La lucha entre facciones amenaza con desatar una guerra civil en Sud¨¢n del Sur

Los enfrentamientos entre dos facciones del Ej¨¦rcito en Sud¨¢n del Sur que comenzaron el pasado domingo en la capital del pa¨ªs, Juba, y que se han cobrado la vida de entre 400 y 500 personas en solo dos d¨ªas, se hab¨ªan extendido ayer a otras regiones del pa¨ªs, lo que representa ya un serio riesgo de que degenere en una guerra civil. Asimismo, unas 20.000 personas han buscado refugio en las instalaciones de Naciones Unidas de la capital sursudanesa mientras que ciertas embajadas, en concreto la brit¨¢nica y la estadounidense, han comenzado la evacuaci¨®n de su personal diplom¨¢tico y sus ciudadanos ante el agravamiento del conflicto y aprovechando la reapertura temporal del aeropuerto.

La amenaza de que los violentos choques entre dos facciones del Ej¨¦rcito de Sud¨¢n del Sur, que hasta ahora se hab¨ªan ce?ido a la ciudad de Juba, se conviertan en una guerra civil que afecte a todo el pa¨ªs, parece cada vez m¨¢s real. En concreto, la ciudad de Bor, escenario de una masacre ¨¦tnica en 1991 y capital del Estado de Jonglei, en el este del pa¨ªs, fue escenario este martes por la noche de intensos tiroteos despu¨¦s de que el comandante Peter Gadet y buena parte de sus hombres se alzaran en armas en apoyo de uno de los dos l¨ªderes enfrentados en este conflicto, el exvicepresidente Reik Machar. Finalmente, los leales a Machar se han hecho con el control de la localidad, seg¨²n un portavoz del Ej¨¦rcito. Asimismo, Naciones Unidas ha informado de que tambi¨¦n se han producido choques en Torit, capital del Estado de Equatoria Oriental.

Los enfrentamientos comenzaron el domingo por la noche despu¨¦s de que el presidente Salva Kiir diera la orden de detenci¨®n de su exvicepresidente y rival pol¨ªtico, Riek Machar, a quien acusaba de estar preparando un golpe de Estado contra ¨¦l. Sin embargo, miembros de la Guardia Presidencial de la etnia nuer, a la que pertenece Machar, se negaron a ejecutar esta orden dada por el presidente Kiir, de la etnia dinka, lo que supuso la chispa que dio origen al conflicto, que pronto se extendi¨® por los cuarteles militares de la capital. Los dinka y los nuer son las dos comunidades m¨¢s importantes del pa¨ªs. Machar, que de momento ha logrado huir, ha negado que estuviera preparando un golpe de Estado.

El martes por la noche, 48 horas despu¨¦s del inicio de las hostilidades entre las dos facciones del Ej¨¦rcito, el responsable de la misi¨®n de paz de la ONU en el pa¨ªs, Herv¨¦ Ladsous, informaba al Consejo de Seguridad de la muerte de entre 400 y 500 personas s¨®lo en Juba, bas¨¢ndose en la informaci¨®n recibida desde distintos hospitales de la ciudad. Sin embargo, este mi¨¦rcoles, el presidente Kiir ha asegurado que no se trata de un conflicto ¨¦tnico, sino pol¨ªtico, y ha insistido en que Machar y sus partidarios estaban preparando un golpe de estado contra ¨¦l. Sin embargo, ha abierto una puerta al di¨¢logo asegurando que se sentar¨ªa con su rival para negociar.

La dimensi¨®n que han alcanzado estos enfrentamientos en tan solo 48 horas ha forzado a las legaciones diplom¨¢ticas a poner en marcha sus planes de evacuaci¨®n. En concreto, las embajadas de Estados Unidos y Reino Unido han empezado a sacar del pa¨ªs a su personal y a sus ciudadanos aprovechando la reapertura del aeropuerto este mi¨¦rcoles. Otros, sin embargo, no pueden acceder a los vuelos para salir de Juba. Mientras, ciudadanos de pa¨ªses lim¨ªtrofes, como Kenia y Uganda, est¨¢n regresando a sus casas a trav¨¦s de v¨ªas terrestres y acompa?ados por un fuerte dispositivo militar, unas 20.000 personas han decidido buscar refugio en las instalaciones de que dispone Naciones Unidas en la capital o en sus alrededores, donde se est¨¢n viendo desbordados para atenderles.