La noria m¨¢s grande y opaca de Am¨¦rica Latina

El Gobierno del Estado mexicano de Puebla (centro del pa¨ªs) ha emprendido la instalaci¨®n de una noria ¨C la m¨¢s grande de Am¨¦rica Latina- en medio de la pol¨¦mica por la forma opaca y clandestina con la que el proyecto se ha concebido. La rueda ha sido pagada con dinero p¨²blico de una regi¨®n del pa¨ªs que ocupa el cuarto lugar nacional en pobreza, con el 61% de su poblaci¨®n en esas condiciones, seg¨²n datos del Consejo Nacional de Evaluaci¨®n de la Pol¨ªtica de Desarrollo Social (CONEVAL). Adem¨¢s, toda la informaci¨®n relacionada con su instalaci¨®n y administraci¨®n ha sido ocultada de los ojos de los ciudadanos.

En medio del paisaje suburbio de la ciudad de Puebla (distante a 137 kil¨®metros de la capital mexicana) y al lado de un centro comercial se ha montado la estructura de la noria de 80 metros de di¨¢metro, que seg¨²n las autoridades servir¨¢ para animar la llegada de turistas a esa ciudad. La controversia comenz¨® por el precio que el Gobierno estatal ha pagado por la atracci¨®n: 15 millones de d¨®lares s¨®lo por la rueda y otro tanto igual por la construcci¨®n de un parque que albergue la estructura. Al saber de su compra, algunos miembros del Congreso local y ciudadanos cuestionaron que se destinara dinero p¨²blico en la adquisici¨®n de esta atracci¨®n.

El anuncio de la compra no lo hizo el Gobierno de Puebla sino la compa?¨ªa alemana Maurer German Wheels que entonces promocionaba la venta de la rueda transportable m¨¢s grande del mundo, la R8XL. Una estructura itinerante con 54 g¨®ndolas con capacidad para ocho personas en cada una y cuatro cabinas adicionales, denominadas VIP, donde pueden viajar seis personas. El Gobierno poblano justific¨® la compra bajo el argumento de que se adquiri¨® para celebrar el 5 de mayo ¨Cuna famosa batalla que ocurri¨® en Puebla y en la que M¨¦xico derrot¨® a Francia durante la invasi¨®n de 1862- y que para atraer a los turistas iba a ser instalada en el centro de la ciudad. Puebla es el s¨¦ptimo Estado en M¨¦xico en ocupaci¨®n hotelera y se caracteriza por recibir turistas nacionales atra¨ªdos principalmente por la historia colonial de su ciudad capital, que tiene un mill¨®n y medio de habitantes.

La rueda ha sido pagada con dinero p¨²blico de una regi¨®n? que ocupa el cuarto lugar nacional en pobreza

El Gobierno local se limit¨® a informar en febrero que 30 millones de d¨®lares del presupuesto para transporte cubrir¨ªan el costo de la rueda, sin presentar a los legisladores locales el proyecto. ¡°Esta rueda no puede ser, por un lado hay municipios que parecen del primer mundo y por otro hay zonas de alta marginaci¨®n. Las acciones de Gobierno siempre deben ir enfocadas a equilibrar el desarrollo, no a polarizarlo¡±, se?ala Ernesto Leyva, diputado local del Partido Revolucionario Institucional (PRI), cuyo grupo parlamentario se ha opuesto a la instalaci¨®n de la noria. Leyva es representante de Acatl¨¢n de Osorio, la regi¨®n mixteca al sur del Estado de Puebla, una de las mayores zonas expulsoras de inmigrantes de M¨¦xico hacia Estados Unidos. All¨ª, asegura, existen ¨¢reas donde la poblaci¨®n padece pobreza extrema y en el que proyectos de construcci¨®n de caminos est¨¢n a¨²n pendientes por falta de financiaci¨®n.

Las dudas sobre la pertinencia de adquirir la rueda, las han acentuado la opacidad y la carencia de informaci¨®n p¨²blica por parte del Gobierno estatal, asegura Lilia V¨¦lez, presidenta en Puebla de la Asociaci¨®n Mexicana del Derecho a la Informaci¨®n (AMEDI). Desde enero, V¨¦lez ha hecho solicitudes de informaci¨®n a la administraci¨®n local para conocer el impacto que el proyecto tendr¨¢ en el turismo local, as¨ª como para saber a detalle el gasto hecho en la atracci¨®n. Tras seis meses no ha obtenido una respuesta que despeje sus dudas por parte del Gobierno de Rafael Moreno Valle, un ex priista, ligado a Elba Esther Gordillo, que lleg¨® al poder respaldado por el derechista Partido Acci¨®n Nacional (PAN) y el izquierdista de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD).

La informaci¨®n sobre el costo de la rueda y el contrato de compra han sido clasificados como reservados durante siete a?os, y los estudios sobre el impacto tur¨ªstico no existen. ¡°Si todo est¨¢ bien, no tendr¨ªan por qu¨¦ ocultarlo¡±, comenta V¨¦lez, ¡°si van invertir tanto dinero en algo que de primera impresi¨®n es superfluo o poco importante, deben tener un argumento muy s¨®lido en por qu¨¦ vale la pena invertir ese dinero en eso y no en otra cosa como salud, educaci¨®n, o el combate a la pobreza¡±.

Fernando Crisanto, portavoz del Gobierno estatal, confirm¨® a EL PA?S que la informaci¨®n sobre la noria est¨¢ reservada. Tras la petici¨®n de este diario de una entrevista con los encargados del proyecto, comunic¨® que ning¨²n funcionario local puede hacer declaraciones sobre los detalles de la rueda y que el Gobernador Moreno Valle, la inaugurar¨¢ el 22 de julio. A la pol¨¦mica se ha sumado la asignaci¨®n de la administraci¨®n de la rueda a la empresa AyPP Constructores, una compa?¨ªa creada en 2010, a?o en el que Moreno Valle asumi¨® el cargo, y a la que el Gobierno local le ha asignado cuantiosos contratos en los ¨²ltimos tres a?os. El desconocimiento sobre el futuro de la rueda es total, las autoridades tampoco han explicado por qu¨¦ esta empresa fue elegida para operar la noria, ni el destino de las ganancias que la atracci¨®n generar¨¢ en los pr¨®ximos a?os.

El costo y el contrato de compra de la noria han sido clasificados como reservados por siete a?os

Las respuestas a las solicitudes de informaci¨®n de ciudadanos y periodistas dicen que la divulgaci¨®n del proyecto ¡°puede causar da?o o perjuicio al inter¨¦s del Estado y poner en riesgo su realizaci¨®n, o lesionar los intereses p¨²blicos o colectivos¡±. Sin embargo, no se explica cu¨¢l puede ser este da?o. Eduardo Boh¨®rquez, director ejecutivo de Transparencia Mexicana, se?ala que los casos de ocultamiento de informaci¨®n por parte de los gobiernos estatales en M¨¦xico son frecuentes. En el caso de Puebla, la ley local de Transparencia, por ejemplo, carece de la prueba de da?o, una figura que obligar¨ªa a la administraci¨®n a explicar por qu¨¦ desvelar la informaci¨®n sobre la noria representa un riesgo. ¡°Un asunto que deber¨ªa ser de tr¨¢mite, incluso de orgullo en t¨¦rminos de la inversi¨®n p¨²blica, se convierte en un asunto que tiene un velo de sospecha y de incertidumbre que va deteriorando la confianza en las instituciones p¨²blicas. Como estrategia, sin duda, es mejor hacer p¨²blica la informaci¨®n desde el principio¡±, comenta Boh¨®rquez a este diario.

Tras un debate de varios meses sobre la instalaci¨®n de la noria, que no pudo ser montada en el centro tur¨ªstico de la ciudad por ser un ¨¢rea cultural protegida, se design¨® su construcci¨®n en la zona de Angel¨®polis, una franja al poniente de la ciudad en disputa territorial entre los municipios de Puebla y San Andr¨¦s Cholula. El Gobierno fue pragm¨¢tico y pidi¨® permiso para instalar la rueda en los dos Ayuntamientos. ¡°Pareciera m¨¢s una cuesti¨®n de capricho, una frivolidad, una ocurrencia, cuando en ninguno de los instrumentos de planeaci¨®n del Estado estaban considerados estos recursos¡±, opina el concejal del Ayuntamiento de Puebla, David M¨¦ndez, quien se ha opuesto a este proyecto al observar que comenzaba como un plan poco claro y transparente.

La prensa local anuncia ya que la entrada a la noria costar¨¢ unos 7,5 d¨®lares, alrededor de dos d¨ªas de salario m¨ªnimo en M¨¦xico. Un precio por debajo de los 28 d¨®lares que el London Eye, la rueda en el coraz¨®n de Londres, cobra por un viaje de 30 minutos, pero alto para una regi¨®n que no goza de un im¨¢n tur¨ªstico como el de la capital brit¨¢nica. Por la noche, cientos de luces ya iluminan la noria que se ve a varios kil¨®metros de distancia y desde varios puntos de una ciudad que no se distingue por la altura de sus edificios. La rueda avanza lentamente durante las pruebas para su pr¨®xima apertura. Su brillante iluminaci¨®n, sin embrago, contrasta con la oscuridad con la que el proyecto ha sido concebido.