El Ej¨¦rcito egipcio acusa al expresidente islamista Morsi de traici¨®n
Al expresidente se le imputan los cargos de espionaje y conspiraci¨®n con Ham¨¢s Cinco personas mueren en Alejandr¨ªa en enfrentamientos entre islamistas y golpistas
Las calles de Egipto volvieron a evidenciar este viernes la profunda divisi¨®n que experimenta el pa¨ªs. Decenas de miles de personas participaron en las manifestaciones convocadas por las dos instituciones m¨¢s poderosas del pa¨ªs, el Ej¨¦rcito y los Hermanos Musulmanes, enfrentadas en un vitri¨®lico duelo desde que el expresidente Mohamed Morsi fuera depuesto en un golpe militar el pasado 3 de julio. A pesar de la enorme tensi¨®n, la mayor¨ªa de concentraciones transcurrieron de forma pac¨ªfica, si bien se registraron disturbios en varias ciudades. Los m¨¢s graves tuvieron lugar en Alejandr¨ªa, donde fallecieron siete personas personas y m¨¢s de un centenar resultaron heridas. Seg¨²n Reuters en total hubo nueve fallecidos en todo el pa¨ªs.
La jornada estuvo marcada por la noticia del arresto formal de Morsi por un plazo de 15 d¨ªas mientras un tribunal investiga varias acusaciones en su contra, entre ellas la de conspirar con la milicia palestina Ham¨¢s y de estar involucrado en la muerte de polic¨ªas egipcios. El exrais se encuentra incomunicado en paradero desconocido desde la asonada, pero no hab¨ªa sido a¨²n acusado de manera formal.
En concreto, se le acusa de espionaje y de planear con Ham¨¢s el asalto a la prisi¨®n de Wadi al Natrun durante la revoluci¨®n de 2011, lo que les habr¨ªa permitido escapar de la c¨¢rcel a ¨¦l y a otros l¨ªderes de los Hermanos Musulmanes. Asimismo, se le achaca haber participado con la milicia palestina en la preparaci¨®n de ataques a comisar¨ªas de polic¨ªa durante la revuelta que propici¨® la ca¨ªda de Hosni Mubarak. En esos hechos, fueron secuestrados y asesinados varios oficiales de polic¨ªa.
Partidarios y detractores del golpe de Estado sacan a decenas de miles de partidarios a las calles en todo el pa¨ªs
Los l¨ªderes de la Hermandad han descalificado el proceso judicial tach¨¢ndolo de maniobra pol¨ªtica. ¡°Esta decisi¨®n es nula porque proviene de un fiscal general ileg¨ªtimo y traidor. Las nuevas autoridades son golpistas, no las reconocemos¡±, declar¨® el predicador de la Hermandad Sawfat Hegazy tras pronunciar un discurso en el escenario levantado frente a la mezquita de Rab¨¢ al Audawiya, centro neur¨¢lgico de las protestas a favor de la restituci¨®n de Morsi. El estado del l¨ªder islamista ha suscitado el inter¨¦s de ONG y Gobiernos occidentales, que han solicitado p¨²blicamente su liberaci¨®n a las autoridades. Estas se limitan a asegurar que ¡°est¨¢ siendo tratado correctamente¡±.
Durante estas tres semanas de detenci¨®n, Morsi ha sido interrogado por oficiales de la inteligencia militar al menos una vez al d¨ªa en sesiones de hasta cinco horas, seg¨²n informa la agencia de noticias AP citando fuentes an¨®nimas. El ex rais se encontrar¨ªa ahora fuera de El Cairo, y habr¨ªa sido trasladado al menos tres veces. Los interrogatorios han abarcado numerosas decisiones de su presidencia, as¨ª como tambi¨¦n el rol de otros l¨ªderes de la Hermandad, lo que sugiere que las autoridades podr¨ªan estar recabando informaci¨®n para ilegalizar la cofrad¨ªa.
Desafiando el ultim¨¢tum del Ej¨¦rcito, que el jueves dio al movimiento islamista 48 horas para poner fin a sus movilizaciones diarias y sumarse a su hoja de ruta para la transici¨®n, una multitud se dio cita en Rab¨¢ al Audawiya. ¡°No tenemos miedo. Ya nos han disparado, nos han agredido, nos han amenazado con arrestos. Pero no nos iremos de aqu¨ª hasta que devuelvan a Morsi la presidencia¡±, comentaba Essam, un salafista propietario de una tienda de motocicletas en Alejandr¨ªa que pasa la noche en la acampada de Rab¨¢ cuando se lo permite el trabajo.
Tras el ultim¨¢tum militar, muchos temen que se recrudezca el acoso a los Hermanos Musulmanes
En su ultim¨¢tum, hecho p¨²blico a trav¨¦s de un comunicado en su p¨¢gina de Facebook, las Fuerzas Armadas aseguran que a partir de hoy cambiar¨¢n ¡°su estrategia contra el terrorismo¡± y adoptar¨¢n medidas m¨¢s contundentes. Si bien en el texto no se menciona a la Hermandad como destinataria del mensaje, esta fue la interpretaci¨®n mayoritaria de los medios de comunicaci¨®n del pa¨ªs. En las pr¨®ximas horas las autoridades podr¨ªan intensificar el acoso a la cofrad¨ªa, una medida combinada quiz¨¢ con una ofensiva militar en la pen¨ªnsula del Sina¨ª, escenario de numerosos ataques contra las fuerzas de seguridad.
Quiz¨¢s con estas medidas en mente, el ministro de Defensa, Abdelfatah al Sisi, convoc¨® ayer una manifestaci¨®n para conseguir la ¡°autorizaci¨®n¡± del pueblo en su batalla contra ¡°el terrorismo y la violencia¡±. El caudillo recibi¨® el ba?o de masas que hab¨ªa solicitado. Por la tarde, en una plaza de Tahrir convertida en un mar de banderas egipcias, no cab¨ªa un alfiler mientras los manifestantes entonaban el ya c¨¦lebre c¨¢ntico ¡°?El pueblo y el Ej¨¦rcito, una sola mano!¡±. En la plaza circulaban carteles con la efigie de Al Sisi junto a las de Nasser y Sadat, y unas tarjetas rojas en las que se le¨ªa: ¡°Los egipcios contra el terrorismo¡±.
Sin embargo, el volumen de las concentraciones fue inferior a las del 30 de junio, cuando millones de egipcios salieron a las calles para pedir la dimisi¨®n de Morsi, lo que podr¨ªa significar que una parte de la sociedad no aprueba la estrategia de confrontaci¨®n y el papel protagonista que ha asumido Al Sisi. Por ejemplo, el Movimiento 6 de Abril, uno de los m¨¢s grupos revolucionarios m¨¢s conocidos, evit¨® secundar la marcha.
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