La justicia brasile?a condena a c¨¢rcel por primera vez a un senador
Los legisladores brasile?os pierden su aura de intocables con la condena al miembro del partido conservador Ivo Cassol
El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil ha condenado ?al senador Ivo Cassol, del conservador Partido Progresista (PP), a cuatro a?os y ocho meses de c¨¢rcel por corrupci¨®n. Es la primera vez en la historia de este pa¨ªs que la Alta Corte condena a ir a prisi¨®n a un miembro de la instituci¨®n que representa a los 27 Estados de la Rep¨²blica.
El senador de todos modos cumplir¨¢ la pena en r¨¦gimen abierto. Cassol, acusado?de fraude de licitaciones cometido entre 1998 y 2002,?deber¨¢ pagar tambi¨¦n una multa de 201.000 reales (88.000 d¨®lares). El Supremo ha dejado en manos del Senado la decisi¨®n de permitir o no la continuidad del pol¨ªtico en su cargo.
Algo parecido est¨¢ ocurriendo con dos diputados del Partido de los Trabajadores (PT), Eduardo Cunha, expresidente del Congreso y Jos¨¦ Genoino, expresidente del PT, ya condenados a varios a?os de c¨¢rcel por el Supremo en el caso del mensal?o, un asunto de corrupci¨®n que sacudi¨® a Brasil,?y que contin¨²an ejerciendo sus funciones en el Parlamento hasta que se dilucide si pierden o no autom¨¢ticamente el mandato que recibieron a trav¨¦s del voto popular.
La condena del senador Cassol ha tenido lugar 40 d¨ªas despu¨¦s que el Supremo mandara detener, tambi¨¦n por primera vez en la historia, a un diputado: Natan Donadom, del conservador PMDB.
El senador condenado ya ha hecho saber que ¡°no renunciar¨¢ a su cargo¡±, ya que recibi¨® el mandato de sus electores de Rondonia. El suplente en la C¨¢mara Alta es su propio padre, Redit¨¢rio, conocido por haber defendido que los presos que se nieguen a trabajar deber¨ªan poder recibir castigos corporales, como latigazos.
La condena al senador Cassols llega tras 14 a?os de proceso. ?l afirma que recurrir¨¢ la sentencia a pesar de que las condenas del Supremo no comprenden ning¨²n tipo de apelaci¨®n, son definitivas y el Supremo lo conden¨® por diez votos a favor y cero en contra.?Hoy los comentarios de prensa destacan que las protestas callejeras est¨¢n teniendo sus primeros efectos. Hasta la fecha, nunca un miembro del Congreso hab¨ªa sido condenado a la c¨¢rcel.
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