Amnist¨ªa denuncia cr¨ªmenes de guerra en los ataques de EE UU con drones
Un informe denuncia violaciones de la legislaci¨®n internacional por el uso de aviones no tripulados para cometer ejecuciones
¡°Antes no me asustaban los drones, pero ahora cuando oigo uno me pregunto si ser¨¦ la pr¨®xima¡±, asegura Nabeela, una ni?a paquistan¨ª de ocho a?os. El antes y el despu¨¦s de la peque?a lo marc¨® la muerte de su abuela hace ahora un a?o en Wazirist¨¢n del Norte, una regi¨®n de Pakist¨¢n fronteriza con Afganist¨¢n. Manama Bibi, de 68 a?os, estaba recogiendo verdura para la cena en su huerto cuando el proyectil la pulveriz¨® delante varios de sus nietos. El caso es uno de los que Amnist¨ªa Internacional (AI) analiza en un informe en el que cuestiona el uso de esos aparatos y las afirmaciones de Washington de que apenas causan v¨ªctimas civiles.
¡°Nos preocupa mucho que estos y otros ataques hayan resultado en muertes il¨ªcitas que constituyan ejecuciones extrajudiciales o cr¨ªmenes de guerra¡±, afirma el an¨¢lisis titulado ?Ser¨¦ yo el pr¨®ximo? Ataques a¨¦reos estadounidenses en Pakist¨¢n. Para su realizaci¨®n, AI ha investigado nueve de los 45 bombardeos llevados a cabo en Wazirist¨¢n del Norte entre enero de 2012 y el pasado agosto, con decenas de entrevistas a supervivientes y familiares de v¨ªctimas.
Amnist¨ªa constata que desde la intervenci¨®n estadounidense en Afganist¨¢n en 2001 esa regi¨®n tribal se ha convertido en un refugio para los militantes talibanes y de Al Qaeda y tambi¨¦n en base para sus ataques a ambos lados de la porosa frontera. De ah¨ª que est¨¦ siendo la m¨¢s castigada por los drones. No obstante, denuncia la falta de transparencia de EEUU, que no ha dado adecuada justificaci¨®n legal para los ataques y se niega incluso a informar de las circunstancias una vez que los lleva a cabo.
El informe explica que no est¨¢ claro si EEUU act¨²a en el marco de un conflicto armado, en cuyo caso se aplicar¨ªa la ley humanitaria internacional (tambi¨¦n conocida como ley de guerra). De lo contrario, tendr¨ªa que atenerse a la ley internacional de derechos humanos. De todas formas, recuerda que ¡°matar a un civil que no est¨¢ directamente implicado en acciones hostiles es una privaci¨®n arbitraria de la vida¡±.
¡°El secretismo que rodea al programa de drones da a la Administraci¨®n de EEUU licencia para matar fuera del alcance de los tribunales o de los principios b¨¢sicos de la legislaci¨®n internacional. Ha llegado la hora de que EEUU se explique al respecto y exija responsabilidades a los responsables de esas violaciones¡±, asegura Mustafa Qadri, investigador de AI para Pakist¨¢n.
La organizaci¨®n admite que bajo la ley humanitaria internacional no todas las muertes civiles que se producen son il¨ªcitas. Sin embargo, los casos que ha revisado ponen en entredicho la afirmaci¨®n de EEUU de que sus operaciones de drones se basan en informaci¨®n fiable, son muy precisas y solo matan a miembros de grupos armados. Aunque AI no avala las cifras de entre 400 y 900 civiles muertos y al menos 600 heridos que manejan las ONG, su trabajo revela que no se toman suficientes precauciones para proteger a los civiles, ni se compensa a las v¨ªctimas cuando se producen errores.
Los investigadores de AI han buscado una explicaci¨®n para el misil que mat¨® a Mamana Bibi e hiri¨® a varios de sus nietos. Una fuente de los servicios secretos paquistan¨ªes les mencion¨® que un talib¨¢n hab¨ªa usado un tel¨¦fono sat¨¦lite en una carretera cercana a donde se encontraba la mujer. Sin embargo, tras revisar im¨¢genes de sat¨¦lite, encontraron esa posibilidad inconsistente con el terreno.
¡°Si la confundieron con un talib¨¢n en actitud hostil en el momento del ataque, entonces no parece que se tomaran las necesarias precauciones¡±, advierte el informe que habla de ¡°fallo catastr¨®fico¡±. ¡°Fue err¨®neamente identificada como objetivo, el objetivo se seleccion¨® con informaci¨®n equivocada y no se cancel¨® el ataque una vez que se hizo evidente que el objetivo era un civil; o los operadores del drone dispararon y mataron intencionadamente a Mamana Bibi¡±, plantea la organizaci¨®n antes de se?alar que su familia no ha recibido disculpas o compensaci¨®n por parte de EEUU, que ni siquiera ha reconocido el incidente.
En otro caso, AI admite que el blanco puede haber sido un grupo de talibanes afganos en Zowi Sidgi, una aldea situada en una ruta de tr¨¢nsito de esos milicianos hacia sus refugios en Pakist¨¢n. No obstante, se?ala que los objetivos no se encontraban en ese momento en actitud hostil y no se hizo distinci¨®n entre civiles y combatientes. ¡°Incluso si hab¨ªa miembros de un grupo armado en el lugar, eso no lo convierte en un ataque legal¡±, asegura el informe.
Las poblaciones locales tienen escaso control sobre la presencia de milicianos en sus aldeas. Muchos de los entrevistados han dicho a AI que no puede denunciar sus abusos a las autoridades por temor a las represalias. Grupos vinculados a Al Qaeda han matado a muchos hombres a los que acusan de facilitar informaci¨®n para los ataques de los drones. Por la misma raz¨®n mostraron miedo a hablar de los bombardeos con la organizaci¨®n, y algunos de los que lo hicieron recibieron amenazas despu¨¦s.
Amnist¨ªa denuncia adem¨¢s frecuentes ¡°ataques a quien presta ayuda¡±, los casos en los que se dispara un segundo misil cuando los lugare?os se acercan para asistir a las v¨ªctimas, una pr¨¢ctica que califica de ¡°crimen de guerra¡±. Tambi¨¦n objeta a los llamados ¡°golpes de disrupci¨®n de atentados¡±, que se llevan a cabo incluso si no se conoce la identidad de los individuos a los que se va a atacar, pero cuya actividad resulta sospechosa. ¡°En un conflicto armado, los individuos tienen derecho a la presunci¨®n de que se trata de civiles¡±, recuerda AI tras documentar c¨®mo los ataques est¨¢n afectando a las poblaciones locales, cuyos miembros evitan reunirse por temor a convertirse en objetivo.
Desde que empez¨® a utilizar drones para alcanzar a sospechosos de terrorismo en 2004 y el pasado septiembre, Estados Unidos ha llevado a cabo entre 330 y 374 ataques de ese tipo en Pakist¨¢n, seg¨²n diversos recuentos. Su argumento es que se trata de operaciones basadas en informaci¨®n fiable, que son extremadamente precisas y la mayor¨ªa de cuyas v¨ªctimas son miembros de grupos armados como los talibanes o Al Qaeda. Sin embargo, cada vez m¨¢s voces cuestionan sus resultados y advierten de que la animosidad que est¨¢n creando en las poblaciones afectadas alienta el reclutamiento por parte de los grupos con los que se quiere acabar.
¡°La pol¨ªtica de asesinatos selectivos de EEUU sienta un precedente peligroso que otros pa¨ªses pueden explotar [adem¨¢s de] corroer los fundamentos del marco internacional para la protecci¨®n de los derechos humanos¡±, concluye AI que pide a Washington m¨¢s transparencia sobre los ataques, investigaciones independientes sobre los casos en los que hay sospechas de muertes il¨ªcitas, juicios a los responsables y compensaciones para las v¨ªctimas.
Human Rights Watch ha realizado un informe similar sobre los bombardeos con drones en Yemen.
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