Siria acepta la inspecci¨®n de Naciones Unidas ante la presi¨®n internacional
Los inspectores de Naciones Unidas visitan el suburbio de Ghutta donde supuestamente se produjo el ataque
Los especialistas de Naciones Unidas inspeccionan hoy el suburbio de Ghuta, al este de Damasco, donde seg¨²n los opositores m¨¢s de 1.400 civiles murieron el mi¨¦rcoles en un ataque con armas qu¨ªmicas ejecutado por las tropas de Bachar el Asad. La presi¨®n internacional, creciente por el ataque qu¨ªmico y la confirmaci¨®n por M¨¦dicos Sin Fronteras de cientos de muertos gaseados, ha llevado al Ejecutivo de Siria a ceder. Ahora la inc¨®gnita es c¨®mo encontrar¨¢n el terreno los m¨¦dicos y qu¨ªmicos de Naciones Unidos, despu¨¦s de que hayan pasado cinco d¨ªas desde el supuesto ataque y de que el Ej¨¦rcito haya seguido bombardeando la zona. El tiempo y los impactos han podido borrar gran parte de los restos de gases t¨®xicos.
¡°Vamos a demostrar que esas acusaciones de los terroristas son falsas¡±, dijo este domingo el ministro de Exteriores sirio, Walid al Muallem, reiterando la versi¨®n oficial de que fueron los opositores quienes lanzaron el ataque con armas qu¨ªmicas. Horas antes, Reuters hab¨ªa desvelado que Al Muallem mantuvo una conversaci¨®n el jueves con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en la que este le exigi¨® ¡°un acceso inmediato y sin restricciones¡± al distrito de Damasco afectado. Los disidentes marcaron cuatro puntos: Zamalka, Ain Tarma, Muadhamiya y Jobar.
El r¨¦gimen difundi¨® un comunicado a trav¨¦s de la televisi¨®n oficial en el que aseguraba que la aplicaci¨®n del acuerdo es ¡°inmediata¡±. Las partes ¡°van a ponerse de acuerdo sobre la fecha y la hora de la visita del equipo¡± a los lugares pactados. La primera visita puede producirse hoy mismo.
La seguridad de la delegaci¨®n est¨¢ garantizada, seg¨²n sostiene Damasco, porque se va a declarar un alto el fuego en las zonas seleccionadas. El opositor Ej¨¦rcito Libre de Siria (ELS), que tiene un amplio apoyo en el ¨¢rea afectada, dijo que proteger¨ªa al personal de la ONU si fuese necesario.
La inseguridad en la zona fue uno de los argumentos esgrimidos la semana pasada por el Consejo de Seguridad de la ONU para no ampliar la misi¨®n de sus expertos, que llegaron hace una semana a Damasco para visitar tres lugares donde, supuestamente, se usaron agentes qu¨ªmicos durante la pasada primavera. Rusia y China vetaron entonces una resoluci¨®n para exigir a Siria el acceso a los barrios afectados.
¡°Ghuta no est¨¢ en la lista de espacios acordados¡±, insist¨ªan hasta ayer altos funcionarios de Damasco. Pero el Gobierno de El Asad ha tenido tres motivos esenciales para dar marcha atr¨¢s. Primero, la presencia en la capital de la jefa del departamento de desarme de la ONU, Angela Kane. Segundo, los datos revelados por la ONG M¨¦dicos Sin Fronteras, que el s¨¢bado inform¨® de que tres hospitales de la provincia de Damasco con los que colabora atendieron el mi¨¦rcoles a 3.600 pacientes ¡°con s¨ªntomas neurot¨®xicos¡±, de los que 355 murieron. La organizaci¨®n no tiene personal propio en esta zona ¡ªaunque est¨¢ presente en seis hospitales en el norte de Siria¡ª, pero insiste en la ¡°confianza¡± que le ofrecen sus fuentes en el pa¨ªs.
¡°Demostraremos que las acusaciones son falsas¡±, dice el ministro sirio de Exteriores
El tercer y principal motivo es la amenaza de una ¡°respuesta seria¡± lanzada por EE UU, Reino Unido y otros pa¨ªses occidentales. El presidente Barack Obama y el primer ministro brit¨¢nico, David Cameron, conversaron en la noche del s¨¢bado al domingo y convinieron en que se hab¨ªa acabado el tiempo de El Asad para despejar dudas sobre el ataque qu¨ªmico.
El ministro de Informaci¨®n sirio, Omram Zoabi, reaccion¨® advirtiendo de que cualquier acci¨®n militar occidental ¡°no ser¨¢ un picnic¡±, sino una guerra ¡°muy grave, una bola de fuego que inflamar¨¢ Oriente Medio¡±.
Damasco se vio arropado por dos de sus socios esenciales. Ir¨¢n record¨® a Estados Unidos que hay una ¡°l¨ªnea roja en el frente sirio¡± y que cruzarla tendr¨¢ ¡°graves consecuencias para la Casa Blanca¡±, dijo el n¨²mero dos del Estado Mayor sirio, Masud Jazayeri. El Ministerio de Exteriores ruso, por su parte, emiti¨® un comunicado en el que calificaba de ¡°tr¨¢gico error¡± la acusaci¨®n contra el r¨¦gimen de El Asad por el bombardeo qu¨ªmico y tildaba de ¡°inaceptable¡± la postura de Londres y Washington, que enmarca dentro de una ola de ¡°propaganda antisiria¡±.
Tambi¨¦n entr¨® en liza Israel. Su primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, defendi¨® que los reg¨ªmenes ¡°m¨¢s peligrosos del mundo no pueden tener las armas m¨¢s peligrosas¡± y avis¨® de que ¡°por si acaso, Israel tendr¨¢ el dedo en el gatillo¡± para actuar contra quien le ¡°ataque¡±.
Mandos militares de 10 pa¨ªses tienen previsto analizar hoy a puerta cerrada en Jordania las posibles estrategias que se pueden adoptar contra Damasco si se demuestra su implicaci¨®n en el ataque con armas qu¨ªmicas. Un debate que depende ahora, en parte, de las pruebas que logren aportar los inspectores de la ONU, que pueden precipitar o refrenar los planes de intervenci¨®n ¡ªmediante ataques a¨¦reos selectivos o la implantaci¨®n de zonas de seguridad¡ª barajados en los ¨²ltimos d¨ªas.
Otra opci¨®n es el refuerzo de los rebeldes del ELS, que ayer inform¨® de que ha recibido 400 toneladas de armas desde Turqu¨ªa, financiadas por pa¨ªses del golfo P¨¦rsico, seg¨²n informa Reuters.
El Frente Al Nusra, vinculado a Al Qaeda, amenaz¨® tambi¨¦n con lanzar ataques inminentes contra pueblos alau¨ªes de Siria ¡ªla minor¨ªa musulmana a la que pertenece el presidente Bachar El Asad¡ª en venganza por el ataque con armas qu¨ªmicas contra el distrito de Ghuta de Damasco.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.