Alemania recuerda el horror de la noche de los cristales rotos 75 a?os despu¨¦s
El presidente Gauck encabeza los actos de aniversario. Una marcha silenciosa recorre Berl¨ªn

La informaci¨®n que public¨® el peri¨®dico New York Times el 11 de noviembre de 1938 est¨¢ fechada en Berl¨ªn un d¨ªa antes y resume en pocas palabras la ola de terror que vivi¨® la comunidad jud¨ªa durante la famosa noche que la historia recuerda como la noche de los cristales rotos: ¡°Una ola de destrucci¨®n, saqueo y barbarie sin precedentes desde la guerra de los 30 a?os en Alemania, y desde la revoluci¨®n bolchevique en Europa, arras¨® sobre el territorio alem¨¢n hoy, cuando las cohortes nacionalsocialistas se cobraron venganza contra los negocios y las oficinas jud¨ªas y las sinagogas, por el asesinato de Ernst von Rath, tercer secretario de la Embajada de Alemania en Par¨ªs a manos de un joven jud¨ªo polaco¡±.
La canciller Angela Merkel no particip¨® este s¨¢bado en ning¨²n acto oficial para recordar el 75? aniversario de la tragedia y dej¨® en manos del presidente del pa¨ªs, Joachim Gauck, y de su ministro del Interior, Hans-Peter Friedrich, la dif¨ªcil tarea de recordar al pa¨ªs que la historia puede repetirse si se olvida lo que sucedi¨® en el pasado.
El nuevo aniversario de lo que Merkel calific¨® hace un lustro como la ¡°noche m¨¢s oscura de la historia alemana¡± fue recordado a lo largo y ancho del pa¨ªs. En Berl¨ªn, el alcalde de la ciudad, Klaus Wowereit, encabez¨® una marcha silenciosa que parti¨® desde la sede del Gobierno capitalino y culmin¨® ante la vieja sinagoga. El presidente Gauck, por su parte, viaj¨® a la ciudad de Eberswalde, en Brandeburgo, para inaugurar, junto con el secretario general del Consejo Central de los jud¨ªos alemanes, Stephan Kramer, un monumento levantado en el lugar donde se alzaba la antigua sinagoga de la ciudad.
Cuando hace 75 a?os las sinagogas dejaron de arder, la dictadura culp¨® a los propios jud¨ªos de la violencia que azot¨® al pa¨ªs. El Reich confisc¨® los pagos que las compa?¨ªas aseguradoras deb¨ªan hacer a los propietarios jud¨ªos, cuyas casas y negocios hab¨ªan sido destruidos, y comenz¨® a promulgar decenas de leyes para forzar la ¡°arianizaci¨®n¡± de todas las empresas de propiedad jud¨ªa.
El pogromo contra la comunidad jud¨ªa del 9 de noviembre, y en esto est¨¢n de acuerdo todos los historiadores, marc¨® un punto de inflexi¨®n en la pol¨ªtica antisemita que naci¨® inmediatamente despu¨¦s de la llegada de Hitler al poder en 1933, y prepar¨® el terreno para lo que ser¨ªa el Holocausto, el asesinato sistem¨¢tico de los jud¨ªos que viv¨ªan en aquella ¨¦poca en los territorios controlados por los nazis.
Hace cinco a?os, la canciller Angela Merkel record¨®, en el marco de una ceremonia solemne, el horror que vivi¨® la poblaci¨®n jud¨ªa en la denominada Kristallnacht, y puso ¨¦nfasis en un nuevo peligro que est¨¢ naciendo en el pa¨ªs: la indiferencia de la poblaci¨®n ante el racismo y el antisemitismo, que han vuelto a echar ra¨ªces en Alemania.
En un acto realizado en la sinagoga de la Rykestrasse, uno de los pocos templos que no fue destruido en Berl¨ªn, Merkel, junto con recordar que el pogromo del 9 de noviembre de 1938, abri¨® la puerta a lo que llam¨® ¡°la cat¨¢strofe de todas las cat¨¢strofes¡± y envi¨® un severo mensaje a sus compatriotas y al continente. ¡°La xenofobia, el racismo y el antisemitismo no deben tener nunca m¨¢s cabida en Europa¡±, dijo.
Merkel volvi¨® a recordar, hace una semana, que en su pa¨ªs a¨²n no se ha logrado erradicar el antisemitismo, que cobr¨® su m¨¢xima expresi¨®n en lo que ella mismo califico como la ¡°noche m¨¢s oscura de la historia alemana. En su habitual v¨ªdeomensaje semanal, emitido el s¨¢bado pasado, la canciller puso ¨¦nfasis en un hecho que averg¨¹enza a la poderosa naci¨®n que es hoy Alemania : ¡°Es inexplicable, pero al mismo tiempo una realidad, que no pueda haber ninguna instituci¨®n jud¨ªa sin protecci¨®n de la polic¨ªa¡±, dijo.
Pero en las conmemoraciones de este s¨¢bado nadie hizo menci¨®n a un aspecto que tiene una profunda connotaci¨®n en la memoria colectiva de la naci¨®n. El 9 de noviembre es una fecha que est¨¢ incrustada en la agitada historia del pa¨ªs del siglo XX. ?Qui¨¦n recuerda por ejemplo que un 9 de noviembre de 1918 Alemania se convirti¨® en una rep¨²blica parlamentaria, cuando Phillip Scheidemann, un pol¨ªtico socialdem¨®crata, anunci¨® desde una ventana del Reichstag la abdicaci¨®n del kaiser?
Cinco a?os despu¨¦s, nuevamente en un 9 de noviembre, un exsargento del Ej¨¦rcito imperial alem¨¢n logr¨® convencer a miles de simpatizantes del Partido Nazi (NSDAP) para derrocar desde M¨²nich al Gobierno alem¨¢n y pedir la creaci¨®n de una "republica nacional¡±. Hitler fracas¨® en su intento. Fue enviado a la c¨¢rcel donde escribi¨® el libro Mi Lucha, que le ayudar¨ªa a conquistar el poder en 1933. El 9 de noviembre de 1938, el f¨¹hrer orden¨® el primer gran pogromo contra la poblaci¨®n jud¨ªa que viv¨ªa en el Reich.
La fecha m¨¢s emblem¨¢tica de la historia alemana del sigo XX tuvo un giro dram¨¢tico otro 9 de noviembre cuando el portavoz del Comit¨¦ Central del Partido Comunista de la ahora desaparecida RDA, G¨¹nther Schabowski, convoc¨® a una rueda de prensa para anunciar al mundo una medida excepcional con la cual el r¨¦gimen pretend¨ªa impedir el colapso del pa¨ªs de la hoz y el martillo..
El 9 de noviembre de 1989, Schabowski, preguntado por los periodistas que deseaban saber cu¨¢ndo entrar¨ªa en vigor una medida que permit¨ªa a los ciudadanos de la RDA viajar a Occidente, pronunci¨® dos palabras que cambiaron el curso de la historia. ¡°Ab sofort¡± (a partir de ya) respondi¨® el portavoz acuciado por las preguntas que le hac¨ªa Peter Brinkmann, un periodista del Bild, que estaba sentado en la primera fila del centro de prensa.
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