El nuevo presidente iran¨ª promete un programa nuclear m¨¢s transparente

Relajado, seguro e incluso sonriente, el presidente electo de Ir¨¢n, Hasan Rohan¨ª, dio ayer su primera conferencia de prensa. Durante una hora y media, dej¨® claro que su prioridad es la reactivaci¨®n de la econom¨ªa, que est¨¢ dispuesto a ser ¡°m¨¢s transparente a¨²n¡± sobre el programa nuclear y que desea mantener buenas relaciones con todos los pa¨ªses, empezando por los vecinos. ¡°Con Estados Unidos, existe una vieja herida, pero tenemos que buscar la manera de curarla; no queremos ni mantener ni incrementar la tensi¨®n¡±, manifest¨® antes de enumerar tres condiciones para considerar el restablecimiento de los lazos diplom¨¢ticos.

Rohan¨ª present¨® su triunfo electoral como una ¡°declaraci¨®n de confianza¡± de los iran¨ªes en la Rep¨²blica Isl¨¢mica, e insisti¨® en que la elevada participaci¨®n, ¡°por encima del 72%¡±, ha cambiado la percepci¨®n del resto del mundo sobre su pa¨ªs.

El mandatario fija como prioridad reactivar la econom¨ªa y relanzar la diplomacia

¡°Este nuevo clima nos ofrece una oportunidad y estoy convencido de que nuestras relaciones internacionales van a mejorar¡±, se?al¨®. Las bases para ello son ¡°el respeto mutuo y los intereses comunes¡±. De ah¨ª que sobre el conflicto en Siria, respondiera que es un asunto que tienen que resolver los propios sirios ¡°sin interferencias extranjeras¡±. En un estilo que recordaba al presidente reformista Mohamed Jatam¨ª, mencion¨® el deseo de acercarse a los pa¨ªses isl¨¢micos, a sus vecinos (Arabia Saud¨ª, en especial), a Am¨¦rica Latina, pero tambi¨¦n a los europeos y a quien la propaganda oficial denomina ¡°el gran Sat¨¢n¡±, Estados Unidos. ¡°Es una pregunta dif¨ªcil¡±, contest¨® al periodista que se interesaba por las relaciones con ese pa¨ªs, sin esperar a la traducci¨®n y dejando claro que entiende el ingl¨¦s, idioma en el que estudi¨® su doctorado en la Universidad de Glasgow.

Rohan¨ª enumer¨® tres condiciones para reanudar las relaciones con EE UU. En primer lugar, ese pa¨ªs deber¨ªa ¡°comprometerse a no interferir en los asuntos internos de Ir¨¢n¡±; en segundo, ¡°reconocer todos los derechos de la naci¨®n iran¨ª, incluido el derecho [a tener un programa] nuclear¡±, y finalmente, ¡°poner fin a sus pol¨ªticas unilaterales y de acoso¡± hacia la Rep¨²blica Isl¨¢mica. Nada de esto es en realidad nuevo. Cambia sin embargo el contexto. El sorprendente triunfo del m¨¢s moderado de los candidatos a la presidencia de Ir¨¢n ha llevado a la Casa Blanca a ofrecer con rapidez contactos directos. Adem¨¢s, existe la sensaci¨®n de que las sanciones internacionales est¨¢n funcionando y que el r¨¦gimen iran¨ª busca una salida. De hecho, y a pesar del est¨¦ril debate sobre si el presidente tiene o no influencia en ese asunto, Rohan¨ª ha declarado que la soluci¨®n pasa por que ¡°las negociaciones con el Sexteto [las grandes potencias] sean m¨¢s activas¡±. Y, aunque dijo que ¡°el tiempo para suspender el enriquecimiento de uranio ya ha pasado¡±, se mostr¨® dispuesto a ofrecer ¡°m¨¢s transparencia a¨²n para convencer a todo el mundo de que Ir¨¢n est¨¢ actuando dentro de las normas internacionales¡±. Con ello espera poder poner fin a las sanciones, que calific¨® de ¡°brutales¡± y que ¡°solo benefician a Israel¡±.