Bachelet presenta su reforma educativa para superar la desigualdad
La presidenta firma los primeros proyectos de ley que buscan garantizar un sistema gratuito
Pocas horas antes de que se dirija a la ciudadan¨ªa desde el Congreso Nacional ¡ªuna tradici¨®n de los mandatarios chilenos cada 21 de mayo¡ª la socialista Michelle Bachelet ha firmado los primeros proyectos de ley que conforman su reforma educativa, que ha calificado como ¡°la m¨¢s significativa que Chile ha tenido en los ¨²ltimos 50 a?os¡±. ¡°Estamos cumpliendo con lo que nos comprometimos: iniciar un proceso que permita asegurar calidad, gratuidad y acceso a la educaci¨®n¡±, ha dicho la presidenta desde el Palacio de la Moneda.
Bachelet asumi¨® su segundo periodo el pasado 11 de marzo en medio de enormes expectativas sobre la reforma educativa, con la que pretende combatir el principal problema del pa¨ªs sudamericano: la desigualdad. Fue uno de los tres pilares de su programa de Gobierno ¡ªjunto con una reforma tributaria y una nueva Constituci¨®n¡ª, apoyado por el 62% de los ciudadanos en la ¨²ltima elecci¨®n. Tanto Bachelet como el resto de la clase pol¨ªtica saben que la educaci¨®n es prioritaria para los ciudadanos y que las protestas estudiantiles de 2011 fueron la expresi¨®n del descontento que existe respecto de un sistema que segrega a los ni?os y j¨®venes de Chile. El debate, sin embargo, promete ser ¨¢lgido en el Congreso.
La presidenta ha enviado tres proyectos, que comenzar¨¢n a ser discutidos en el Parlamento. Uno de ellos prohibir¨¢ que las instituciones educativas que reciben financiamiento p¨²blico apliquen mecanismos de selecci¨®n de estudiantes. La presidenta tambi¨¦n ha firmado la iniciativa que evitar¨¢, gradualmente, que los padres deban ayudar a pagar la educaci¨®n escolar de sus hijos en el sistema p¨²blico. La tercera tiene relaci¨®n con una de las principales demandas del movimiento estudiantil de 2011: que en Chile nadie lucre con la educaci¨®n, como sucede hace d¨¦cadas. Y para ello el Gobierno pretende que todos los establecimientos que reciban alg¨²n tipo de aportaci¨®n del Estado destinen los recursos p¨²blicos en mejorar la calidad y, en un plazo de tres a?os, se transformen en corporaciones o fundaciones sin fines de lucro.
Los cambios en la ley buscan restringir los procesos de selecci¨®n de las instituciones educativas que reciben apoyo p¨²blico
La mandataria tiene los votos necesarios para aprobar su reforma, pero debe procurar el di¨¢logo con todos los sectores pol¨ªticos y sociales para resguardar la gobernabilidad. El ministro de Educaci¨®n, Nicol¨¢s Eyzaguirre, ha se?alado que el Ejecutivo tendr¨¢ una actitud ¡°flexible¡± para enfrentar el debate legislativo. El secretario, sin embargo, ha seguido la l¨ªnea de Bachelet respecto de sus reformas estrella: que las iniciativas se discutan no significa que haya espacio para modificar la esencia de los cambios contemplados en su programa de Gobierno.
Los estudiantes han reaccionado de inmediato y a trav¨¦s de la presidenta de la Federaci¨®n de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), Melissa Sep¨²lveda, han se?alado que se trata de una reforma ¡°sin contenido¡±, seg¨²n publica el peri¨®dico La Tercera. Los j¨®venes acusan al Gobierno de no haber dialogado y de haber fabricado su propuesta ¡°entre cuatro paredes¡±. ¡°Pretende regular el mercado educacional y no transformar a la educaci¨®n como un derecho¡±, ha comentado la dirigente.
La socialista ha arrancado con su reforma educativa solo cinco d¨ªas despu¨¦s de que la C¨¢mara de Diputados, donde tiene mayor¨ªa, aprobara el mi¨¦rcoles pasado la reforma tributaria con la que pretende financiar los cambios en el sistema de ense?anza escolar y universitaria. El objetivo es aumentar la recaudaci¨®n fiscal en tres puntos del PIB, lo que equivale a 8.200 millones de d¨®lares. Una porci¨®n importante de esos recursos ¡ªunos 5.000¡ª ser¨¢n destinados a la reforma educativa.
La presidenta aspira a un nuevo sistema que tenga como principio b¨¢sico la equidad tributaria: que los que m¨¢s tienen, contribuyan m¨¢s. Entre otras medidas, contempla el aumento de los impuestos a las grandes empresas de un 20% a un 25% en un plazo de cuatro a?os y la eliminaci¨®n gradual del Fondo de Utilidades Tributables (FUT), un sistema vigente desde la dictadura de Augusto Pinochet, in¨¦dito en el mundo: permite a los empresarios pagar impuestos solamente por las utilidades que retiran y no por sus ingresos totales.
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