Al Qaeda pone pie en T¨²nez con el asesinato de ocho soldados
A la crisis pol¨ªtica que padece el pa¨ªs se a?ade ahora el golpe yihadista Todo el norte de ?frica, desde Argelia a Egipto, sufre una oleada de violencia
Al Qaeda ha puesto pie en T¨²nez. Los yihadistas que a principios de a?os se reagruparon en los montes de Chaambi, en el oeste del pa¨ªs, han asestado su primer gran zarpazo al peque?o Ej¨¦rcito tunecino asesinando a ocho soldados de una unidad de elite e hiriendo a otros tres.
A la grave crisis pol¨ªtica, provocada por el asesinato del diputado de izquierdas Mohamed Brahmi, que padece el primer pa¨ªs que apost¨® por la llamada primavera ¨¢rabe, se a?ade ahora el mayor golpe terrorista desde que inici¨® su andadura democr¨¢tica en enero de 2011. Se acrecienta as¨ª la tensi¨®n que amenaza con hacer descarrilar la transici¨®n.
Los ocho soldados cayeron, el lunes por la tarde, en una emboscada y fueron degollados, seg¨²n la agencia de prensa oficial TAP, mientras que la televisi¨®n p¨²blica Wattaniya 1 sostiene que fueron abatidos durante un choque armado. El diario digital tunecino Kapitalis asegura, por su parte, que tras ser acribillados los yihadistas les cortaron el cuello. Les robaron adem¨¢s sus armas, uniformes y m¨®viles.
Los cuerpos fueron trasladados al hospital de Kasserine, la capital de provincias m¨¢s cercana, para ser sometidos a una autopsia. Apenas conocida la noticia cientos de personas se concentraron espont¨¢neamente de madrugada ante la sede de En Nahda, el partido islamista, para corear esl¨®ganes hostiles a esta formaci¨®n que dirige el Gobierno de transici¨®n. Acabaron saqueando su local.
En Nahda, un partido af¨ªn a los Hermanos Musulmanes de Egipto, conden¨® el ataque e hizo un llamamiento a ¡°consolidar la unidad nacional y a otorgar la prioridad a la lucha contra el terrorismo y la violencia¡±. El presidente tunecino, Moncef Marzouki, intervino el lunes por la noche en televisi¨®n para hacer tambi¨¦n un llamamiento a la unidad y decretar tres d¨ªas de luto nacional. Despu¨¦s viaj¨® a Kasserine para dar ¨¢nimo al Ej¨¦rcito de Tierra.
El brutal asesinato de los militares ha dado pie a varias fuerzas pol¨ªticas y sociales para reivindicar de nuevo la dimisi¨®n del actual Ejecutivo. El poderoso sindicato Uni¨®n General de Trabajadores Tunecinos pidi¨® este martes que se designe un primer ministro consensuado entre todos mientras que el partido Ettakatol (socialdem¨®crata), socio de los islamistas, apost¨® por un Gobierno de unidad nacional.
Riesgo de "somalizaci¨®n"
Falta hace al Ej¨¦rcito tunecino que le levanten la moral. Con tan solo 27.000 hombres es un Ej¨¦rcito peque?o y relativamente mal equipado que dif¨ªcilmente podr¨¢ resistir los embates de unos terroristas que poseen armas robadas en Libia y a las fuerzas armadas de Mal¨ª y una experiencia de combate adquirida en este ¨²ltimo pa¨ªs. Muchos de los yihadistas atrincherados en la sierra de Chaambi lucharon en Mal¨ª contra malienses, chadianos y franceses.
Justo antes de jubilarse, hace un mes, el general Rachid Ammar, jefe de Estado Mayor de la Defensa, concedi¨® una larga entrevista en la televisi¨®n en la que advirti¨® del riesgo de ¡°somalizaci¨®n¡± del pa¨ªs. ¡°Temo [la existencia de] campamentos de entrenamiento yihadistas en T¨²nez¡±, declar¨®. ¡°Hay f¨¢bricas de minas en nuestro pa¨ªs desde hace m¨¢s de un a?o y no lo sab¨ªamos¡±. ¡°No tenemos medios para mantener a T¨²nez de pie¡±.
A las deficiencias del Ej¨¦rcito tunecino se a?aden las de las fuerzas de seguridad que no siguieron la pista de Boubakeur el Hakim, franc¨¦s de origen tunecino, que fue condenado en Francia en 2008 por colaboraci¨®n con un grupo yihadista. Tras ser excarcelado viaj¨® a T¨²nez y la polic¨ªa francesa se?al¨® este desplazamiento a sus colegas tunecinos. El ministro del Interior de T¨²nez, Lotfi Ben Jeddou, se?ala a El Hakim como el principal sospechoso del asesinato, la semana pasada, de Mohamed Brahmi, y, cinco meses antes, de otro diputado de izquierdas, Chokri Belaid.
Con la emboscada en Chaambi se abre un nuevo frente terrorista en el norte de ?frica provocado, en parte, por el ¨¦xito militar de Francia en Mal¨ª que con su ofensiva expuls¨® a los terroristas oblig¨¢ndoles a replegarse hacia el norte. Es, sin embargo, en el sur de Libia donde ha surgido el mayor problema.
Fue de all¨ª donde el jefecillo terrorista Mojtar Belmojtar plane¨® y adiestr¨® a sus hombres para dar el asalto a la planta gas¨ªstica argelina de In Amenas. Su toma por los yihadistas, entre los que los tunecinos constitu¨ªan la mayor¨ªa relativa, supuso una reducci¨®n del 6% del suministro de gas argelino a Espa?a. Un exhaustivo informe sobre la amenaza terrorista en el Sahel, publicado este mes por el Senado de Francia, describe al sur de Libia como un aut¨¦ntico ¡°agujero negro¡±.
El informe resalta la importancia de Argelia como baluarte contra el avance terrorista. Pero el pa¨ªs m¨¢s poblado y con m¨¢s peso econ¨®mico del Magreb sigue, 21 a?os despu¨¦s del golpe de Estado militar, padeciendo a¨²n algunos zarpazos de la rama magreb¨ª de Al Qaeda. Dos gendarmes resultaron muertos y otros dos gravemente heridos al estallar, el lunes, una bomba artesanal cerca de Biskra.
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