Hollande presenta sus pruebas contra Siria pero evita un voto en la Asamblea

Definitivamente, Siria se ha convertido en la pesadilla de Fran?ois Hollande. Los servicios secretos franceses hicieron p¨²blico el lunes un informe clasificado que asegura que la matanza qu¨ªmica ocurrida en la periferia de Damasco el 21 de agosto fue perpetrada por el r¨¦gimen de Bachar el Asad. La publicaci¨®n de la nota en las p¨¢ginas digitales del El¨ªseo, Matignon, Defensa y Exteriores fue decidida por el Gobierno socialista para tratar de convencer a la clase pol¨ªtica y a la opini¨®n p¨²blica ¡ªambas fuertemente divididas¡ª de la necesidad de intervenir militarmente contra El Asad. Al mismo tiempo, el primer ministro, Jean-Marc Ayrault, rechaz¨® las peticiones de la oposici¨®n y de algunos socialistas y descart¨® que el Parlamento pueda votar el mi¨¦rcoles, al final de la sesi¨®n extraordinaria informativa convocada por el Ejecutivo.

La inusual filtraci¨®n oficial de la nota de los servicios de Inteligencia exterior y militar coincidi¨® con el avance de una larga entrevista concedida por el presidente sirio al periodista de Le Figaro George Malbrunot. Amenazante y provocador, El Asad afirma que ¡°cualquiera que d¨¦ ayuda financiera y militar a terroristas es un enemigo del pueblo sirio¡±, y amenaza a Par¨ªs con ¡°repercusiones negativas¡± si no cesa en su ¡°pol¨ªtica de hostilidad¡± hacia Damasco.

El dictador asegura que Barack Obama y Hollande ¡°han sido incapaces de presentar una sola prueba¡± del ataque qu¨ªmico, y sobre una posible intervenci¨®n militar advierte: ¡°Oriente Pr¨®ximo es un barril de p¨®lvora. Nadie sabe lo que pasar¨¢ cuando caiga la primera bomba. Todo el mundo perder¨¢ el control cuando el barril de p¨®lvora explote. El caos y el extremismo se expandir¨¢n. El riesgo de una guerra regional existe¡±.

La nota desclasificada utiliza argumentos estrat¨¦gicos y t¨¦cnicos para atribuir la matanza al Ej¨¦rcito sirio. Uno: las im¨¢genes tomadas por sat¨¦lite muestran que las zonas atacadas el 21 de agosto estaban bajo control de los rebeldes, alejadas de las posiciones de las fuerzas leales a El Asad. Dos: en el ataque, ¡°masivo y bien coordinado¡±, se utilizaron cohetes ¡°de fabricaci¨®n industrial¡±, dos circunstancias que est¨¢n fuera del alcance de los rebeldes. Tres: tras la ofensiva qu¨ªmica, el r¨¦gimen ¡°bombarde¨® intensamente el ¨¢rea afectada con la intenci¨®n de borrar las pistas medioambientales¡±.

La nota subraya adem¨¢s que, a diferencia de otros ataques, en los que el r¨¦gimen utiliz¨® ¡°peque?as cargas qu¨ªmicas con el objetivo de provocar terror¡±, esta vez ¡°el ataque ten¨ªa un objetivo t¨¢ctico, la reconquista de terreno¡±.

El informe contiene una curiosidad: la cifra de v¨ªctimas que manejan los servicios secretos franceses es llamativamente menor que la ofrecida por el secretario de Estado de EE UU, John Kerry, el viernes pasado. Seg¨²n Par¨ªs, el ataque qu¨ªmico ¡°mat¨® al menos a 281 personas¡±, frente a las m¨¢s de 1.400 v¨ªctimas mortales que calcula Washington.

Antes de hacer p¨²blico el documento, el primer ministro, Jean-Marc Ayrault, lo present¨® en persona a los l¨ªderes de los grupos parlamentarios, los presidentes de la Asamblea Nacional y el Senado, y los presidentes de las comisiones de Defensa y Exteriores. Se trataba de un intento de responder a las cr¨ªticas de opacidad y de recuperar la unidad nacional, da?ada por la precipitaci¨®n de Hollande al anunciar la intervenci¨®n y agravada por el rev¨¦s del Parlamento brit¨¢nico a David Cameron y por la inesperada marcha atr¨¢s de Barack Obama.

El desfile de l¨ªderes por Matignon evidenci¨® que la sensaci¨®n de aislamiento de Francia y la divisi¨®n de la clase pol¨ªtica, tambi¨¦n en las filas del Partido Socialista, son crecientes.

El centrista Jean-Louis Borloo subray¨® que ¡°la operaci¨®n debe hacerse bajo el amparo de la ONU, o en todo caso no antes de que las pruebas del ataque qu¨ªmico hayan sido corroboradas por las Naciones Unidas¡±. Y el exministro de Exteriores Alain Jupp¨¦ record¨® que actuar sin el mandato de la ONU es una novedad hist¨®rica que deber¨ªa ser refrendada por el Parlamento.

Tras constatar la fractura, Ayrault zanj¨® el debate sobre la hipot¨¦tica votaci¨®n parlamentaria con una seca negativa, dejando a la oposici¨®n, e incluso a los Verdes, sus socios de Gobierno, sin la posibilidad de arropar o rechazar al presidente.

Poco antes, el primer ministro hab¨ªa presumido de ¡°transparencia¡±, afirmado que ¡°la presencia de armas de destrucci¨®n masiva en Siria pone en peligro la seguridad de Francia y del mundo¡±, y pedido a los ciudadanos que se mantengan ¡°unidos en torno al presidente¡±, que, concluy¨®, ¡°seguir¨¢ ejerciendo su labor de persuasi¨®n para tratar de formar una coalici¨®n¡±.

Pese a todo, Hollande tendr¨¢ que asumir la cruda realidad: hasta que Estados Unidos no se pronuncie, Francia estar¨¢ sola e impedida para llevar a cabo sus arriesgadas intenciones. Ayrault admiti¨® que ¡°en ning¨²n caso¡± Francia atacar¨¢ en solitario a Damasco. Por el momento, eso es en lo ¨²nico que los franceses parecen de acuerdo.