A 60 d¨ªas de las elecciones europeas m¨¢s tensas
El resultado de las europeas influir¨¢ en el presidente de la Comisi¨®n Europea El 25-M funciona como una especie de plebiscito para la pol¨ªtica de austeridad
Hay episodios en la crisis europea en los que la democracia pareci¨® ir camino del cubo de la ropa vieja: los tecn¨®cratas tomaron el poder en Grecia e Italia, la Uni¨®n impidi¨® celebrar un refer¨¦ndum sobre recortes en Atenas y las troikas sacaron la tijera sin someterse a control parlamentario. Se acerca el momento de votar y el estado de ¨¢nimo de Europa es impredecible.
Las elecciones del 25 de mayo tienen m¨¢s trascendencia que en el pasado, porque por primera vez el resultado influye para nombrar al presidente de la Comisi¨®n, aunque tambi¨¦n por vez primera la credibilidad de las instituciones est¨¢ por los suelos. Llega la hora de la campa?a, de las ideas: unos comicios tradicionalmente inapetentes ganan importancia ante la tendencia imparable a la europeizaci¨®n de la pol¨ªtica. Un total de 28 pa¨ªses elegir¨¢n en cuatro d¨ªas de votaci¨®n a 751 eurodiputados. La primera lectura ser¨¢ nacional, pero estas elecciones van m¨¢s all¨¢.
La pol¨ªtica europea es ya pol¨ªtica interna en cada uno de los Veintiocho. Y la silla del presidente de la Comisi¨®n es fundamental: las urnas son una suerte de plebiscito para la pol¨ªtica de austeridad patrocinada por los conservadores en connivencia con la izquierda moderada, que no ha dicho esta boca es m¨ªa en el Consejo. Los sondeos pronostican un empate entre populares y socialdem¨®cratas, una fuerte subida de la izquierda unitaria y un descenso de liberales y verdes. Y la pujanza de un crisol de fuerzas euroesc¨¦pticas, populistas, incluso eur¨®fobas.
JEAN-CLAUDE JUNCKER | Gestor de la crisis
Capaz de tirar por elevaci¨®n si hace falta ¡ªy vaya si hace falta¡ª, el ex primer ministro luxemburgu¨¦s Jean- Claude Juncker (Redange, 1954) es el elegido para pilotar el legado de los populares, grandes protagonistas pol¨ªticos de la crisis por su abrumador dominio en la Comisi¨®n y el Consejo. Lenguaraz hasta con Merkel (¡°pierde de vista el bienestar europeo¡±) e incluso m¨¢s arriba (¡°hay que detener a los mercados; tenemos los instrumentos de tortura en el s¨®tano, los mostraremos si es preciso¡±), este socialcristiano debe proteger el relato de la exitosa salida del t¨²nel que publicita el actual mandarinato del euro, porque fue responsable de su gesti¨®n en el Eurogrupo. Esa indudable experiencia es tambi¨¦n su gran punto d¨¦bil, con la crisis zumbando en los o¨ªdos de millones de europeos.
MARTIN SCHULZ | Un exlibrero de pueblo
Sangu¨ªneo en una ciudad en la que abundan los c¨ªnicos recalcitrantes, Martin Schulz (Hehlrath, Alemania, 1955) se declara ¡°insatisfecho y rabioso con el estado de las instituciones¡±, en una de las escas¨ªsimas autocr¨ªticas que pueden o¨ªrse en Bruselas. Presidente de la Euroc¨¢mara y esencial en la negociaci¨®n para formar la gran coalici¨®n en su pa¨ªs, el l¨ªder socialdem¨®crata no ha dudado en criticar la ¡°miop¨ªa alemana¡± en la gesti¨®n de la Gran Recesi¨®n: la austeridad ¡°ha retardado y encarecido la salida de la crisis¡±. Partidario de dar un golpe de tim¨®n, este exlibrero de pueblo se est¨¢ convirtiendo en una suerte de antagonista de Merkel: ¡°Donde la canciller dice que necesitamos una democracia acorde con el mercado, yo digo que necesitamos un mercado acorde con la democracia¡±.
ALEXIS TSIPRAS | Vuelve la izquierda
¡°Resistid al demagogo¡±, titulaba un diario alem¨¢n junto a una foto de Alexis Tsipras justo antes de las elecciones griegas. El jovenc¨ªsimo Tsipras (Atenas, 1974) levanta pasiones, y no solo en su pa¨ªs: abierto, atractivo, encantador y sin v¨ªnculos con los partidos mayoritarios que llevaron a Grecia a la cat¨¢strofe, el l¨ªder de izquierda unitaria maneja un mensaje seductoramente simple: las medidas de austeridad son ¡°una barbaridad¡±; ¡°los griegos, y otros pa¨ªses perif¨¦ricos, est¨¢n de rodillas¡±. Con un discurso plagado de interesantes contradicciones ¡ªno quiere salir del euro, pero casi todo lo que propone conduce a esa salida¡ª, AlexisTsipras es odiado en Bruselas por frases como esta: ¡°Pronto nos dir¨¢n que prescindamos de la democracia a cambio de pr¨¦stamos¡±.
GUY VERHOFSTADT | Federalista apasionado
¡°Kafka y Einstein so impensables ahora: sus descendientes murieron en Auschwitz¡±. El due?o de esa lengua venenosa, Guy Verhofstadt (Dendermonde, 1953) es a su vez presidente del grupo liberal y ex primer ministro de B¨¦lgica. Federalista apasionado, tuvo posibilidades de presidir la Comisi¨®n en 2005, pero el tradicional vetismo brit¨¢nico lo impidi¨®. Solo tiene alguna opci¨®n si su partido contiene el declive que predicen los sondeos y si consigue ejercer como bisagra. Eso no le impide desplegar un indudable atractivo ret¨®rico: la crisis del euro es ¡°una policrisis de credibilidad pol¨ªtica¡±; Europa, ¡°un continente aquejado de estrabismo por la sobredosis de nacionalismo¡±. Y como broche, opina que Berl¨ªn lidera ¡°un intento de reducir la UE a una mera organizaci¨®n intergubernamental¡±.
JOS? BOV? y SKA KELLER | T¨¢ndem francoalem¨¢n
Los Verdes han elegido al sindicalista, agitador y altermundista Jos¨¦ Bov¨¦ (Talence, Francia, 1953) junto a una de las grandes novedades de las listas europeas: la alemana Ska Keller (Brandemburgo, 1981; s¨ª, 1981). Gran estudiosa del islamismo y especialista en inmigraci¨®n, Keller ¡ªque habla seis idiomas¡ª empez¨® en grupos de defensa de los animales en el Este de Alemania, y a partir de ah¨ª se fue politizando: su instinto le permiti¨® deshacerse de la presidenta del grupo, la antinuclear Rebecca Harms, en las primarias. Escorada a la izquierda de los Verdes ¡ªcomo Bov¨¦, su compa?ero de cartel¡ª, no domina a¨²n la puesta en escena, pero gana en las distancias cortas. Ha viajado con frecuencia a Espa?a: hasta el punto de que lleva fotos de las vallas de Ceuta y Melilla en su tel¨¦fono.
MARINE LE PEN, G. WILDERS | Ultras y otras especies
Marine Le Pen salt¨® al escenario en Par¨ªs con su rubia melena al viento; estaba a punto de cosechar seis millones de votos en la primera vuelta de las elecciones de 2012. ¡°S¨ª, Francia, brama tu rabia¡±, dijo ante miles de personas a modo de sucinto resumen de su ideolog¨ªa. Le Pen (Neuilly-sur-Seine, 1968) es quiz¨¢ la figura m¨¢s visible de una amalgama de grupos pol¨ªticos dif¨ªciles de definir, que van desde euroesc¨¦pticos hasta directamente eur¨®fobos, pasando por herederos de partidos fascistas y xen¨®fobos. Aboga por suprimir la libre circulaci¨®n de personas y no se anda con chiquitas: ¡°La UE es como la URSS, esto no es democracia¡±. Y acaba de formar una alianza con grupos similares, entre los que destaca el liderado por Geert Wilders (Venlo, 1963), partidario de que Holanda salga del euro.
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