5 empresas pactan pagar compensaciones a las v¨ªctimas del colapso de Bangladesh
Ropa Limpia intenta que otras firmas se sumen a un fondo que pretende reunir 30 millones
Hace exactamente diez meses, colaps¨® en Bangladesh un edificio donde 4.600 personas fabricaban ropa para grandes marcas a cambio de un sueldo m¨ªsero. Murieron 1.138 personas y m¨¢s de dos mil resultaron heridas. Cinco empresas, las espa?olas El Corte Ingl¨¦s, Inditex y Mango, la canadiense Loblaw y la danesa Mascot, han acordado aportar dinero a un fondo para compensar a los damnificados. La decisi¨®n supone en el caso de Mango un cambio de postura porque desde el principio intent¨® distanciarse del colapso con el argumento de que hizo un pedido de prueba que no hab¨ªa comenzado, cosa que desminti¨® una trabajadora este diario y rechazan las ONG. Fuentes de esa firma recalcan que la aportaci¨®n ¡°es al fondo humanitario y solidario y no implica responsabilidad legal por el accidente¡±.
La campa?a internacional Ropa Limpia pretende que las firmas que, seg¨²n su recuento, se surt¨ªan o se hab¨ªan surtido de los cinco talleres del Rana Plaza, ubicado a las afueras de Dacca, costeen las compensaciones. La campa?a ?Pagad ya! se centra ahora en que Benetton, Kik y Childen¡¯s Place se sumen. En l¨ªnea con su opacidad habitual, acrecentada en casos de desastre, las cinco empresas que ya se han unido al fondo han suscrito un acuerdo de confidencialidad para no detallar p¨²blicamente sus aportaciones ni el monto total, seg¨²n una fuente de una de las firmas.
El fondo, supervisado por la Organizaci¨®n Internacional del trabajo (OIT) es voluntario y est¨¢ desvinculado de cualquier responsabilidad judicial. Solo a partir de esas premisas ha sido posible lograr que las empresas se implicaran en los pagos a los afectados y las familias de los fallecidos y desaparecidos.
¡°Celebramos estas primeras aportaciones al fondo. Anteriormente las iniciativas para compensar a las v¨ªctimas han sido aleatorias, desiguales, impredecibles, poco transparentes y han dejado a una gran parte de las v¨ªctimas sin nada¡±, ha asegurado Ineke Zeldenrust, coordinadora internacional de la campa?a Ropa Limpia.
Desde el primer d¨ªa Mango insisti¨® en que no estaba fabricando en el edificio Rana Plaza, sino que hab¨ªa hecho un pedido de prueba que no hab¨ªa comenzado. La enfermera Laboni Khanom, de 21 a?os, que trabajaba en el taller de la quinta planta de edificio Rana Plaza y que perdi¨® el brazo izquierdo, lo desminti¨® as¨ª. ¡°Hab¨ªa que terminar un pedido de Mango aquella noche¡±, explic¨® a esta reportera en junio pasado en el hospital de Bangladesh donde estaba ingresada. El Corte Ingl¨¦s admiti¨® que s¨ª estaba fabricando en aquel edificio e Inditex lo hab¨ªa hecho pero antes de 2012.
El jefe de IndustriaALL, representante de los empleados fallecidos, sus familias y de los heridos, en Bangladesh, Roy Ramesh, estimaba el pasado junio que har¨ªan falta unos 50 millones de euros para indemnizar a los afectados. La campa?a Clean Clothes, en la que ese sindicato mundial participa, se ha propuesto reunir 30 millones para el 24 de abril, cuando se conmemore el primer aniversario del colapso. A la aportaci¨®n que hagan al fondo del Rana Plaza las cinco empresas firmantes (y las firmas que unan, si lo hacen) se sumar¨¢n lo que den las autoridades de Bangladesh, la patronal del textil y los propietarios de los talleres de costura.
A la tragedia en uno de los mayores desastre industriales de la historia, le sigui¨® la firma de otro acuerdo para inspeccionar las instalaciones de Bangladesh en las que se fabrica la moda low cost que despu¨¦s se vende en todo el mundo.
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