Obama promete a Merkel que no volver¨¢ a espiar su tel¨¦fono m¨®vil

En un extraordinario gesto, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, proclam¨® ante las c¨¢maras de la segunda cadena de la televisi¨®n p¨²blica, ZDF, que no dejar¨¢ que las relaciones entre Alemania y su pa¨ªs se da?en por las labores de inteligencia y prometi¨® que, mientras ¨¦l sea presidente, el tel¨¦fono m¨®vil de la canciller alemana, Angela Merkel, no volver¨¢ a ser espiado.

La entrevista de la cadena ZDF, que se difundi¨® el s¨¢bado por la noche, qued¨® el domingo opacada por la exclusiva que ofreci¨® la revista Spiegel a sus lectores. Seg¨²n el semanario que se edita en Hamburgo, la Fiscal¨ªa General alemana cree que hay suficientes elementos para abrir una causa penal para establecer responsabilidades en el espionaje del tel¨¦fono m¨®vil de la canciller.

La Fiscal¨ªa a¨²n no ha tomado una decisi¨®n, pero el tr¨¢mite oficial mantiene en estado de alerta a la propia canciller Merkel y a su ministro de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, que temen que una investigaci¨®n oficial pueda provocar un da?o relevante a las relaciones bilaterales, que quedaron muy deterioradas el a?o pasado a causa del esc¨¢ndalo protagonizado por las escuchas de la NSA, la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos, desveladas por el antiguo analista inform¨¢tico Edward Snowden.

En la inusual entrevista concedida por Obama al programa de noticias Heute Journal de la ZDF, de 16 minutos de duraci¨®n, el mandatario estadounidense se?ala que las diferencias de opini¨®n no justifican el espionaje telef¨®nico. Obama evit¨® pedir disculpas por el espionaje llevado a cabo por la NSA e, incluso, justific¨® la importancia de las investigaciones para la seguridad nacional de su pa¨ªs.

¡°No puedo da?ar esta relaci¨®n con medidas de vigilancia que obstruyan nuestra comunicaci¨®n de confianza¡±, dijo Obama. ¡°Mientras yo sea el presidente de Estados Unidos, la canciller alemana no necesita preocuparse por eso. El hecho de que no tengamos siempre una misma opini¨®n sobre pol¨ªtica exterior no es una raz¨®n para realizar escuchas telef¨®nicas¡±, prometi¨® el mandatario.

Pero Obama destac¨® que los servicios secretos de su pa¨ªs seguir¨¢n recopilando datos y record¨® que la capacidad de Estados Unidos en materia de espionaje es muy superior a las del resto de los pa¨ªses. ¡°Por definici¨®n, estos servicios tienen la tarea de averiguar lo que la gente est¨¢ planificando, lo que pasa en sus mentes, sus objetivos. Eso apoya nuestras metas diplom¨¢ticas y pol¨ªticas¡±, dijo Obama para justificar el trabajo de la pol¨¦mica NSA.

El espionaje electr¨®nico que llev¨® a cabo ¡ªy todo parece indicar que sigue realizando la NSA en territorio alem¨¢n¡ª, volvi¨® a situar al Gobierno alem¨¢n en una dif¨ªcil situaci¨®n. La determinaci¨®n de la Fiscal¨ªa General de abrir un sumario para investigar el espionaje del tel¨¦fono m¨®vil de Merkel ser¨ªa una medida que amenaza con enturbiar las relaciones con el Gobierno de Estados Unidos.

¡°La Fiscal¨ªa General ve razones para iniciar una investigaci¨®n y con ello sit¨²a al Gobierno federal ante un dilema: se arriesga a abrir una crisis germano-norteamericana o a quedar en rid¨ªculo¡±, se?ala la revista Spiegel al revelar los pormenores de la acci¨®n iniciada por la justicia alemana.

Despu¨¦s del discurso pronunciado por Barack Obama el viernes pasado en Washington, en Berl¨ªn existe la convicci¨®n de que el mandatario estadounidense no tiene inter¨¦s en cancelar el trabajo de espionaje llevado a cabo por la NSA y que su ¨²nica intenci¨®n es someter la labor de la agencia a controles independientes.

Una investigaci¨®n oficial para determinar responsabilidades en el espionaje del m¨®vil de Merkel ¡ªadem¨¢s de poner en el punto de mira de la Fiscal¨ªa alemana a la Embajada de Estados Unidos en Berl¨ªn, desde donde supuestamente se realizaron las escuchas ilegales a la canciller¡ª, tambi¨¦n podr¨ªa dejar al desnudo las actividades de la NSA en Alemania, una acci¨®n que enviar¨ªa una poderosa e in¨¦dita se?al a los ciudadanos pa¨ªs: el Gobierno federal alem¨¢n no se deja intimidar por el Gran Hermano de EE UU.