Espionaje sin fronteras

Las nuevas revelaciones acerca de las actividades del espionaje estadounidense basadas en los documentos filtrados por Edward Snowden dibujan un mapa de operaciones que abarca buena parte del planeta. La intensidad y grado de penetraci¨®n del espionaje depende, seg¨²n se desprende de ese material, de una clasificaci¨®n de los pa¨ªses en distintas categor¨ªas de inter¨¦s. Solo un c¨ªrculo muy estrecho de aliados de Washington ¡ªReino Unido, Canad¨¢, Australia y Nueva Zelanda¡ª recibe un tratamiento preferencial; pero no hace falta ser enemigo de Estados Unidos para que sus servicios decidan espiar a un mandatario. Los casos de Brasil o M¨¦xico abrieron la caja de Pandora, antes de que ayer el peri¨®dico brit¨¢nico The Guardian publicara ayer un documento secreto de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA, en sus siglas en ingl¨¦s) en la que se hace referencia al espionaje de las comunicaciones de unos 200 n¨²meros de tel¨¦fonos de 35 l¨ªderes mundiales.?

Los documentos filtrados por Snowden apuntan que la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, fue objeto de vigilancia de la NSA. Rousseff cancel¨® recientemente una visita oficial a Estados Unidos y una reuni¨®n con Barack Obama como gesto de protesta por las actividades de los servicios de Washington y la vaguedad de las explicaciones recibidas. La mandataria tambi¨¦n pronunci¨® un duro discurso desde la tribuna de la ONU durante la ¨²ltima Asamblea General, en la que ha sido hasta ahora la reacci¨®n m¨¢s vibrante a las revelaciones.

En el caso de M¨¦xico, los documentos de Snowden se?alan que las comunicaciones de Felipe Calder¨®n, antecesor de Enrique Pe?a Nieto en la presidencia, fueron sometidas a vigilancia. La reacci¨®n del Gobierno mexicano ha sido sin embargo menos contundente que la brasile?a.

Pero los papeles de la NSA se?alan que tambi¨¦n pa¨ªses militarmente aliados ¡ªmiembros de la OTAN¡ª han sido sometidos a intensa actividad de espionaje, con el registro de datos de comunicaciones de l¨ªderes pol¨ªticos y de cantidades casi inimaginables de llamadas telef¨®nicas de ciudadanos de a pie.

Seg¨²n ha relatado el diario Le Monde, tan solo entre el 10 de diciembre de 2012 y el 8 de enero de 2013 los servicios estadounidenses registraron los datos de unos 70 millones de conversaciones telef¨®nicas en Francia. Adem¨¢s, la NSA rastre¨® las comunicaciones de las legaciones diplom¨¢ticas francesas en Washington y Nueva York, ante la ONU.

El semanario Der Spiegel ha revelado este mi¨¦rcoles la vigilancia al tel¨¦fono m¨®vil de la canciller Merkel.

La revista tambi¨¦n hab¨ªa denunciado anteriormente pr¨¢cticas de espionaje masivo a ciudadanos de a pie. La revelaci¨®n enturbi¨® la campa?a electoral alemana. La canciller Angela Merkel aleg¨® no haber conocido esas actividades hasta su publicaci¨®n por parte del semanario. El 23 de octubre, Merkel llam¨® personalmente a Barack Obama para pedirle explicaciones por un posible espionaje de sus tel¨¦fonos m¨®viles. Ayer, el ministro alem¨¢n de Exteriores convoc¨® al embajador de EE UU en Berl¨ªn.

Der Spiegel tambi¨¦n revel¨® que Washington espi¨® a las comunicaciones y los sistemas inform¨¢ticos de las representaciones de la Uni¨®n Europea en Washington y en la sede de la ONU en Nueva York, e incluso en edificios en Bruselas. La Comisi¨®n reaccion¨® con contundencia, y hubo veladas amenazas de entorpecer la negociaci¨®n de un acuerdo de libre comercio y de revisar los mecanismos de intercambio de datos concebida en el marco de la lucha al terror. Sin embargo, hasta ahora, no ha habido represalias concretas.

M¨¢s recientemente se supo que los servicios brit¨¢nicos, activos colaboradores de los estadounidenses, trabajaron en B¨¦lgica en la llamada operaci¨®n socialista, que infiltr¨® las redes de la compa?¨ªa telef¨®nica Belgacom. El primer ministro belga es el socialista Elio di Rupo. Como sede de las principales instituciones europeas, B¨¦lgica y sus redes telef¨®nicas tienen inter¨¦s tambi¨¦n en ¨®ptica comunitaria.