La polic¨ªa griega detiene al l¨ªder y al portavoz del partido ultra Aurora Dorada
La polic¨ªa arresta a otros 15 miembros de la formaci¨®n neonazi griega La operaci¨®n est¨¢ relacionada con el asesinato de un rapero por un simpatizante del partido
En un intento a la desesperada de atajar la fractura social y el deterioro del escenario pol¨ªtico en el pa¨ªs, la polic¨ªa griega ha arrestado al l¨ªder m¨¢ximo y otros dirigentes del partido ultraderechista de inspiraci¨®n neonazi Aurora Dorada por constituir una organizaci¨®n criminal, en lo que constituye una escalada sustancial de la ofensiva contra la formaci¨®n tras el apu?alamiento mortal del rapero y militante antifascista Pavlos Fissas el pasado 18 de septiembre en Atenas.
Es la primera vez desde 1974, fecha del restablecimiento de la democracia en Grecia tras siete a?os de dictadura militar, que se descabeza a un partido legal y con representaci¨®n parlamentaria (18 diputados). La medida, tambi¨¦n sin precedentes en la Uni¨®n Europea salvo la ilegalizaci¨®n de Batasuna, se produce pocos d¨ªas despu¨¦s de la publicaci¨®n de un estudio sobre la grave merma de la calidad democr¨¢tica en los pa¨ªses de la UE, en especial Grecia y Hungr¨ªa. Al clamor institucional europeo se suman la firmeza del presidente, Karolos Papulias ¨Cen los a?os cuarenta militante de la resistencia contra la ocupaci¨®n nazi de Grecia-, y de los principales actores sociales y pol¨ªticos del pa¨ªs en demanda de acciones concluyentes. El asesinato de Pavlos Fissas ha supuesto un salto cualitativo en la demostraci¨®n de fuerza de la organizaci¨®n, que se ha multiplicado exponencialmente desde los comicios: Fissas es la primera v¨ªctima mortal griega, pero no la ¨²nica.
La polic¨ªa anunci¨® a ¨²ltima hora de la noche del s¨¢bado la detenci¨®n del exmilitar Nikos Mijaloliakos y l¨ªder m¨¢ximo del partido; el portavoz del grupo parlamentario, Ilias Kasidiaris; as¨ª como los diputados Ilias Panayiotaros ¨Cque en su d¨ªa se hizo c¨¦lebre por golpear a una diputada de izquierdas durante un debate televisivo- y Yanis Lagos, entre una quincena. La fiscal¨ªa emiti¨® adem¨¢s una treintena de ¨®rdenes de arresto. La fiscal¨ªa acusa a los detenidos de 10 asesinatos en fase de tentativa o comisi¨®n; agresiones, ataques con explosivos y delitos financieros. Los diputados conservar¨¢n su esca?o mientras se determine su inocencia o culpabilidad.
Con la redada masiva de este fin de semana, la ofensiva judicial y de seguridad contra AD ha adquirido una nueva condici¨®n, la pol¨ªtica. El l¨ªder de AD hab¨ªa venido amenazando con retirar en bloque a su grupo parlamentario (18 diputados de un total de 300), lo que provocar¨ªa en ¨²ltima instancia la convocatoria anticipada de elecciones. En un mensaje para consumo externo, dirigido en especial a la troika ¨Ccon la que Atenas negocia otro paquete de medidas-, el primer ministro, Andonis Samar¨¢s, manifest¨® ayer que el pa¨ªs superar¨¢ esta turbulencia ¡°con justicia y estabilidad, no con elecciones¡±. En el mismo sentido se manifest¨® el ministro de Econom¨ªa, Yanis Sturnaras, principal interlocutor de los hombres de negro.
La reacci¨®n de Bruselas no se hizo esperar. Fuentes de la Comisi¨®n expresaron su total confianza ¡°en la justicia griega, que tomar¨¢ todas las medidas necesarias, con total respeto a los procedimientos legales¡±. ¡°El sistema pol¨ªtico griego ha enfrentado un desaf¨ªo y est¨¢ tomando las medidas necesarias para salvaguardar el imperio democr¨¢tico de la ley¡±, declar¨® en Bruselas la comisaria Maria Damanaki al diario Kathimerini. El presidente de la Comisi¨®n Europea, Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso, hab¨ªa reclamado m¨¢xima vigilancia ante la deriva de algunos valores democr¨¢ticos, si bien en su d¨ªa se manifestara contrario a etiquetar como neonazi al partido de Mijaloliakos. ¡°Debemos definir lo que es un partido neonazi, y eso s¨®lo puede hacerlo el pa¨ªs en cuesti¨®n¡±, dijo en mayo de 2012, tras las elecciones.
El escenario que se abre en Grecia tras el descabezamiento de AD no est¨¢ nada claro. ¡°Lo m¨¢s dif¨ªcil viene ahora: el c¨¢lculo electoralista ante unas hipot¨¦ticas elecciones con el Pasok moribundo y una Nueva Democracia obligada a pactar con quien sea para gobernar¡±, explica en conversaci¨®n telef¨®nica Manos X., profesor universitario retirado. Las encuestas de intenci¨®n de voto dan a AD en torno al 13% de los apoyos ¨Ccasi el doble que en 2012-, justo por detr¨¢s de Syriza y ND, empatados. ¡°Samar¨¢s torpede¨® durante meses un proyecto de ley contra la violencia racista, y eso motiv¨® la crisis del tripartito [en junio pasado]. El bipartito actual [ND y el socialista Pasok] no tiene visos de repetirse. Por eso Samar¨¢s guardaba en la rec¨¢mara la posibilidad de un apoyo parlamentario de AD a su acci¨®n de gobierno¡±, explica el docente. Algo as¨ª como en Holanda, donde la formaci¨®n xen¨®foba de Gert Wilders sostuvo el Gobierno liberal; o como el escenario actual de Noruega.
Pero, con la c¨²pula de AD fuera de juego, est¨¢ por ver si en Grecia se reproducir¨¢ el escenario austriaco ¨Cla formaci¨®n ultra de Georg Haider se desinfl¨® naturalmente- o una soluci¨®n m¨¢s virulenta como la egipcia, con los Hermanos Musulmanes proscritos y convertidos en m¨¢rtires (un movimiento, por cierto, con el que AD comparte ciertas similitudes, como la red asistencial). El amplio sost¨¦n popular de AD no parece proclive a diluirse en la nada, y menos a¨²n en otras siglas.
El deterioro de Atenas desborda a Bruselas
Grecia funciona, desde principios de la crisis, como un indicador adelantado de la suerte que corre todo el continente. Su deterioro econ¨®mico precedi¨® el del resto de la Eurozona y tambi¨¦n las primeras turbulencias pol¨ªticas se localizaron en Atenas. Pese a los dos programas de rescate ya aplicados ¡ªy un tercero en perspectiva¡ª y el estrecho control a que est¨¢ sometido el pa¨ªs, la situaci¨®n no deja de empeorar, una evidencia que Bruselas se resiste a admitir porque desmonta la estrategia emprendida para salvar a Grecia de la quema.
Mientras la troika (el tr¨ªo formado por la Comisi¨®n Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional para controlar a los pa¨ªses rescatados) observa con lupa las maltrechas cuentas del pa¨ªs, se le escapa lo principal: una radicalizaci¨®n pol¨ªtica que pone en peligro la democracia y que se ha propagado con rapidez a otros Estados, aunque en ning¨²n caso con la intensidad griega.
As¨ª lo reflejaba esta semana el primer estudio riguroso sobre la calidad democr¨¢tica en la Uni¨®n Europea, elaborado por la casa de an¨¢lisis brit¨¢nica Demos. El informe constata un retroceso de los indicadores de Estado de derecho, respeto a las minor¨ªas y corrupci¨®n en todo el continente, incluida la pr¨®spera Alemania. El estudio sit¨²a a Grecia, junto con Hungr¨ªa, a la cabeza de esa involuci¨®n. Ese an¨¢lisis se suma a otras alertas que han lanzado la Comisi¨®n Europea y, sobre todo, la Euroc¨¢mara.
La constataci¨®n de que el fascismo y la delincuencia han arraigado en el propio Parlamento griego ¡ªadem¨¢s de los indicios de connivencia con la polic¨ªa¡ª llega en otro p¨¦simo momento para la evaluaci¨®n exterior de Grecia. La troika examina estos d¨ªas en Atenas el cumplimiento de los deberes impuestos para ver si sigue liberando los pr¨¦stamos previstos. Aunque lo m¨¢s importante no es ya el desarrollo de ese segundo rescate, sino el que est¨¢ por venir. Las autoridades helenas aguardan que, una vez se despeje el futuro pol¨ªtico en Alemania, la UE abandone los tab¨²es y hable con claridad del tercer rescate que necesita el pa¨ªs. Tanto el ministro alem¨¢n de Finanzas, Wolfgang Sch?uble, como el presidente del Eurogrupo (los ministros del ramo de la zona euro), Jeroen Dijsselbloem, han invocado ya esa posibilidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.