El Ej¨¦rcito brasile?o ocupar¨¢ la principal fortaleza narco de R¨ªo

El Ej¨¦rcito brasile?o y la Fuerza Nacional irrumpir¨¢n en los pr¨®ximo d¨ªas en el complejo de favelas de Mar¨¦, en la zona norte de R¨ªo de Janeiro, donde las principales facciones del narcotr¨¢fico carioca se han hecho fuertes tras la p¨¦rdida de otras favelas estrat¨¦gicas que han sido ocupadas en los ¨²ltimos a?os por Unidades de Polic¨ªa Pacificadora (UPP). La decisi¨®n, sellada por el Gobernador de R¨ªo, Sergio Cabral, el ministro de Justicia, Jos¨¦ Eduardo Cardozo, y el Jefe del Estado Mayor Conjunto de la Fuerzas Armadas, General Jos¨¦ Carlos de Nardi, supone un golpe hist¨®rico a las facciones narco, cada d¨ªa m¨¢s asfixiadas, aunque tambi¨¦n pone de manifiesto la incapacidad de la polic¨ªa carioca para controlar los movimientos de los criminales a menos de tres meses de la Copa del Mundo. El Ej¨¦rcito permanecer¨¢ en el Complexo da Mar¨¦ al menos hasta que concluya el Mundial. Posteriormente, un contingente de 1.500 polic¨ªas pacificadores deber¨¢n ocupar el territorio indefinidamente.

Mar¨¦ es el ¨²ltimo gran basti¨®n del narcotr¨¢fico que queda por ocupar en la periferia m¨¢s pr¨®xima de R¨ªo. El Complexo do Alem?o fue ocupado en noviembre de 2010 y el de Caj¨² comenz¨® a quedar bajo el control de la polic¨ªa hace justo un a?o. Hace algunos d¨ªas tambi¨¦n comenzaron las incursiones en el Complexo de Costa Barros que, aunque m¨¢s alejado, tambi¨¦n se ha convertido en el refugio de narcotraficantes de cierta relevancia expulsados de otras favelas. No deja de sorprender que ante la oleada de ataques a la polic¨ªa en otras zonas, Cabral haya apostado por la ocupaci¨®n de un nuevo complejo de 16 favelas con una poblaci¨®n superior a los 130.000 habitantes, peligros¨ªsimo y ubicado en una zona estrat¨¦gica, ya que est¨¢ delimitado por la autopista que conecta el aeropuerto internacional Antonio Carlos Jobim con la ciudad y por otra arteria principal de acceso a R¨ªo, la Avenida Brasil. El Complexo da Mar¨¦ representa el avispero al que el Estado de R¨ªo no se hab¨ªa atrevido a golpear hasta ahora, tanto por su extensi¨®n y complejidad urban¨ªstica, como por la alta concentraci¨®n de narcotraficantes y la complicidad que estos cultivan desde hace d¨¦cadas con un amplio sector de la poblaci¨®n local. Desde un punto de vista puramente t¨¢ctico, asaltar y ocupar este megasuburbio es una de las operaciones de mayor tensi¨®n b¨¦lica lanzadas por el Estado de R¨ªo.

No se sabe el n¨²mero de efectivos militares ni los cuerpos que intervendr¨¢n en la operaci¨®n, aunque es previsible que los fusileros navales y las brigadas paracaidistas tengan un papel importante, siguiendo el modelo de la ocupaci¨®n del Complexo do Alem?o, en la que intervinieron 11.000 efectivos, entre comandos de operaciones especiales, polic¨ªas militares, civiles y federales y batallones del Ej¨¦rcito. Tampoco se sabe si la ocupaci¨®n de Mar¨¦ ir¨¢ acompa?ada de intervenciones paralelas en otras favelas, como algunas del Complexo do Alem?o, Manguinhos o Rocinha, donde las UPP est¨¢n sometidas al hostigamiento de grup¨²sculos narco que han ganado ox¨ªgeno y terreno en los ¨²ltimos meses. En estas favelas se ha registrado en los ¨²ltimos meses el grueso de ataques a destacamentos pacificadores, el ¨²ltimo la semana pasada.

Seg¨²n fuentes de inteligencia, los l¨ªderes de una de las principales facciones narco de R¨ªo, Comando Vermelho (CV), habr¨ªa decidido iniciar una serie de ataques coordinados a unidades pacificadores como reacci¨®n desesperada a su expulsi¨®n de innumerables favelas. Seg¨²n la versi¨®n que dan algunos medios brasile?os, el debilitamiento progresivo de las redes narco cariocas habr¨ªa provocado que la principal facci¨®n criminal de Sao Paulo, Primeiro Comando da Capital (PCC), est¨¦ dando cobertura por primera vez a sus iguales de R¨ªo con el env¨ªo de armamento y droga.