Europa env¨ªa m¨¢s tropas a Rep¨²blica Centroafricana
Francia despliega otros 400 soldados mientras Bruselas ultima la operaci¨®n
La localidad de Carnot es un claro ejemplo de lo que, grosso modo, pasa en Rep¨²blica Centroafricana: no hay fuerzas suficientes para detener la violencia de las milicias cristianas contra la poblaci¨®n musulmana. Ni del contingente africano ni de las tropas francesas. All¨ª, en Carnot, como relata la organizaci¨®n M¨¦dicos sin Fronteras (MSF), la que cuenta con mayor presencia en el pa¨ªs, los soldados cameruneses han optado por asegurar el per¨ªmetro de la parroquia donde est¨¢n refugiados la mayor parte de los musulmanes amenazados. Y esto porque, b¨¢sicamente, no pueden ir m¨¢s all¨¢ y tratar de cortar el paso a los milicianos cristianos anti-balaka (anti-machete).
?Sirve esto de algo? ¡°El hecho de que est¨¦n all¨ª los cameruneses¡±, relata v¨ªa telef¨®nica desde Bangui, la capital, Albert Caram¨¨s, responsable de Asuntos Humanitarios de MSF, ¡°frena la violencia, pero si abandonan la zona, la probabilidad de que ataquen es muy alta¡±.
El informe publicado la semana pasada por Amnist¨ªa Internacional (AI), en el que hablaba de ¡°limpieza ¨¦tnica¡± en algunas localidades del noroeste del pa¨ªs, ha hecho saltar las alarmas. Sea por esto o porque desde el recrudecimiento del conflicto las tropas internacionales se saben impotentes ante la falta de soldados, el Gobierno franc¨¦s anunci¨® el s¨¢bado un refuerzo de 400 soldados, con lo que contar¨¢ en el terreno con 2.000 militares.
Al tiempo que Par¨ªs comunicaba el env¨ªo de nuevas tropas, la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, manifestaba desde la sede de la ONU en Nueva York que confiaba en que la fuerza europea con la que asistir¨¢ a los franceses, unos 500 militares (de los que 50 ser¨¢n espa?oles), est¨¦ pronto sobre el terreno. Unos y otros se sumar¨¢n a los 5.500 efectivos de la misi¨®n de la Uni¨®n Africana.
¡°La situaci¨®n es muy tensa por las amenazas a la poblaci¨®n musulmana¡±, cuenta Caram¨¨s, en contacto diario con sus compa?eros en Carnot. Seg¨²n este empleado de MSF, la violencia contra los musulmanes por parte de los grupos de autodefensa cristianos se ha disparado en las ¨²ltimas tres semanas. ¡°Antes hab¨ªa m¨¢s bolsas de Seleka [milicia musulmana que apoy¨® el golpe de Estado de marzo de 2013], pero ahora se han ido hacia el centro del pa¨ªs¡±. Ahora quiere decir despu¨¦s de que Michel Djotodia, l¨ªder golpista, dejara el poder ante la arremetida cristiana y la presi¨®n internacional en manos de la exalcaldesa de la ciudad de Bangui Catherine Samba Panza.
Desde entonces, como denunciaba AI, los anti-balaka han aprovechado la exigua presencia de tropas internacionales m¨¢s all¨¢ de Bangui ¡ªel grueso del contingente est¨¢ en la capital¡ª para matar con especial virulencia ¡ªincluidas las decapitaciones¡ª a civiles que profesan el islam, entre ellos mujeres y ni?os pasados a cuchillo. Y lo hacen, sobre todo, en la franja oeste del pa¨ªs, regi¨®n que colinda con las vecinas Camer¨²n y Chad y donde hay importantes bolsas de poblaci¨®n musulmana (minoritaria en el pa¨ªs: representa el 15% del mapa religioso, frente al 70% de cristianos). Muchos de los que conducen los camiones que llegan de Camer¨²n para abastecer el comercio o de los pastores que conducen el ganado desde Chad son precisamente musulmanes.
Ahora, la violencia interreligiosa los ha hecho desaparecer del mapa ¡ªla ONU cifra en alrededor de 800.000 los desplazados internos¡ª, con lo que la crisis tiene una nueva vertiente: el desabastecimiento de la poblaci¨®n de alimentos de primera necesidad. Las ONG Oxfam y Acci¨®n contra el Hambre han informado de que solo 10 de los 40 proveedores de Bangui siguen trayendo productos. Y si a esto se le suma que la ¨¦poca de siembra est¨¢ a punto de llegar, pero el acceso a las semillas es cuando menos dif¨ªcil, los temores se multiplican.
?La violencia es solo por la religi¨®n? ¡°No¡±, responde Caram¨¨s. ¡°Hay factores hist¨®ricos, ¨¦tnicos... Las etnias del norte se sienten m¨¢s cercanas a los pa¨ªses vecinos y por eso se forman grupos armados¡±, dice el responsable de MSF.
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