El futuro de M¨¦xico se juega en las elecciones de Baja California

El gobernador del Estado fronterizo de Baja California, Jos¨¦ Guadalupe Osuna Mill¨¢n, est¨¢ acusado de malversar 1.350 millones de pesos, algo as¨ª como 103 millones de d¨®lares. El Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha puesto una denuncia en su contra ante la m¨¢xima Fiscal¨ªa electoral de M¨¦xico. El mandatario, del conservador Partido Acci¨®n Nacional (PAN), no se ha fugado ni mucho menos. Su caso es uno m¨¢s, quiz¨¢ el m¨¢s visible, de los ataques sin l¨ªmite que permearon la campa?a electoral que concluye este domingo. M¨¦xico celebra elecciones regionales en 14 Estados y la de Baja California es la ¨²nica en la que la gubernatura, que el PAN ha mantenido durante los ¨²ltimos 25 a?os, est¨¢ en juego.

Baja California, un Estado fronterizo con el extremo oeste de Estados Unidos, ha dejado una marca importante en la historia de la democracia en M¨¦xico. Aqu¨ª, en 1989, ocurri¨® lo nunca visto: el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que en 60 a?os no hab¨ªa perdido ni la presidencia del pa¨ªs ni una sola gubernatura, fue derrotado por el PAN, que desde entonces ha mantenido el poder.

Ahora el PRI, que recuper¨® la presidencia el a?o pasado y dos gubernaturas en manos de la oposici¨®n ¡ªChiapas y Jalisco¡ª, quiere continuar su triunfal regreso en Baja California. Pero el resultado en este Estado es, seg¨²n los observadores, imposible de pronosticar. Los dos candidatos principales, el priista Fernando Castro Trenti y el panista Francisco Vega ¡ªtambi¨¦n apoyado en esta elecci¨®n por el izquierdista Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica, PRD¡ª se acercan al final de una cerrada contienda.

El resultado de esta elecci¨®n no tiene solamente una lectura local. Aunque tiene personalidad propia, con sus afamados vi?edos de Valle de Guadalupe, su pujante industria maquiladora, y la leyenda viva que es Tijuana misma, Baja California marcar¨¢ el futuro inmediato de los dos partidos, el PRI y el PAN.

En el caso de los priistas, escribi¨® esta semana Adela Navarro, directora del semanario Zeta, ¡°se confirmar¨ªa el presidencialismo que ejerce con dedicaci¨®n Enrique Pe?a [Nieto], al asumir que no perder¨¢ su primera elecci¨®n. Para el PAN, retener la gubernatura de Baja California significa mucho m¨¢s en t¨¦rminos ideol¨®gicos que pr¨¢cticos: demostrar¨ªa que su modelo de proyecto de gobierno no est¨¢ vencido; permanecer¨ªan en el Estado icono de la democracia en M¨¦xico, y en el ¨¢mbito nacional les dar¨ªa un empuje electoral que requieren despu¨¦s del descalabro de 2012¡±.

Analistas y dirigentes afirman que las preferencias est¨¢n pr¨¢cticamente empatadas. Adem¨¢s de recorrer los cinco municipios que conforman el Estado ubicado en la parte norte de la pen¨ªnsula del mismo nombre, los candidatos se enfrascaron en una guerra de lodo donde ambos han sido cuestionados por su patrimonio. Y aunque se le achaca m¨¢s acumulaci¨®n de propiedades en M¨¦xico y Estados Unidos a Vega que a Castro Trenti, fue el priista quien perdi¨® m¨¢s con el intercambio de acusaciones, pues a lo largo de la campa?a vio evaporarse la ventaja inicial de dos d¨ªgitos que registraban algunas encuestas. Observadores locales atribuyen ese factor a que el PRI termin¨® haciendo del panista una v¨ªctima por la cantidad de ataques. Hace una semana, el semanario Zeta asentaba que la distancia entre ambos era m¨ªnima, apenas un 0,3% para Castro Trenti. El margen de error es de m¨¢s o menos un 4%.

El PRI ha publicado anuncios donde sostiene que Vega se neg¨® a debatir sobre los presuntos actos de corrupci¨®n ¡ªcomo una importante venta de terrenos p¨²blicos donde habr¨ªa tenido ganancia personal, e incluso sobre su p¨²blica relaci¨®n con la otrora poderosa l¨ªder del Sindicato de Maestros de M¨¦xico, la ahora detenida Elba Esther Gordillo. Panistas y perredistas acusan, por su parte, que ¡°Castro Trenti Miente¡±, y exponen que el candidato priista fue obligado a retirar spots donde se realizaban ¡°acusaciones falsas¡± a su contrincante.

M¨¢s all¨¢ de que el tono ha dejado claro que los miembros de la clase pol¨ªtica mexicana est¨¢n dispuestos a hacer cualquier acusaci¨®n, la campa?a ha desnudado que muchos de ellos son due?os de un abultado patrimonio en un pa¨ªs donde casi la mitad de la poblaci¨®n vive en la pobreza.

Pese a ello, M¨¦xico estar¨¢ pendiente de las elecciones en Baja California, porque as¨ª como en 1989 la derrota del PRI represent¨® el golpe de legitimidad que le urg¨ªa al entonces mandatario Carlos Salinas de Gortari, electo el a?o anterior en un proceso plagado de irregularidades y calificado como fraudulento, en 2013 se inaugurar¨¢ el talante que tendr¨¢ en lo electoral la presidencia del tambi¨¦n priista Enrique Pe?a Nieto.

Si aqu¨ª el candidato de su partido pierde (y si en los otros 13 Estados los procesos son medianamente justos), para Pe?a Nieto ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil sostener su discurso en torno al ¡°nuevo PRI¡±, con lo que el Pacto por M¨¦xico ¡ªuna de las banderas de su Presidencia¡ª saldr¨ªa fortalecido de cara a las reformas energ¨¦tica y fiscal que ya tocan la puerta del Congreso. Pero tendr¨ªa el inconveniente de que una importante corriente de su partido resentir¨ªa la derrota. Castro Trenti es pupilo del influyente Manlio Fabio Beltrones, un pol¨ªtico priista todopoderoso hasta que Pe?a Nieto se qued¨® con el partido en 2011.

En cambio, un pol¨¦mico triunfo del PRI en Baja California no solo abollar¨ªa la imagen del presidente, sino que dar¨ªa la puntilla al l¨ªder del PAN, Gustavo Madero, enfrentado al interior de su partido con los seguidores del expresidente Felipe Calder¨®n por su apoyo al mandatario priista. Sin ese socio, la agenda de reformas de Pe?a Nieto se tambalear¨¢.

No por nada, Jes¨²s Zambrano, presidente nacional del PRD, dijo el mi¨¦rcoles en esta ciudad que el proceso electoral del domingo ¡°va a marcar el futuro inmediato del pa¨ªs¡±. M¨¢s que por los resultados, ¡°por la calidad de las mismas¡±, explic¨®. Y lo dijo en medio de las acusaciones que han llegado a extremos in¨¦ditos, como denunciar ante la ley a un gobernador en funciones por un supuesto desv¨ªo multimillonario. El lodo como signo del futuro del pa¨ªs.