Los 12 rostros del misterio que ha sacudido a M¨¦xico
Este mi¨¦rcoles se cumple un mes de la enigm¨¢tica desaparici¨®n de un grupo de j¨®venes Estos son los retratos personales de cada una de las v¨ªctimas del rapto del After Heavens
Este mi¨¦rcoles se cumple un mes de la desaparici¨®n de 12 j¨®venes en un after-hours de M¨¦xico DF. Un grupo de personas los rapt¨® sobre las diez de la ma?ana del domingo 26 de mayo afuera de la discoteca y se los llev¨® en coches. Ocurri¨® en una calle c¨¦ntrica, a unos pasos de un icono tur¨ªstico de la ciudad, el pedestal del ?ngel de la Independencia. Un hecho criminal de este calibre era in¨¦dito en la capital, y eso ha causado un fuerte impacto medi¨¢tico y social en el DF, poniendo en duda su imagen de ciudad segura y socavando el cr¨¦dito del Gobierno local. La fiscal¨ªa del DF es la encargada del caso. Su hip¨®tesis principal es que el m¨®vil del rapto es un conflicto entre pandillas por el control del narcomenudeo en las discotecas del centro de la capital. Por ahora no hay noticias del paradero de los j¨®venes, la mayor¨ªa del legendario y bronco barrio de Tepito. Este es un retrato personal de los 12 desaparecidos.
Alan Omar Atiencia Barranco
Una botana para ver al Am¨¦rica
Tiene 26 a?os y est¨¢ casado con Guadalupe Karen Morales Vargas, que tambi¨¦n est¨¢ entre los desaparecidos. Tienen tres hijos. Su padre es ecuatoriano, y se llama Manuel Buenaventura Atiencia. Su madre, Mar¨ªa Victoria Barranco, es mexicana. Dice que su hijo fue un ni?o activo hasta que entr¨® en preescolar a los tres a?os. Entonces se hizo callado. ¡°La maestra me dec¨ªa que se aislaba, y que ten¨ªa que hacer amiguitos¡±. A los seis a?os cambi¨® y volvi¨® a abrirse. Su madre dice que siempre se enojaba con poco. A una hermana suya no le gustaban las mu?ecas y le robaba los coches de juguete. ¡°Eso lo sacaba de sus casillas¡±. Mar¨ªa Victoria dice que cuando su hijo se desespera con algo se oye como le rechinan los dientes. Alan Omar trabaja en una tienda de recomposici¨®n de tel¨¦fonos. Es seguidor del Am¨¦rica. El d¨ªa antes de desaparecer le pidi¨® a su madre que le preparase una botana, unos entremeses, para ver a su equipo en la final del campeonato de liga. Al d¨ªa siguiente a las cuatro de la tarde la se?ora Barranco prepar¨® para su hijo un plato con queso manchego, salami y jam¨®n serrano. El partido empez¨® a las ocho. Alan Omar no apareci¨®. El Am¨¦rica gan¨® la liga en la tanda de penaltis.
Guadalupe Karen Morales Vargas
Adosada a su madre
Tiene 25 a?os. En casa le llaman Karen. Es la esposa de Alan Omar. Son de la misma vecindad de Tepito. Las casas de sus padres est¨¢n una enfrente de la otra. Cuando eran ni?os sal¨ªan por las noches a la entrada de la vecindad y se pasaban el rato hablando con sus amigos. ¡°Ella platicaba con una prima y le dec¨ªa que le gustaba Omar, y que quer¨ªa ser su novia, y que Omar no se animaba¡±, recuerda su madre, Ana Mar¨ªa Vargas. ¡°Luego ¨¦l empez¨® a regalarle cositas: una chamarra, perfumes, un anillo¡±. Karen trabaja en un puesto ambulante de lencer¨ªa. La ¨²ltima vez que la vio fue en la madrugada del domingo 26 de mayo. Era la una de la ma?ana. Ella y Alan Omar estaban fuera de casa con unas amigas. Estaban listos para irse de fiesta, pero Karen vio a su madre saliendo de casa a tirar la basura y a¨²n tuvieron que esperar a que la acompa?ase. Ana Mar¨ªa dice que su hija siempre andaba pegada a ella. La familia Vargas tiene dos perritas chihuahua: Chiquis, que es de Karen, y una hija suya, Pecosa, que es de su hermana Jessica. Como Karen no est¨¢, la se?ora Vargas ha mandado a Chiquis con su nuera.
Eulogio Fonseca Arreola
Aquella flor de loto
Tiene 26 a?os y es soltero. Vend¨ªa accesorios para tel¨¦fonos celulares en una tienda del centro hist¨®rico del DF. Su familia lleg¨® a la capital desde un pueblo de Quer¨¦taro que se llama San Pedro Huimilpan. Su padre muri¨® all¨¢ cuando su madre llevaba tres meses embarazada de Eulogio. Fue a darle de beber a un caballo, se resbal¨®, se cay¨® con el caballo en una fosa llena de agua y se ahog¨®. El padre tambi¨¦n se llamaba Eulogio. Al ni?o le pusieron ese nombre por ¨¦l y porque naci¨® el 11 de marzo, d¨ªa de San Eulogio. Su hermana Mar¨ªa dice que es un chico tranquilo, incluso cuando bebe: ¡°Puede tomar y perderse en la bebida, pero no se pone agresivo. Se queda dormido¡±. Su hermano en casa era poco hablador. A veces se met¨ªa en una habitaci¨®n donde tienen una computadora y se pon¨ªa a leer c¨®mics en internet. Ella dice que es inteligente y que se compraba los peri¨®dicos todos los d¨ªas. Tambi¨¦n le gusta dibujar. Una semana antes de su desaparici¨®n se compr¨® un cuaderno y l¨¢pices de colores. Mar¨ªa Fonseca recuerda que el d¨ªa que se compr¨® el cuaderno su hermano dibuj¨® una flor de loto.
Gabriela T¨¦llez Zamudio
¡°eres l amor d mi vida mami¡±
Tiene 34 a?os. Es madre soltera y tiene tres hijos, dos peque?os y una mayor, Danae, de 19 a?os. La noche en la que desapareci¨®, Gabriela sali¨® con Danae, pero a mitad de la noche volvieron a casa y su hija se qued¨® a dormir. Gabriela volvi¨® a salir y se fue al after-hours. Danae sol¨ªa ir de fiesta con su madre y a veces terminaban en este sitio. Dice que era un lugar ¡°pesado¡±, en el que se ve¨ªa a gente armada y en donde era f¨¢cil comprar ¡°tachas y perico¡±, pastillas y coca. Gabriela trabaja en una tienda de ordenadores y es la que mantiene a la familia. Su madre vive con ellos, pero es una mujer mayor con problemas de movilidad. Ahora Danae est¨¢ a cargo de los ni?os y de la abuela. Ella no estudia ni trabaja. El domingo pasado Danae escribi¨® en el muro de Facebook de su madre: ¡°hoy c cumple un mes d no vert t xtra?o mucho y aunke todo sto ha sido muy dificil no dejo d recordar k smp no la pas¨¢bamos super bn T AMO y smp stas n m mnt y n m coraz¨®n¡±. Puso el icono de una cara con una l¨¢grima y termin¨®: ¡°eres l amor d mi vida mami¡±.
Jerzy Ortiz Ponce
El diamante de Leticia
Tiene 16 a?os. Hasta que desapareci¨® ayudaba a su madre en un puesto ambulante de bisuter¨ªa. Ya hab¨ªa dejado los estudios. Es hijo de Jorge Ortiz, alias El Tanque, un supuesto peso pesado del hampa en el barrio bravo de Tepito: actualmente est¨¢ preso, y desde que naci¨® su hijo solo ha estado nueve meses fuera de la c¨¢rcel. Jerzy sali¨® voluminoso, como su padre. Mide 1.85 y pesa 110 kilos. La ¨²ltima vez que lo vio su madre, Leticia Ponce, fue el d¨ªa antes de su desaparici¨®n a las siete de la tarde. Jerzy apareci¨® en moto con su amigo Said S¨¢nchez, otro de los desaparecidos, le pidi¨® dinero para una torta y se fue. Su torta favorita era la torta de milanesa con quesillo. Jerzy era el consentido de la familia. Dorm¨ªa con su madre en la misma cama. ¡°Es mi beb¨¦¡±, dice la se?ora Ponce. Cuando su hijo se mov¨ªa demasiado y la aplastaba, lo mandaba a dormir al sill¨®n. Hace seis meses Jerzy Ortiz se tatu¨® un diamante encima de la mu?eca derecha, con permiso de su madre. Hace dos meses ella se tatu¨® en el mismo lugar lo mismo que su hijo peque?o.
Said S¨¢nchez Garc¨ªa
¡°Esa pinche cuatrimoto¡±
Tiene 19 a?os. Ayuda a su madre en un puesto ambulante de bolsos. Es muy amigo de Jerzy Ortiz. Supuestamente sus padres eran socios en el mundo del hampa. El padre de Said, Alejandro S¨¢nchez Zamudio, alias El Papis, tambi¨¦n est¨¢ encarcelado. A Said le gusta jugar a la videoconsola Xbox y hacer ejercicio en la barra. De peque?o jug¨® en un equipo de f¨²tbol americano que se llamaba Pieles Rojas. Su madre, Josefina Garc¨ªa, cuenta que su hijo siempre le dec¨ªa que quer¨ªa ser ¡°corredor de autos¡±. Hace dos semanas un amigo suyo fue a la fiscal¨ªa de M¨¦xico DF a manifestarse en apoyo de Said. Se llama Ram¨®n Roberto Hern¨¢ndez Villag¨®mez. Fueron amigos de ni?os, y dice que tiene recuerdos bonitos. Como la ¡°cuatrimoto¡± que ten¨ªa Said. ¡°And¨¢bamos para todos lados con esa pinche cuatrimoto, a por tortillas, a por dulces; no la solt¨¢bamos para nada¡±. Tambi¨¦n se acuerda de cuando llov¨ªa a c¨¢ntaros y se pon¨ªan a jugar al f¨²tbol en la calle, ¡°como loquitos¡±, y sus madres los rega?aban. Ram¨®n Roberto dice que no tiene ¡°confianza¡± en que Said aparezca. Dice que tiene ¡°fe¡±.
Jennifer Robles Gonz¨¢lez
Peluches y u?as postizas
Tiene 23 a?os. Es soltera y tiene un hijo. Su madre, Julieta Gonz¨¢lez, la vio por ¨²ltima vez el d¨ªa antes de que desapareciese. Por la ma?ana su hija le hab¨ªa pedido dinero para comprarse un chaleco blanco, pero ella no le dio nada. Jennifer consigui¨® el dinero por otro lado y sobre las cuatro de la tarde apareci¨® por casa con el chaleco. ¡°?Ya te fuiste a comprar tu chaleco, escuincla loca!¡±, le grit¨® su madre. A Jennifer le gusta la ropa y ponerse u?as postizas. Quer¨ªa que su madre tambi¨¦n se las pusiese, pero Julieta le dec¨ªa que le ser¨ªan inc¨®modas para trabajar. La madre de Jennifer fabrica mu?ecos de peluche en un taller que tiene en casa y luego los vende en la calle. Este lunes en su taller hab¨ªa diversas partes desmontadas de Mike Wazowski, un monstruo verde de un solo ojo de la pel¨ªcula Monsters, Inc. Jennifer no hac¨ªa los peluches, pero ayudaba a su madre en el negocio. A ella lo que le gustaba era arreglarse. Tiene el pelo negro. ?ltimamente lo llevaba te?ido de rubio. Igual que su hermana mayor, Jacqueline, que sol¨ªa salir de fiesta con ella. Pocos d¨ªas despu¨¦s de que raptaran a su hermana peque?a, Jacqueline se ti?¨® el pelo de negro.
Gabriela Ruiz Mart¨ªnez
¡°Ll¨¢mame Picos¡±
Tiene 25 a?os y trabaja de edec¨¢n. Viv¨ªa con otras j¨®venes en un departamento del DF. Se fue de casa a los 18 a?os. En su familia hab¨ªa problemas. ¡°Lindos no ¨¦ramos¡±, dice su madre, Mercedes Mart¨ªnez. Gabriela vivi¨® dos a?os en Canad¨¢ y se cas¨® con un canadiense mayor que ella. ¡°Tiene 50, o 45¡±, dice Mercedes, que manten¨ªa poco contacto con su hija y no conoce bien los detalles de su vida. Hubo una ¨¦poca en que Gabriela llegaba del colegio y le ped¨ªa a su madre que dejase de llamarla Gabriela y que la llamase Picos. Su madre dice que nunca le pregunt¨® por qu¨¦ quer¨ªa que la llamase as¨ª. ¡°Yo siempre andaba a la carrera, y no ten¨ªamos mucho tiempo, o no me daba yo el tiempo de platicar con ellas¡±. Dice que Gabriela era una chica tierna. Le gustaba usar tacones. Mercedes Mart¨ªnez cuenta que despu¨¦s de las desapariciones apareci¨® delante de la discoteca un zapato con 15 cent¨ªmetros de tac¨®n.
Josu¨¦ Piedra Moreno y Aar¨®n Piedra Moreno
El chef y el superviviente
En el caso se les conoce como los hermanos Piedra. Josu¨¦ tiene 29 a?os. Trabaja con su novia en un puesto ambulante de lentillas, pero ¨¦l quiere ser chef. En 2007 lo metieron en la c¨¢rcel por robo. En aquel momento era cocinero en un restaurante. Sali¨® de la c¨¢rcel cuatro a?os m¨¢s tarde. Su madre, Leticia Moreno, dice que era inocente. En la c¨¢rcel se aficion¨® m¨¢s a la cocina. Los seis reclusos con los que compart¨ªa celda no sab¨ªan cocinar. Josu¨¦ se convirti¨® en el due?o de la sart¨¦n, y la fama de sus guisos trascendi¨® barrotes. ¡°Hasta los custodios com¨ªan con ellos¡±, dice su madre. Aar¨®n admira a su hermano. Tiene 20 a?os. En 2008 sobrevivi¨® a la tragedia del News Divine, una discoteca en la que murieron nueve chicos y tres polic¨ªas por una redada policial que provoc¨® una estampida hacia fuera del local con la puerta de salida cerrada. A Aar¨®n le gustan los aparatos electr¨®nicos, y su sue?o es ser disc jockey. Leticia dice que es reservado y que su hermano Josu¨¦ es ¡°muy relajiento¡±, bromista. ¡°Aar¨®n siempre andaba detr¨¢s de ¨¦l¡±. El s¨¢bado 25 de mayo por la noche su madre los oy¨® hablar en la sala de casa. Se hab¨ªan duchado y se hab¨ªan cambiado de ropa. ¡°Estaban comentando entre ellos que iban a ir a un antro y que los hab¨ªan invitado a un cumplea?os al Cristal. Eso les alcanc¨¦ a o¨ªr, Cristal, y nada m¨¢s les dije que no llegaran tarde¡±.
Monserrat Loza Fern¨¢ndez
La ternura de una litera
Tiene 28 a?os. Es madre soltera de dos ni?os, Mayrin y Kevin Emiliano. Trabaja en una lavander¨ªa con su t¨ªa Beatriz Loza, que vive con ellos. La madre de Monserrat falleci¨® hace diez a?os. La se?ora Loza dice que su sobrina es una mujer ¡°luchona¡± y una trabajadora fina. ¡°Es delicada para la limpieza. No mezcla los tonos, ni las ropas de un cliente con otras¡±. Hasta que desapareci¨®, Monserrat Loza viv¨ªa volcada en sus hijos. Dorm¨ªan todos en la misma habitaci¨®n, en una litera. Arriba, ella con la ni?a. Abajo, el ni?o con la t¨ªa Beatriz. La noche en la que la raptaron, antes de salir de casa, se arregl¨® y fue a la habitaci¨®n a preguntarles si la ve¨ªan guapa. No le hicieron mucho caso, porque ya estaban medio dormidos. Su t¨ªa habla de ella con pasi¨®n. ¡°Tiene un ¨¢ngel que la ilumina, tiene brillo, tiene algo angelical¡±. Monserrat le regal¨® una blusa a su t¨ªa en su ¨²ltimo cumplea?os. Ella no la ha estrenado porque no es muy de su gusto. Su sobrina le dec¨ªa de broma que no le volver¨ªa a hacer un regalo. Beatriz Loza tiene claro qu¨¦ prenda va a vestir el d¨ªa que vuelva.
Rafael Rojas Marines
Cinco dientes postizos
Tiene 33 a?os. Es soltero y tiene una hija de 15. Trabaja en un puesto ambulante de gafas de Tepito. Vive solo con su madre, Ruth Marines. Ella dice que los dos tienen car¨¢cter y que sol¨ªan chocar. Hace unos meses Rafael tuvo un accidente de moto. Se rompi¨® un tobillo y un hombro, y perdi¨® cinco dientes. M¨¢s adelante su madre le dio la mitad del dinero que le costaba ponerse los dientes, pero ¨¦l se lo gast¨® y¨¦ndose con su novia a un balneario. Su madre lo descubri¨®. Fue una de esas veces en que chocaron. Rafael estuvo en la c¨¢rcel de 2004 a 2010 por robo. Su sue?o era tener un hijo var¨®n y que de mayor fuese boxeador. La se?ora Marines dice que la ¨²ltima noche que lo vio estaban en casa y se le qued¨® mirando. ¡°Y ¨¦l me dijo, ?por qu¨¦ te me quedas viendo, jefa?, que me voy a portar bien. Y yo, no vayas al antro, que hay mucho l¨ªo y t¨² con unas copitas de m¨¢s te pones loco. Y ¨¦l me dijo, no jefa, me porto bien, que yo estoy mal de mi brazo y de mi tobillo y no me puedo pelear¡±. Esa noche Rafael Rojas desapareci¨® con otros 11 j¨®venes en un after-hours del centro de la Ciudad de M¨¦xico. Dos d¨ªas antes le hab¨ªan puesto sus cinco dientes postizos.
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