La letra del ¡°bunga bunga¡±

La letra de la sentencia no deja lugar a la duda: Silvio Berlusconi se acost¨® con la marroqu¨ª Karima El Marough sabiendo que era menor de edad, pag¨¢ndole por ello grandes sumas en dinero y joyas y, llegado el caso, utilizando su inmenso poder como jefe del Gobierno de Italia para sacarla de un embrollo policial. Es por esto ¡ªincitaci¨®n a la prostituci¨®n de menores y abuso de poder¡ª que tres juezas de Mil¨¢n lo condenaron el pasado 24 de junio a siete a?os de c¨¢rcel y a la inhabilitaci¨®n de por vida para ejercer cargo p¨²blico, en una sentencia de primera instancia cuyas motivaciones se conocen ahora.

Justo cuando a Berlusconi, a punto de ser expulsado del Senado y con su partido pol¨ªtico demediado, peor le viene. No tanto por la repercusi¨®n pr¨¢ctica de la sentencia ¡ªa¨²n tiene dos oportunidades para recurrirla¡ª, sino por el perfil que, en papel timbrado, se hace del personaje. En primer lugar, porque aun sabiendo que la marroqu¨ª El Marough, m¨¢s conocida en el ambiente como Ruby Robacorazones, todav¨ªa no hab¨ªa cumplido 18 a?os, el entonces primer ministro la invit¨® en dos ocasiones a su mansi¨®n de Arcore, y ¡°resulta probado que mantuvo relaciones sexuales con ella a cambio de ingentes cantidades de dinero y otras utilidades, como joyas¡±, reza la sentencia. En segundo lugar porque, al ser detenida Ruby la noche del 27 al 28 de mayo de 2010 acusada de birlar 3.000 euros a una prostituta con la que compart¨ªa piso, Berlusconi llam¨® desde Par¨ªs y presion¨® a los polic¨ªas de la comisar¨ªa central de Mil¨¢n para que la pusieran en libertad. Seg¨²n las juezas, el ¨²nico y urgente inter¨¦s del entonces jefe del Gobierno italiano era el de ¡°protegerse¡±. Para ello, asegur¨® a los polic¨ªas ¡ªen uno de los episodios m¨¢s grotescos de su biograf¨ªa¡ª que la muchacha era sobrina del entonces presidente egipcio Hosni Mubarak y que su detenci¨®n podr¨ªa desencadenar un incidente diplom¨¢tica.

Y, finalmente, la sentencia da por descontado que Berlusconi era ¡°el director¡± de las famosas noches del ¡°bunga bunga¡±. Seg¨²n las juezas de Mil¨¢n, aquello que el pol¨ªtico y magnate defini¨® como ¡°cenas elegantes¡± o inocentes ¡°espect¨¢culos de burlesque¡± ¡ªj¨®venes modelos que disfrazadas de monjas, Obama o Ronaldinho bailaban hasta quedarse en cueros¡ª formaban parte en realidad de ¡°un aut¨¦ntico sistema de prostituci¨®n¡± ideado en exclusiva para dar placer sexual al primer ministro. El tribunal, por si no bastara, resalta ¡°la capacidad de delinquir del imputado¡±, quien una vez destapado el caso intent¨® ¡ªy muchas veces consigui¨®¡ª comprar el testimonio de los testigos ¡°con la entrega de ingentes cantidades de dinero¡±.

Sin capacidad ya para hacer caer al Gobierno ¡ªla traici¨®n de su hasta ahora delf¨ªn, Angelino Alfano, le ha robado esa posibilidad¡ª y pendiente de que se ejecute de una vez su expulsi¨®n del Senado provocada por la condena definitiva por fraude fiscal en el caso Mediaset, Silvio Berlusconi se acerca lenta y vergonzosamente a su final.

Un aut¨¦ntico sistema de prostituci¨®n estaba ideado en exclusiva para el primer ministro, seg¨²n las juezas de Mil¨¢n

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