¡°Per¨² es el pa¨ªs m¨¢s conservador de Am¨¦rica Latina¡±

Rafael Roncagliolo (Lima, 1944) fue uno de los pocos ministros del gabinete inicial de Ollanta Humala con experiencia pol¨ªtica y or¨ªgenes de izquierda. Dej¨® el cargo a mediados de mayo por una afecci¨®n card¨ªaca y tras ser atacado p¨²blicamente por Nicol¨¢s Maduro por llamar al di¨¢logo en Venezuela. Despu¨¦s de estar internado en cuidados intensivos en una cl¨ªnica a comienzos de julio, recibe a EL PA?S en su casa, animado, y al final de una sesi¨®n de terapia f¨ªsica. Con reservas, reconoce el momento complejo que atraviesa el Gobierno de Ollanta Humala al cumplir dos a?os.

Pregunta. ?C¨®mo de dif¨ªcil ha sido para Per¨² actuar en dos bloques tan distintos como Unasur y la Alianza del Pac¨ªfico?

Respuesta. La clave de la pol¨ªtica peruana ha sido servir como punto de convergencia de las distintas posiciones, el hecho de pertenecer a la Alianza del Pac¨ªfico y mantener la presidencia de Unasur son complementarios. Participa en la primera para asegurar la presencia en la cuenca del Pac¨ªfico y en Unasur porque en el mundo del futuro, en las grandes ligas solo los bloques podr¨¢n tener lugar. Unasur significa un acuerdo de seguridad y defensa. En estos dos primeros a?os del Gobierno del presidente Humala hemos conseguido un buen equilibrio: ser miembros de la Alianza del Pac¨ªfico y un compromiso firme con Unasur.

P. El presidente Humala no quiso recibir a Henrique Capriles cuando vino a Lima a pedir que se respetara un compromiso que hicieron los presidentes de Unasur en abril.

R. Lo de Capriles me parece un tema secundario. Los pa¨ªses tenemos que sujetarnos a lo que digan los organismos electorales de cada pa¨ªs y Unasur hizo un llamado al dialogo y la tolerancia.

P. Pero tambi¨¦n hubo un compromiso de investigar la violencia y saludaron un anuncio de auditor¨ªa que luego no se concret¨®.

R. Ahora bien: ?Hasta d¨®nde puede llegar la comunidad internacional? Hasta donde los actores nacionales lo piden.

P. ?Lo piden o lo permiten?

R. Lo piden. Lo piden. La comunidad internacional no puede imponerse. En este momento, por parte de Venezuela no hay inter¨¦s en que haya un tipo de supervisi¨®n internacional. Tampoco creo que los presidentes deban dedicarse a intercambiar insultos y agravios en p¨²blico como ocurri¨® en el pasado. No hay que dividir la regi¨®n entre los pa¨ªses buenos y malos. No estamos en esta pelea de cowboys. Recibir a Capriles podr¨ªa haber parecido que pertenecemos a un bloque al que no pertenecemos.

P. El presidente Maduro lo atac¨® verbalmente pero no hubo una reacci¨®n p¨²blica del Gobierno para solidarizarse con usted.

R. Repito que no estoy de acuerdo con esta pol¨ªtica del pasado de que los presidentes entren en una escalada de declaraciones. Determinados exabruptos solo perjudican a quienes lo profieren y no requieren respuesta.

P. Se especul¨®, como otro motivo de su salida, que no estuvo a favor del voto de Per¨² por M¨¦xico en la OMC.

R. Esas ya son interioridades de la pol¨ªtica del r¨¦gimen sobre las cuales no me parece prudente ni leal entrar en infidencias. Puede haber diferencias sobre algunas cosas, pero apliqu¨¦ la pol¨ªtica del presidente, que es quien fija la pol¨ªtica internacional.

P. ?Acept¨® ser canciller por alguna promesa puntual del presidente?

R. S¨ª. Iba a hacer un Gobierno de concertaci¨®n. Yo vengo del Acuerdo Nacional y tambi¨¦n creo en la concertaci¨®n latinoamericana. El segundo punto fue el mensaje del presidente Humala de crecimiento con inclusi¨®n.

P. Pero la pluralidad que hubo al inicio del Gobierno se perdi¨®. Prescindieron de ministros m¨¢s progresistas y algunos hoy son opositores.

R. Yo entr¨¦ a un gabinete en el que ten¨ªa grandes amigos, como Salom¨®n Lerner, pero permanec¨ª mientras pens¨¦ que esta l¨ªnea de pol¨ªtica exterior se manten¨ªa, se mantuviera, se ha mantenido, y no me gustar¨ªa opinar sobre los otros cambios. Mantengo un gran respeto por el presidente.

P. ?Entonces esas salidas no le parecen un cambio en el aspecto de concertaci¨®n?

R. Todos los fen¨®menos pol¨ªticos son complejos y en esas salidas hubo muchos aspectos. Uno es que hab¨ªa muchas contradicciones entre los ministros. El segundo gabinete fue un poco menos dialogante y el actual me parece que est¨¢ recuperando la perspectiva de di¨¢logo. Hubo cosas en ese primer cambio de gabinete que lo hac¨ªan necesario, aunque no me gustaron, pero eso no significaba que me tuviera que ir.

P. A este tercer gabinete se le critica por su poca visibilidad y resultados y ello ha coincidido con evidencias de la capacidad de decisi¨®n de la primera dama.

R. No voy a entrar a juzgar a mis antiguos colegas de gabinete ni a la primera dama. Hay una cosa que quisiera agregar de mi sector: tenemos pendiente de aprobaci¨®n en el Congreso el proyecto de Boliviamar. Tambi¨¦n est¨¢ pendiente el llamado ¡®incidente de la mortadela¡¯ con Ecuador, porque la vocaci¨®n de integraci¨®n no es solo con Chile. No se han vuelto a nombrar a los embajadores de Per¨² y Ecuador en Quito y Lima, respectivamente.

P. Tambi¨¦n ha habido denuncias por la falta de transparencia en aspectos de seguridad y defensa.

R. El Gobierno ha tratado de mantener la mayor transparencia en esos aspectos, salvo en lo que se refiere a la lucha antiterrorista, donde es necesario un cierto nivel de opacidad por razones obvias.

P. Hace semanas que hay protestas contra el Gobierno. Empezaron los empleados p¨²blicos a quienes no se consult¨® sobre una nueva ley que los afecta y los universitarios, por otra ley. ?El pragmatismo lleva al presidente a avanzar sin consultar?

R. Todo Gobierno tiene un dilema inevitable. La necesidad de consultar contra la necesidad de avanzar. Hoy hay una mesa de di¨¢logo con el gremio principal y el di¨¢logo con los sindicatos es tan importante como con los empresarios. La Ley Servir es una reforma muy importante porque por primera vez no apela a los despidos masivos. Ambas leyes pod¨ªan someterse a una mayor consulta, pero la estructura del Estado peruano es una en que los poderes formales son muy d¨¦biles frente a los poderes f¨¢cticos. El Congreso en particular tiene un nivel de cr¨ªtica y desprestigio por el que la gente no se siente representada, lo cual es una anomal¨ªa.

Pero la ley de consulta previa a los pueblos ind¨ªgenas me parece una de las cosas m¨¢s importantes del Gobierno y espero que la lista de los pueblos se pueda resolver para que se aplique.

P. El presidente dijo que los pueblos ind¨ªgenas eran unos pocos aislados en la selva. Las organizaciones han dicho que se sienten traicionadas puesto que consideran que hay otros pueblos ind¨ªgenas que merecen ser consultados.

R. Me parece un punto pol¨¦mico importante. La discusi¨®n es compleja porque tiene que ver con la definici¨®n de lo ind¨ªgena. Es una discusi¨®n en la que hay que avanzar.

P. Las democracias cumplen en Am¨¦rica Latina 35 a?os y parecen no cuajar. Cada vez hay m¨¢s protestas.

R. Cada vez hay m¨¢s democracia. Norberto Bobbio dec¨ªa que la autocracia es est¨¢tica, siempre es igual a s¨ª misma y la democracia es din¨¢mica. Hoy, la inmensa mayor¨ªa de pa¨ªses tienen gobiernos elegidos. Lo que tenemos ahora son peticiones de democracia con m¨¢s calidad, acceso a servicios, como los reclamos en Brasil y Chile. En Bolivia, la incorporaci¨®n de los ind¨ªgenas a las instancias de Gobierno es una gran gesta democr¨¢tica.

P. En Per¨², pese a la salud de la macroeconom¨ªa, el tejido social y pol¨ªtico es fr¨¢gil y tiene un sistema pol¨ªtico poco calificado, no institucionalizado.

R. Le voy a decir una cosa bien dura. El Per¨² es el pa¨ªs m¨¢s conservador de Am¨¦rica Latina. Hay un sentido com¨²n producto de la historia, de los medios de comunicaci¨®n, de la clase pol¨ªtica que tiene como referencia la cultura pol¨ªtica del siglo XIX y no la del siglo XXI. Se discuten cosas que en otros pa¨ªses no se discuten. En el Per¨², hablar de empresas estatales les parece una cosa diab¨®lica. La forma como se ataca pol¨ªticamente, la forma como se organizan los partidos, hacen que sea el m¨¢s conservador pol¨ªticamente. Fuimos el ¨²ltimo pa¨ªs en acceder a la independencia. Muchos otros pa¨ªses est¨¢n ahora en la modernidad y nosotros seguimos atados a una mentalidad anacr¨®nica

P. ?En qu¨¦ otros rubros?

R. Reconocimiento de derechos de minor¨ªas, derechos sexuales. Somos un pa¨ªs muy atrasado.

P. Y comparados con Ecuador y Bolivia, lo ind¨ªgena no existe.

R. S¨ª: ellos son pa¨ªses mucho m¨¢s modernos que Per¨².