B¨²squeda sin pistas en medio de la nada

¡°Si este misterio tiene soluci¨®n, lo resolveremos¡±. El primer ministro Tony Abbott, tir¨® esta semana del proverbial optimismo australiano pese a que reconoce que la b¨²squeda del MH370 es la ¡°m¨¢s dif¨ªcil en la historia de la humanidad¡±. El Boeing 777 de Malaysia Airlines desapareci¨® el 8 de marzo cuando volaba de Kuala Lumpur a Pek¨ªn con 239 almas a bordo. Cuatro semanas despu¨¦s no se ha hallado ning¨²n resto, pese al in¨¦dito despliegue a¨¦reo y mar¨ªtimo con medios de ocho pa¨ªses, en una remota e inmensa extensi¨®n del oc¨¦ano ?ndico frente a las costas occidentales de Australia.

Este s¨¢bado un barco chino, el Haixun 01,inform¨® de que hab¨ªa detectado una se?al en la misma frecuencia de las emitidas por las cajas negras (37,5 kilohercios), aunque las m¨²ltiples pistas falsas durante este mes han llevado a las autoridades a mostrarse prudentes, ya que no tienen ninguna confirmaci¨®n de que puedan corresponder al avi¨®n perdido. ¡°No ser¨ªa la primera vez que vemos algo para luego llevarnos una decepcion¡±, dijo el ministro de Defensa, David Johnston. Seg¨²n China's Liberation Daily, tres personas a bordo del nav¨ªo oyeron las se?ales pero no fueron grabadas.

La operaci¨®n para encontrar el Boeing 777 de Malaysia Airlines no tiene precedentes. En la ¨²nica parecida, la del Airbus de Air France que se estrell¨® con 228 personas a bordo en el Atl¨¢ntico sur en 2009, se conoc¨ªa la ¨²ltima posici¨®n del avi¨®n y se recuperaron restos del aparato y 50 cuerpos ya en los primeros d¨ªas. A¨²n as¨ª, se tard¨® casi dos a?os en encontrar las cajas negras, en una operaci¨®n que cost¨® 34,6 millones de euros (se estima en otros 80 millones el rastreo en superficie, seg¨²n un estudio publicado por la Sociedad Internacional de Investigadores de Seguridad A¨¦rea, ISASI).

EE UU dijo el jueves que ya ha gastado 2,4 millones en el rastreo del avi¨®n malasio. Australia, que tiene a seis ciudadanos desaparecidos con el avi¨®n, ha tenido que asumir la operaci¨®n, ya que se supone (con base en el an¨¢lisis de las ¨²ltimas se?alas recibidas del MH370 en un sat¨¦lite) que el B-777 se estrell¨® en alg¨²n lugar del ?ndico sur, dentro de la zona de rescate mar¨ªtimo que corresponde al gigante austral. La agencia creada por el Gobierno de Canberra para coordinar el operativo no da datos del coste pero Abbot (de nuevo el t¨®pico no worries de los aussies) considera ¡°razonable¡± asumirlo. ¡°Es un acto de ciudadan¨ªa internacional¡±.

En el caso del MH370, nunca antes tantos pa¨ªses se hab¨ªan implicado en un rastreo mar¨ªtimo. Jam¨¢s las pesquisas para encontrar un avi¨®n han sido tan extensas e inciertas. Casi sin pistas. A cientos (inluso miles) de kil¨®metros de la costa. En uno de los peores mares del planeta para navegar. ¡°Al final, quiz¨¢s ni siquiera sepamos la causa real¡± del incidente, aventur¨® el jefe nacional de la polic¨ªa de Malasia, Khalid Abu Bakar el mi¨¦rcoles pasado.

Un nuevo jarro de agua fr¨ªa a las esperanzas de las familias de las v¨ªctimas, que trat¨® de contrarrestar al d¨ªa siguiente el primer ministro malasio Najib Razak en Perth que proclam¨® que "no renunciar¨¢" a la b¨²squeda, mientras el primer ministro chino, Li Keqiang, emplazaba a Abbot a ¡°fortalecer los esfuerzos¡± del rastreo.

Entre la confianza del pol¨ªtico australiano (¡°tenemos a las mejores mentes del mundo trabajando en esto¡±) y el pesimismo del polic¨ªa malayo, cientos de personas aplican el voluntarismo desde hace 20 d¨ªas en la b¨²squeda en el ?ndico. Empez¨® solo con medios a¨¦reos (hasta 10 aviones militares y cuatro civiles) y se han ido sumando hasta 11 nav¨ªos.

Ocho pa¨ªses (Australia, Malasia, China, Nueva Zelanda, Jap¨®n, Corea del Sur, Reino Unido y Estados Unidos ) participan en el dispositivo, al que se sum¨® el mi¨¦rcoles el submarino nuclear brit¨¢nico Tireless, viejo conocido de los espa?oles por la pol¨¦mica que suscit¨® su presencia en Gibraltar desde mayo de 2000 a mayo del a?o siguiente para ser reparado.

Un sumergible con 30 a?os de vida que deber¨ªa haber sido retirado en 2013 (seg¨²n la previsi¨®n del comit¨¦ de Defensa de la C¨¢mara de los Comunes en 2006). ¡°Con su capacidad de b¨²squeda submarina avanzada ser¨¢ capaz de contribuir a los intentos de localizar el avi¨®n desaparecido¡±, auguraba la Royal Navy, que tambi¨¦n ha enviado a la zona un barco oceanogr¨¢fico, el Echo. Este nav¨ªo comenz¨® el pasado jueves la b¨²squeda submarina de las cajas negras, a la que se sum¨® el viernes el australiano Ocean Shield (con un equipo facilitado por la Marina de EE UU).

La se?al de radio que emiten los emisores adjuntos (ULB) a los grabadores de voz y datos dura al menos 30 d¨ªas (10 m¨¢s seg¨²n los fabricantes). El tiempo se acaba y esa b¨²squeda subacu¨¢tica (con un equipo remolcado mediante un cable para escuchar los sonidos bajo el mar) tiene pocas probabilidades de ¨¦xito sin localizar antes alg¨²n resto del avi¨®n para acotar la zona de rastreo, seg¨²n comenta David Gallo, director del Instituto Oceanogr¨¢fico de Woods Hole (EE UU), que particip¨® en la recuperaci¨®n del AF447. ¡°Cuanto m¨¢s se tarde en localizar los restos m¨¢s dif¨ªcil es proyectar adecuadamente¡± el lugar del accidente.

Con todo, se ha determinado una senda de 240 kil¨®metros que el Echo y el Ocean Shield han rastreado de forma convergente en las ¨²ltimas horas como la ¡°mejor estimaci¨®n posible de una zona probable en la que se encuentre el avi¨®n¡±, seg¨²n explic¨® el comodoro Peter Leavy, comandante de la Fuerza A¨¦rea Conjunta 658 de Australia. Por intentarlo que no quede. Las falsas alarmas de las ¨²ltimas semanas por posibles restos del avi¨®n tambi¨¦n se producen bajo el mar. El Echo capt¨® una posible pista el jueves, que luego se desech¨®: podr¨ªan ser ballenas o el sonido del motor de otro barco.

Tampoco parece que ser¨¢ de gran ayuda el Tireless en la b¨²squeda de las cajas negras del B-777 a tenor de la experiencia del AF447. El informe de la Oficina de Investigaci¨®n y An¨¢lisis francesa (BEA) sobre las operaciones de b¨²squeda considera de que no es "apropiado" usar submarinos nucleares (que solo pueden operar a unos 400 metros bajo el mar) para tratar de encontrar las cajas negras del aparato. El 2 de junio de 2009, el d¨ªa despu¨¦s del accidente del AF447, Francia env¨ªo al sumergible nuclear Emeraude, que se encontraba en Lisboa, a la zona del siniestro. Hubo que optimizar sus sensores ac¨²sticos (de una distancia de detecci¨®n de 2.000 metros a 3.200) para tratar de localizar la se?al de radio .

En el informe de la BEA destaca que el Emeraude proporcion¨® una mejora en la b¨²squeda en superficie porque desarrolla "mayor velocidad (entre seis y 10 nudos) que otros nav¨ªos" utilizados. Y con la enorme ventaja de no necesitar repostar al ser de propulsi¨®n nuclear. Pero las restricciones de seguridad por la presencia de un submarino nuclear oblig¨® a tomar medidas para evitar colisiones con los otros nav¨ªos en la zona. El Emeraude "tuvo que interrumpir sus labores de escucha cada d¨ªa para regresar a la superficie" y recibir las ¨®rdenes oportunas para coordinar las operaciones.

En todo caso, el submarino franc¨¦s no hubiese podido encontrar las cajas. Uno de los emisores, el del grabador de datos, sali¨® despedido y nunca se encontr¨® (pero s¨ª la caja). El otro (el unido al grabador de voz) sufri¨® da?o en el impacto y no emit¨ªa. Al final, el AF447 se encontr¨® gracias al sonar y las c¨¢maras electr¨®nicas del submarino aut¨®nomo REMUS del Instituto de Woods Hole, a 3.900 metros de profundidad, a solo 10 kil¨®metros de la ¨²ltima posici¨®n conocida.

?Se aclarar¨¢ alg¨²n d¨ªa el misterio del MH370? ¡°No es algo que se vaya a resolver en dos semanas¡±, opina Angus Houston, el militar retirado que Abbott ha nombrado para dirigir la b¨²squeda. ¡°Nos llev¨® m¨¢s de 60 a?os encontrar el Sidney¡±, un buque de guerra hundido en el oeste de Australia en la Segunda Guerra Mundial con 645 marinos.