tardanza en las condenas o la impunidad. ¡°Es una deuda hist¨®rica¡±, calific¨® la magistrada Villanueva, quien tambi¨¦n mencion¨® la necesidad de ensanchar la rendici¨®n de cuentas de los jueces. ¡°Ya no se puede decir que las sentencias hablan por s¨ª solas; la ciudadan¨ªa requiere de m¨¢s explicaciones¡±.

As¨ª habla la presidenta del Poder Judicial seis meses despu¨¦s de que la instituci¨®n denunciara intentos de pol¨ªticos por influir en la Corte y sus sentencias. El protagonista fue el magistrado Fernando Cruz, a quien los legisladores decidieron no reelegir en el cargo como una manera de ¡°llamar la atenci¨®n¡± por los supuestos excesos de los jueces en sus potestades, sobre todo del Tribunal Constitucional.

Luis Paulino Mora, ahora fallecido, dijo entonces que hay ¡°campa?as de desprestigio de mayor debilitamiento contra los magistrados, producida por las mismas fuerzas oscuras que han cohonestado este triste episodio de nuestra historia; todo como una cortina de humo para esconder el verdadero fondo de sus intenciones: una Corte complaciente¡±.

Meses despu¨¦s Mora morir¨ªa de problemas respiratorios, Cruz retomar¨ªa su silla con aires de h¨¦roe popular y Zarela Villanueva acabar¨ªa tomando las riendas de un carruaje que chirr¨ªa, aunque a¨²n se le reconoce como exento de la filtraci¨®n de bandas de crimen organizado. El Poder Judicial acab¨® el 2012 ubicado en la media tabla en las instituciones con m¨¢s confianza de los costarricenses, mejor que los poderes Legislativo y Ejecutivo y peor que el Tribunal Electoral ola Iglesia Cat¨®lica.